La Era De Los Robots -Yoonmin-

II

Narra Jimin

Es la hora de dormir, pero esta es diferente, porque voy a dormir por primera vez con un chico en mi cama.

Tengo miedo que me haga algo mientras duerma, ¿y si me pinta la cara? O aun aun peor, qué me viole.

-¡JIMIN! - genial, qué querrá. Me ha interrumpido mis sagrados pensamientos.

Entró a mi habitación y se sentó en la cama conmigo.

-¿Tienes pijamas de sobra? Se me olvidó traer mis cosas y hasta mañana por la tarde no me las traen. - hizo un puchero. Este no es el Suga de esta mañana, ¡¿y cómo sabe qué no puedo resistirme a los pucheros?!

-T-tú sabias mi debilidad. - hizo una cara de confundido.

-¿De qué hablas? Estoy probando cosas, y parece ser que he descubierto una muy buena. - sonrió malévolo.

¡Mierda! Me va hacer la vida imposible ahora que sabe mi debilidad.

Sin decir nada me levanto y del armario saco un pijama de Kumamon. Suga al verlo abrió los ojos impresionado.

-¡Kumamon! - se levantó corriendo hacia el pijama para abrazarlo. - ¡Gracias, me encanta Kumamon! - sonrió.

Se ve tan tierno y mono, nunca he visto una sonrisa sincera de él... ¡Pero qué piensas Park Jimin! El primer día que le conoces y ya tienes ese tipo de pensamientos con alguien que no conoces bien.

Se fue al baño para cambiarse mientras yo me tumbaba en la cama para dormirme. Al instante caí dormido en un profundo sueño.

****

Abrí mis ojos poco a poco, la luz me daba a los ojos. Miré a mi alrededor y este estaba blanco.

-¿Dónde estoy? - me pregunté en voz alta. - ¿Hay alguien aquí? - pregunté más fuerte.

Caminé por el lugar, pero todo estaba totalmente en blanco.

Ví una silueta un poco borrosa, y derrepente todo lo blanco se fue dejando ver una casa, un momento, ¡es mi casa!

Corrí hasta ella e intenté abrir la puerta, pero mi mano la traspasaba. Sabiendo que puedo atravesar paredes entro a la casa sin problemas.

Miré todas las cosas, y estaba igual.

-Jimin y Jungkook, dejad de jugar y venir a comer. - esa voz... ¿mamá?

-Ya vamos. - dijo una voz conocida.

Caminé, o me mejor dicho, volé hacía donde estaban los niños de 8 y 6 años. Uno era yo y el otro... no lo conozco.

Al parecer nadie me puede ver, ya qué me puse delante de mi madre y no me vio.

El lugar cambió, ahora estaba en una calle. Miré por todos lados y me ví junto a mamá y el otro chico.

Yo estaba con una pelota jugando con ese tal Jungkook, mamá nos decía que tuviéramos cuidado.

En un instante la pelota se me fue, y fuimos a recogerla los dos pero un coche nos atropello...

****

Me desperté asustado y sudando, mi corazón latía a mil por hora.

Mire a mi alrededor y Yoongi estaba dormido roncando, con una pierna suelta fuera de la cama. "Qué bien vive" pensé.

El sueño, ¿qué habrá sido? ¿será algún recuerdo de mi infancia qué no sabia? Para salir de dudas visitare a mis padres en unos días.

Fijé mi mirada en el reloj, eran las 10:30 AM.

Me levante sin hacer ruído y fui a la cocina a por un vaso de agua. Me miré en un espejo que tenia en la pared, sí, me gusta mirarme. Me sorprendí al verme, tenía los labios pintados de un rojo muy fuerte, la raya en los ojos mal hecha y corrida y maquillaje por toda mi preciosa cara.

-¡Min Yoongi vas a morir! - grité a todo pulmón, creo que hasta los vecinos se han enterado.

-¡Por qué gritas pedazo de imbécil! ¡Déjame dormir! - un tic en el ojo derecho apareció.

Corrí hasta la habitación furioso, abrí las persianas a tope, abrí las ventanas y destape a Suga. Este se levanto y nada más hacer eso empezó a reír, hasta le salían lágrimas de la risa.

-¡Yo no me río! ¡¿cómo has podido hacerme esto?! - señale mi cara, mi preciosa cara hecha un desastre.

No me respondió, aún seguía riéndose. Después de unos minutos se calmo, me miró otra vez y se empezó a reír de nuevo.

-¡MIN YOONGI RESPONDE! - grité más que furioso, enfadado doy miedo, bastante miedo. Este se calló inmediatamente mirándome asustado.

-P-perdoname, no sabia que te ibas a poner así de furioso. Te vi dormido, pensé que una bromita no te haría daño y... - parece que en el fondo es un buen chico, no debí gritarle.

-Perdoname a mí, lo siento por gritarte, tu eres mi robot, nos conocemos desde ayer y no te conozco bien.

-Tú eres mi primer amo, aún no se muy bien cómo comportarme con uno, seguro que mis amigos se comportan mejor con los suyos, no como yo hago contigo. Entonces ¿hacemos las paces? De verdad lo siento, me comportare mejor contigo, amo. - hizo una reverencia.

-No es necesario que hagas una reverencia, y sí, me puedes llamar Jimin. - le sonreí. Creo que ya nos vamos a llevar mejor.

Gracias por los votos y comentarios del capitulo anterior, pensaba dejarlo pero ví que de repente el fic iba subiendo y voy a seguir, gracias de verdad!! :3