Capitulo 24

1.4K 133 35
                                    

Se abalanzó contra Yama, pero esté contrarresto su ataque y cayó al suelo. Hiro se limpió los rastros de sangre que tenia en su cara debido a los golpes de su enemigo, su traje ya desgastado debido a los años tampoco ayudaban mucho, pero soportó. Sus amigos, simplemente miraban la escena, ya que eran sostenidos por los robots y les era imposible ayudar a su lider, quién más sufría era Honey, pedía a gritos que lo dejará en paz, incluso le pedia a Hiro que se detuviera, que ya no siguiera peleando, pero le hacia caso omiso, ya que seguia intentando golpear al gigantón, quién empujaba con más fuerza al azabache.

-¡Hiro, HIRO! -Gritaba Honey.-

-¡Agh! -Nuevamente cayó al suelo. Sacudió su cabeza y se levantó como pudo.- ¡Cállate, Honey! ¡Esto es algo entre Yama y yo!

-¡Pero Hiro-!

-¡Ya lo escuchaste, Honey! -La interrumpió Gogo.- Es una pelea de ellos dos. Ni tú, ni yo, ni nadie puede entrometerse.

-¿y Baymax? ¿Acaso de qué se esté desinflando es algo normal? ¡Hiro debes repararlo! -Wasabi apoyó a la rubia.-

-Baymax. . Baymax estará. . bien. -Contestó a su duda de una manera agitada.-¿Cierto. . .amigo?

El robot de su forma adorable y géntil, se desinflaba. Pero gracias a un equipo que le instaló Hiro desde lo ocurrido en la estación de policia, sacó su destruido traje, una cinta adhesiva que ponia en cada uno de los orificios, evitando que se siguiera saliendo el aire que tenia por dentro. Sin embargo, los robots amenazaban al enfermero con armas y misiles haciendo que se quedará en el suelo, sin poder movilizarse o de intentar ayudar a Hiro.

-Quédate ahí, no te preocupes por mi. ¡Ustedes hagan lo mismo, solo observen!

Todos asintieron con la cabeza, entendiendo la orden del azabache. Yama movilizó los músculos, incluyendo su cuello, Hiro sonrió de medio lado, le recordaba cuándo lo conoció, y acabó en la cárcel debido a sus antiguos crimenes: robo, estafa, pelea robótica ilegal entre otros delitos incontables. El gordo se echó a reír, de su traje, él cuál constaba de una bata negra similar a la de Callaghan, sacó un guante tipo IronMan, Hiro lo reconoció de inmediato, pues era el mismo guante que habia destruido los suelos de San Fransokyo de un solo golpe.

-Adivina, ¿de dónde saque esto? -Preguntó Yama.-

-¡Lo robaste de la Ito Ishioka!

-Corrección, lo tomé prestado.

-¡¿Acaso fuiste quién incendio la Universidad para tomar los inventos de la feria?!

-¡Oye, oye, esa es una acusación muy seria! -Respondió indignado.-

-¡RESPONDEME!

Yama frunció el ceño y alzó su puño, en dirección a Hiro. Como si fuera un robot, el guante empuñado salió disparado y golpeó al azabache en el estómago con fuerza, mandandolo a volar hacia una tienda, la cuál las vitrinas de vidrio se destruyeron debido al choque. Honey quisó ir a socorrerlo, pero fue sostenida por el robot. El guante volvió a la mano de Yama y volvió a reír.

-Eso te pasa por hablarme en ese tono.

Hiro escupió sáliva y se llevó la mano al estómago. Se reincorporó con ayuda de sus piernas y caminó con dificultad a dónde estaba Yama, evitando caminar por los vidrios.

-Mal. . di. . -Soltó un quejido de dolor y cayó de rodillas al piso. Justo a unos centimetros de donde estaba Yama.-

-.¡Ja! ¡¿Quién diria que te tendria asi a mis pies?! -Exclamó emocionado.-

-Sabes. . que voy a vencerte, como te venci en esa calle abandonada de San Fransokyo a los 14 años.

-Das pena, Hamada. -Abrió y cerró su mano con el guante puesto para tener más flexibilidad.- Te mientes a ti mismo.

Quédate Conmigo. (Segunda temporada de: Quiero que Regreses)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora