el muelle

354 12 0
                                    

Estaba sentada observando un atardecer, el viento golpeaba su rostro y despeinaba su cabello, era perfecto, esa visión del lago enmarcada por un sol naranja y la luna que se hacia mas presente conforme pasaban los segundos... cuando sintió que no estaba sola.

-Al fin te he encontrado...
........................................

-Victoria! !!! despierta ya es tarde!!

-Qué? Andrea que te ocurre!!! que pasa??!!

-nenita lamento informarte que vas una hora retrasada a clases! y perdón por los gritos pero no reaccionabas!

Vic aún estaba ofuscada y confusa por el sueño hasta que cayó en la cuenta de que en efecto eso había sido. Dió un brinco de la cama, tomó lo primero de ropa que encontró y se dirigió al baño, se aseó y salió corriendo del dormitorio, no lo vió venir, de repente sintió el impacto del choque el cual la rebotó directo contra la pared.

-hey Victoria estas bien???

"hay nooo" justo quien menos pensó, ahi estaba Sebastian a unos centímetros de su cara.

-si! no te vi...ha sido mi culpa...

Sebastian estaba tan cerca solo viéndola como tratando de decirle algo, no la soltaba y Vic tampoco estaba haciendo mucho por quitarse... - así que inventas falsas caidas para hablar con mi novio mosca muerta?- dijo Vanessa roja de ira

-solo ha sido un accidente Vans, vamonos-la atajó Sebastian tomandola de la cintura y los dos se alejaron...

Victoria estaba en shock..."que ha sido todo esto!" y el rostro de Sebastian Lombard no dejaba de darle vueltas, ese rostro que habia querido decir mucho, que no la habia visto con odio por primera vez en lo que iba del semestre.

Habia pasado una semana de ese encuentro, el frio empezaba a calar mas, los primeros exámenes empezaban, las tareas y trabajos crecían y Sebastian habia adoptado una mas fría indiferencia, aunque eso era algo un poco mejor a que la viera con odio, o no?

- Sabes? creo que deberíamos ir al pueblo a desestresarnos un poco- le dijo un buen dia Andrea.

-si me haría bien un poco de aire para variar, ya ha sido mucho estudio por hoy.

y las dos se pusieron sus chamarras y se dirigieron a un café que quedaba en un muelle. Era hermoso, el lago iluminado por decenas de luces titilantes, que colgaban de postes a la orilla del muelle y los pequeños restaurantes con sus mesitas y sus sombrillas le daban un aspecto mágico y romántico.

se sentaron en uno de ellos y pidieron dos cafés y algunas botanas. ..llevaban ya unas horas cuando Victoria lo vió, el chico moreno que le habia hecho compañía, estaba parado en uno de los bares del muelle, se veia muy guapo con una camisa azul marino y jeans oscuros. ..de pronto como si lo hubiera llamado él volteó a verla y clavó sus ojos en ella, Victoria se estremeció y trato de hacerse la desentendida pero era muy tarde, él ya la habia visto mirandole.

-Andy vamonos-dijo un poco asustada Victoria, ese hombre tenia algo que la estremecia.

-ese no es el tipo con el que estabas la noche de la pelea?

-si!! no lo mires, hay que pagar ya!...mesero la cuenta por favor

-señoritas la cuenta ya esta pagada

-pero... Cómo? - dijo Victoria sabiendo ya la respuesta.

- Espero que no te moleste, yo la pagué.

Victoria se puso rígida, era él, su cuerpo emanaba confianza y peligro. La veía con una media sonrisa y sus ojos brillaban de una forma antinatural, hacia mucho frio pero el solo llevaba esa camisa como cualquier dia de verano.

- gracias, aunque no debiste molestarte- dijo Andy simpática.

- no ha sido una molestia- dijo él sonriendo pero no apartó la vista de Victoria.- un placer volver a verte, Victoria. - sus palabras acariciaron cada letra de su nombre, ella no entendía que era eso que él tenía que la ponía tan a la defensiva, pero no podia evitarlo, quería ser amable pero una vocesita en su cabeza le gritaba que se alejara de él.

- si, bueno gracias, pero llevamos prisa.-dijo tomando a Andrea del brazo y alejándose rápidamente del lugar.

-de verdad que fué un placer- y una sonrisa le llenó de satisfacción el rostro.

A la sombra de tus sueñosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora