Un Amor Prohibido - BIANCAIO

Capítulo 27

(NB)
-Entonces...¿Cómo sería este "Amor Prohibido"? -Me dice Paio.
-Y...¿en público Bianzalo y en privado Biancaio? -Le pregunto yo.
-Me encanta. -Me responde y me da un beso.

(NP)
Es cierto que me gustaría que Bian sea mía y de nadie más en público Y en privado, pero Gonzalo la tiene amenazada, estamos jugando con fuego y no nos quiero quemar. Por ahora, las cosas quedan así, pero no voy a estar acultándome de todos para siempre.
-¿Querés venir a mi casa hoy a la noche? -Le pregunto a Bian.
-Sí, dale. -Me responde ella.
-Te quiero. -Le digo y le doy un beso.
-Yo también. -Me dice casi en un susurro cuando ve que se acercan Flor y Nico.
-Eu, vamos que ya empieza Combate. -Nos dice Nico y nosotros asentimos.

(NB)
Llegué a mi casa, me bañé y me fui para lo de Paio. Cuando llegué toqué timbre y me abrió sonriente.
-Hola bombón. -Me saluda con un beso.
-Hola Pablin. -Le digo yo.- ¿A qué se debe tanta alegría?
-Tengo que aprovechar el momento, al fin estamos sólos y no tengo que fingir ser simplemente tu amigo. -Me dice él y me besa.
-Tenés razón, no podemos estar juntos en Combate porque nos están viendo, ¿y ahora que al fin estamos sólos vamos a seguir fingiendo? No, rey, vamos a pasarla bien. -Le digo con ánimos, entro a la casa, y le doy un beso. Le rodeo con los brazos el cuello y él mi cintura, dejo el bolso sin dejar de besarlo y nos sentamos en el sillón. Yo arriba de él, en su regazo, agarrándole la cara con las manos, y él debajo mío rodeándome la cintura.
-Sos hermosa. -Me dice examinando mi cara después de cortar el beso y yo río.- Es en serio, sos la mujer más linda que vi en toda mi vida.
-Bueno, vos tampoco estás mal, Rodriguez. -Le digo riéndome.
-¿Por qué no nos conocimos antes?, ¿Por qué no oficializamos antes de que lo haga Gonzalo? ¿Por qué es tan difícil todo? -Me dice viéndome a los ojos con una mirada que le suplica que le de una respuesta, pero la verdad es que no lo sé. No sé por qué todo es tan difícil.
-No sé, pero daría todo porque quien sea mi novio seas vos y no el tarado de Gonzalo. -Le digo apoyando mi cara en su pecho.
-Yo también... -Me dice en un susurro.