Quédate Conmigo. (Segunda temporada de: Quiero que Regreses)

Capitulo 26

Sentada en un rincón, se encontraba ______. Cass dormía profundamente en la silla, acobijada con una sabana que "amablemente" habia brindado uno de los yokai. Se lamentaba en silencio la gran estupidez que cometió por haberle creido a un psicopata. Todo lo hizo por el bien de sus amigos, nunca pensó que de un día a otro todo empeoraria. Ya tenia rato llorando, sollozando lo más bajo posible para no despertar a quién la acompañaba, no era justo hacerse la victima sabiendo que otras personas sufrían el triple. Quería pensar que todo estaba bien, qué la gente de San Fransokyo se encontraba a salvo, y qué Hiro no corria ningún tipo de peligro, pero estaria mintiendose a si misma de una manera bastante ridicula. 

Ya habia pérdido la cuenta de las veces que habia llorado esa noche. Pensaba únicamente en Hiro, ¿estaria con los chicos? ¿herido? ¿Vendria a San Fransokyo? Millones de ideas cruzaban su mente sin aclararle las dudas, más bien, aumentaban a medida que pasaba el tiempo. Se recostó contra la pared, fijando su vista en la señora Cass, quién seguia dormida, ajena a la situación. Extrañaba la paz, la tranquilidad. . .las noches en las que hablaban por horas y al finalizar Hiro la llevaba cuál princesa a la habitación, solo importaban ellos dos. Sus brazos la rodeaban brindandole calor, mientras él le llenaba el cuerpo de besos y caricias. Lo extrañaba a él, su perfume, su voz, sus chistes de malgusto. . . todo. Volvió a llorar, ¿acaso era lo único que iba a hacer? 

Sintió una mano en su hombro, volteó la vista y vio a la señora Cass sentada a su lado, la miraba enternecida. ______ se limpió las lágrimas con rápidez y le sonrió a la mujer. 

-Tía Cass. ¿La desperté? -Preguntó preocupada. No queria perturbarla.- 

-No, tranquila. De igual modo, ya estaba algo incómoda en esa silla. -Acarició el cabello de la chica con dulzura.- Dime, _______ ¿qué te ocurre? 

-Em. . . -Desvio la mirada hacia otro lado, evitando el contacto visual con Cass.- No es nada, mejor vuelva a dormir. 

-Ambas sabemos qué no es cierto. Sé qué estás sufriendo, y sé que la causa es Hiro. 

-Por mi culpa ustedes están involucrados en este patético plan. -Confesó.- Si yo no hubiera aparecido en sus vidas. .  

-Él no estuviera vivo. 

-¡Pero ahora tiene el riesgo de morir! -Se dignó a verla a los ojos, sintiendo impotencia.- ¡Estás personas la han hecho sufrir y de seguro Carl también está igual! ¿Por qué se empeña en decir que no es mi culpa? ¡Yo no puedo seguir aqui sin hacer nada, sabiendo qué la gente de todo el mundo corre peligro! 

La dueña del Lucky Cat Café la abrazó tras escucharla. Su hombro se humedeció a causa de las lágrimas de ______. Por alguna razón, podia sentir esa carga emocional qué la pobre tenía en sus adentros. Esa pesadilla apenas estaba comenzando y no podia hacer mucho encerrada en esa habitación,  sabia que en cualquier momento una batalla se llevaria a cabo en su ciudad. En el peor de los casos, moriria al tratar de ayudar. 

-Esto no es tu culpa, _______, y sé que Hiro me apoyaria al 120%. Ten en cuenta qué él es un superhéroe, y aunque no quisieras que esto pasará, por su deber, enfrentaria a estos lunáticos. 

Cass se separó de ella, volviendo a su posición original. 

-Pase lo qué pase, él vendrá a rescatarte. 

-Por eso mismo, yo no quiero. . . 

-Ya te dije, no es cuestión qué no quieras. Hiro Hamada es el chico más terco y necio que conozco. . . además, eres quién lo vuelve loco. ¿Acaso crees qué te dejaria aqui con los yokai? No. -Soltó una leve carcajada al recordarlo.- Hiro no es así. 

-Señora Cass. -Habló en susurros.- 

-¿Si? 

-Gracias.