Capitulo 10: ¿No está?

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Tras salir de la ducha me dirigí al armario para coger uno de mis muchos trajes, esta vez de un color azul oscuro en vez de negro. Cuando me hube arreglado me senté en uno de los sofás que había, para tomar el desayuno que me traian a la habitación. Al abrir la campana me encontré con unas tostadas, huevos, pan y un café. Mientras me lo tomaba, miraba la televisión para informarme de las noticias nuevas que ocurrían, como los atentados, las detenciones o el tiempo. El móvil sonó con un mensaje de Harry, que se encontraba con Zayn en el restaurante del hotel y no sabían donde me encontraba. Le contesté mintiendole con que me había ido antes al trabajo, pero en verdad quería descansar de sus continuas burlas hacia mi. En estos momentos recordaba una frase que había escuchado. "Para que enemigos teniendo estos amigos". Pero en verdad eran buena gente y me gustaba reírme con ellos, aunque en este momento tenía demasiado trabajo como para divertirme. Harry me envió otro mensaje, diciendo que seguirían su visita de tiendas por la ciudad. Ahora me daba pena Zayn, ya que no entendía como aguantaba a Harry tanto tiempo con la cantidad de conjuntos que le ponía. Ahora es cuando caía que los dos están metidos en el mundo de la moda y entre ellos se entendían.

Al terminarme el desayuno bajé a la recepción, para esperar que mi choffer aparcara con el nuevo coche que le había pedido para poder ir al trabajo. No quería seguir yendo con aquella limusina, ya que atraería a toda la gente de nuevo y sería difícil poder salir. Después de unos dos minutos salí por la puerta encontrandome con un montón de fans que comenzaron a gritar mi nombre para que les prestara atención. Me acerqué a varias de aquellas personas, saludandolas y firmandoles autógrafos o haciéndonos una foto. Cuando subí al coche comencé a replantearme lo que me había dicho Hunter, sobre comprarme una casa en Londres. El hotel era muy caro, quizás por eso solo iba gente famosa a alojarse y había mucha gente en la puerta esperandolos.

Cuando llegué al trabajo Heder me volvió a recibir con otra carpeta entre sus manos, que luego me pasó para revisarla.

-Sr. Payne hoy tendrá que dirigir un videoclip y luego ir al estudio para grabar una canción. -Repasó su carpeta mientras subíamos en el ascensor hasta mi despacho- Si tiene alguna duda no se olvide de preguntarme y a las doce y media le esperarán en la sala de grabación número siete. -Cuando llegamos al despacho ella se sentó en su asiento y yo entré a mi despacho- Que tenga un buen día Sr. Payne.

Abrí la carpeta y me puse a repasar el primer trabajo que tenía que hacer, el videclip. Debía ser un vídeo con ambientación de ciudad, en la época de cuando las primeras imágenes eran en blanco y negro y luego con una ligera transición temporal hasta el color. Nos llevará varios días y varias tomas, pero lograremos producirlo. Encendí el ordenador y comencé a buscar todo lo que necesitaríamos para el atrezzo en el estudio.

-Heder, ¿Podrías pasarme por el ordenador una lista de atrezzo de ciudad por favor? -Le dije por el comunicador.

-Enseguida Sr. Payne.

Tras unos minutos me llegó la lista de todo el atrezzo disponible en el estudio. Nos faltaban algunas cosas, por lo que tendría que encargarlas y todo eso tardarían en llegar unos días, por lo tanto tendríamos que rodar unas escenas hoy y otras cuando nos llegue el atrezzo restante.

Cuando llegó la hora, bajé hasta la sala de grabación y conocí al artista con el que me tocaría trabajar. Tenía que organizarlo todo con el coreografo, los maquilladores, los cámaras, el director... A veces me preguntaba si dirigía un videoclip o una película de Hollywood.

Cuando agotamos el tiempo me despedí de la gente, hasta otro día y me subí a mi despacho, donde Heder me esperaba en la puerta con otra carpeta, de seguro era el otro trabajo pendiente para el día de hoy.

-Sr.Payne, ahora debe ir al estudio, para grabar la maqueta de un nuevo disco. -Me entregó la carpeta y se sentó en su mesa.

Tenia solo quince minutos de descanso, pero no me costaría mucho tiempo hacer el trabajo. El único problema sería el cantante, dependiendo las veces que tengamos que repetirlo, si lo quiere de una forma u otra, si se equivoca... No todos podemos hacerlo bien, siempre nos equivocamos, en cualquier momento podemos fallar.

Estuvimos solo dos horas, para grabar solo un par de canciones. El cantante no se había ido mucho, por lo cual todo iba más fácil. Quedamos para terminar otro día, aunque Heder me miraba como si no tuviera tiempo de nada.

Ya iban a ser las cinco y no habia comido desde esta mañana. Ya que había terminado decidí salir del trabajo y dirigirme al bar de la otra vez, para tomar algo y hablar un poco con el rubio de la otra vez. Cuando iba a salir recordé que iba con el traje, pero no había traído ropa de cambio. Me dirigí a la puerta de atrás y me coloqué unas gafas negras, quizás así me mirarian menos. Caminé hasta el bar sin pararme a mirar hacia otros lados, hasta llegar al bar de la otra vez. Entré y me senté en la misma mesa, que de casualidad estaba vacía. Esperé un rato a que viniera el rubio, pero no fue así. Esta vez me atendió un hombre mayor, el dueño del bar, y me contó que el rubio no trabajaba hoy. Le pregunté los días que trabajaba y luego le pedí algo de comer.

Mientras comía me sentía un poco mal por no poder hablar con el rubio, pero podría hacerlo mañana. Terminé, pagué y volví a la empresa para que mi choffer me llevase hasta el hotel.

Me puse a repasar el trabajo del día de hoy, pero me había quedado con las ganas de tener una conversación con el rubio. Miré mi móvil, que lo había mantenido en silencio, y encontré varias llamadas de Skype de Sophia. Encendí el portatil y abrí mi Skype para llamarla.

- Liam, por fin me llamas. -Se alegró al verme por la cam.

-Ya, lo siento. -Me llevé la mano a la nuca- Desde que he llegado he tenido mucho trabajo y no he podido parar mucho tiempo.

- Te echo de menos, la casa se siente aún más vacía cuando no estas aquí o tus amigos se quedan para ver algo en la tele. - Comenzó a reirse a la vez que yo. Tenía razón, Zayn y Harry se la pasában en mi casa cada vez que teníamos tiempo libre.

- Intentaré ir cuando tenga algunos días libres. - Dije algo inseguro, ya que muchas veces ella se iba con sus amigas y no la veía durnate el día.

- Me gustaría mucho que vinieras. Además, mi padre quiere tener una cena para hablar.

- No somos chavales de diecisiete o dieciocho años. - Hice una mueca de desagrado- No entiendo de que quiere hablar.

- Yo tampoco lo sé. Pero ya sabes que no se puede discutir con el, su trabajo de abogado le ha hecho ser un hombre serio. - Suspiró agachando la mirada.

- Bueno, ya lo hablaremos, ahora tengo que terminar unas cosas, hasta otra, te quiero.

Tras cinco minutos de despedida cerré la llamada y continúe con todo el papeleo que tenía montado en la cama, como si fuera un estudiante de instituto en época de exámenes.

Cuando Harry y Zayn llegaron bajamos al restaurante para poder cenar juntos. Durante el camino en el ascensor mo para de recibir burlas, que no entendía muy bien hasga que llegamos al restaurante. Hoy también había sopa. Durante la cena les conté la idea de comprarme una casa en londres y ellos me hablaron de su día en el centro comercial. Harry había conocido a un chico y Zayn había hablado con el amigo del chico, ya que Harry le habia dejado solo.

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Hey, aquí os dejo otro capítulo más, espero que os guste.

Me gustaría saber un poco vuestra opinión de como veis el libro hasta ahora, como os parecen las posiciones de los personajes y tal. No se si me he explicado, pero bueno XD cualquier critica me vale.

Hasta otra 👋

El Camarero (Niam Horayne)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora