Nota #63

1K 70 0
                                    

Hola Liz:

Por fin he logrado comprar tu sorpresa ya que he encontrado una tienda disponible cerca de mi casa.

Sin embargo, cuando estaba por salir de la tienda, a lo lejos veo Antonella, no podía creer que tenía tan mala suerte para encontrarme con ella.
Antonella estaba hablando con alguien mientras se reía, acaso, ¿ella está saliendo con alguien?

No puedo creer que siga metiéndose con nosotros si ya está en una relación.
Pese a todo lo que estaba pasando, decidí salir de la tienda en dirección al hospital, pero apenas salí, Antonella se dio cuenta y gritó mi nombre.

¡Esteban!, ¿eres tú?—dijo con voz dudosa.

¿Qué quieres Antonella?—repliqué.

Con que eres tú, ¿eh?. Y, ¿para dónde vas?, acaso, ¿no te bastó mi advertencia?—dijo mientras ponía una mano en mi hombro.

No es de tu incumbencia.—Respondí mientras apretaba mi mano con enojo.

Calma tigre, no hace falta enojarse. Veo que tienes un regalo para Lizeth, ¡qué dulce!
Esta vez voy a dejar que le des el regalo, pero con una condición- dijo sonriente. -No le puede dar en persona, o si no, la pobre Lizeth no va a poder verte más.—replicó mientras quitaba la mano de mi hombro y se iba con el desconocido.

Estaba realmente furioso, ella me había amenazado, otra vez. No quiero creer sus palabras, pero sé que Antonella es capaz de todo.

Att: Esteban, tu novio

Las cartas que él nunca envió. [EDITANDO] [#2]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora