El Objetivo Del Viaje

Acto I Capítulo 3 "Un poco de felicidad no hace mal"

Sebastián vuelve a clases, cuando entra al salón, Kenya se le queda viendo, este lo nota pero prefiere no ilusionarse, pues a lo mejor no lo está mirando a el.

-Y pensar que en eso se convirtió aquel niño que conocí en el centro... Ahora es alto, fuerte, inteligente, de hermosas pestañas y ojos tristes que quisiera alegrar, de mirada triste y corazón sincero, de piel clara y voluntad de hierro... Es demasiado para ser un humano... En fin... Siempre me ve pero jamás me habla... Es que no ve que yo también lo miro... Bueno no importa, ahora tengo su colgante... No se nada sobre este colgante pero me gusta...-Piensa Kenya.

Sebastián se acerca, al cerrar los ojos, mira el aura de las personas, y aunque también siente la presencia de los cuerpos, resalta el colgante ante todo y divisa que lo tiene Kenya en su mano derecha, entonces Sebastián se acerca a ella y comienza a hablarle...

-Hola Kenya, disculpa ¿Por casualidad no haz encontrado un colgante con forma de corazón?

-Claro, lo olvidaste ayer en la banca donde te transportaste, aqui esta, ¿Es que te estas ocultando de mi?

-Mil gracias, no, ¿Por que dices eso?

-Pues de niños jugábamos siempre, y de repente ya no... Te alejaste y cambiaste mucho. Mírate, ya no eres ese niño que tenía la mirada alegre y esperanzada, te convertiste en un insensible.

-No, Kenya, no es eso... Mira. Ves este colgante, lo hice cuando te conocí hace ya 8 años, y la verdad es que te lo diré ahora porque tal vez después no tenga el valor...

-¿A que te refieres?

-A que te amo profundamente, mira- Sebastián parte el colgante en 2- Este fragmento es para ti y este para mi... No, no te preocupes. Por favor aceptalo, ya se que no me quieres, pero por favor, conserva ese fragmento por ahí van todos los sentimientos, perdona que te lo diga así... Pero, ahora tenía el valor... Perdóname...

-Pero si yo también te amo tontito... Eres al único que miro en todo momento, eres símplemente el mejor, y quiero que seas mi mejor... No me importa que uses lentes, vamos, yo te quiero y eso es lo que importa, pongámonos los colgantes y hagámoslo oficial, vendrás con mis padres...

-Claro, eso haré, te prometo amor eterno hasta que mi alma deje de existir.

-Yo también lo prometo, también prometo no traicionarte... oye, ¿No te da miedo ir con mis padres?.

-No, contigo a mi lado, el mundo es poco... vamos a con ellos.

Entonces Sebastián carga a Kenya en sus brazos y se la lleva hacia su casa...

Mientras tanto, el médico le informo a la familia de Kenya lo que descubrió, y el gobernador lo toma de noticia pesada, se sienta y comienza a atar cabos...

-El mejor de la Academia. El mejor maestro de armas. El más agresivo, alto, fuerte, inteligente... Como no me di cuenta antes... hasta el espadón se me hace familiar... El es el Rey de los Encabloscian, los creía extintos, pero aquí está el último...
Nos conviene que sea de los nuestros... Llama al director y al general... Tenemos algo que hablar...

Mientras tanto Sebastián deja a Kenya en su casa y ella le comenta que no puede entrar debido a que hay una reunión dentro...

-Tal vez será en otra ocasión... Cuidate, nos vemos mañana amor.

-En serio perdón, nos vemos mañana, te amo...

-Yo más, entra ya, ya casi es media noche, y necesitas dormir...
Anda, duerme un poco más, los párpados no aguantan ya...

-Hasta mañana, (Se acerca y lo besa)

Sebastián ve que se encienden las luces de su cuarto y se da media vuelta y se marcha hacia su hogar, al doblar la esquina, Jorge le llega de la espalda y le dice

-Eres valiente hijo, nada más mira esa belleza que ahora camina de tu mano, aunque ten cuidado, recuerda que son la familia que gobierna al reino. Vamos. Vamos a casa ya, te tengo preparado un cóctel que te dejará más que contento.

Entonces al llegar a su hogar, André les abre la puerta y entran, los 3 se dirigen a la cantina y Jorge sirve 2 copas y un jarrón

-Ahora tienes que acabarte ese jarrón, no te preocupes, Jane fue a pasar unas noches con su amiga del colegio, se encontraron en el Gran Bazar y de ahí se fueron. No te apures, tenemos una semana. -Dijo Jorge.

Sebastián toma el jarrón y sin saber que es, lo bebé, tiene un sabor dulce para él, su espuma le encanta y el sabor lo enloquece, se bebé todo el jarrón de un trago...

-Madre mía, se lo empino de un trago, ¿Todo bien? ¿No te sientes... diferente?

-No, todo bien, ¿Puedes volverla a llenar?

-De acuerdo, serían 6 litros en menos de 10 minutos... No deja de sorprenderme... Vaya que si, que orgullo poderlo llamar hijo.

Entonces volvieron a servir. Después de la cuarta vuelta Sebastián comenzó a marearse, mientras que Jorge y André están cantando a Luna, cuando Sebastián llega a la décima, ya estaba embriagado y los 3 huelen a alcohol a varios metros de distancia.

Al llegar el alba, Sebastián se encuentra en el techo. André está tumbado en las escaleras y Jorge está dentro de un barril...

Sebastián despierta y siente un fuerte dolor de cabeza, una ligera amnesia y una sensación de felicidad que jamás habia sentido.

-Vaya que me pase, ¿Como llegue aquí? ¿Mi colgante? Aquí está, menos mal, vamos a bajarnos de aquí, que me hago el vivo, me transportare

Sebastián baja y encuentra a Jorge y a André, ellos apenas pueden mantenerse en pie, Sebastián después de un rato se recupera completamente. Y comienza a volver a beber, entonces recuerda que quedó de ver a Kenya y se transporta a con ella.

Jorge y André siguen bebiendo.
Mientras Sebastián, abusando de la magia, se arregla su ropa y su olor, es sábado y tiene planeado pasar con Kenya todo el día.

Cuando la ve, la saluda, la besa, y la toma de la mano, la llevará a los riscos del este...

Durante este tiempo su halcón creció de forma exorbitante, ahora es un halcón gigante de 6 metros de altura y 20 metros de punta de ala hacia la otra punta, de color café rojizo... un halcón qué con el paso del tiempo fue criado y cuidado por Sebastián, ahora el ave vive en las montañas y responde al llamado de Sebastián, este le puso como nombre Logan.
Logan desde que salió del huevo a sido protegido por Sebastián, y el lo quiere como a su padre...

Un halcón sumamente rápido, agresivo, fiel y protector.