A la sombra de tus sueños

CAPITULO II "El encuentro"

- Qué es lo que planeas Sebastian!  estas interfiriendo y eso se castiga!!- el rostro furibundo del hombre estaba tan cerca de su cara casi retàndolo.

- ella tiene derecho a elegir - dijo con furia contenida - no tiene porqué estar con él a fuerza,  todos tenemos libre albedrío no?

- si realmente pensaras asi dejarías que se conozcan y asi ella podría decidir... deja de ser tan egoísta. -Esta vez tenia tanta razón, pero no había podido evitarlo.

- dile a Alek que deje de meterse.

- Alek está en todo su derecho de impedirtelo y lo sabes.

- Si así lo quieren... - dijo amenazante.

- él es mas fuerte que tú.

- ya no soy un niño que temía de su hermano mayor!

- no será al único sobre el que tendrás que pasar si sigues aferrado a esa idea.

- por ella no me importaría hacerlo- dijo alejándose y dejando al hombre mirándolo con una expresión abatida.

Victoria se encontraba sentada en la elegante estancia de la mansión Lombard, examinaba la chimenea que estaba hermosamente tallada con figuras un poco raras que nunca habia visto en su vida. Sebastian salió por una puerta en la que ella no habia reparado seguido de un hombre algo mayor, tan alto como él, los mismos ojos, Sebastian era una versión mas joven de él.

- tu debes ser Victoria - le sonrió y dos hoyuelos se le formaron en las mejillas, le estiró la mano. Su voz era bastante mas grave que la de su hijo.

- si ,Victoria di Vassini, es un placer.

- el placer es mío. .. la comida casi está lista asi que pasemos al comedor.

Sebastian la tomó de la mano, lucía un poco tenso y ella le sonrió tratando de animarlo, él le respondió con un dulce beso en la frente.

Comieron en calma, la comida era simplemente deliciosa y la compañía resultaba bastante agradable. Se oyó el rugir de un coche que llegaba y sintió que el cuerpo de Sebastian se ponia en tensión.

- pensé que seriamos sólo los tres - dijo áspero.

- eso creí también hijo, pero ya conoces a tu hermano, es bastante impredecible.

Aún ni habia alcanzado a procesar que su novio tenia un hermano del que nunca le habia hablado cuando apareció,  tan alto, luciendo una camisa blanca que se le pegaba una barbaridad, jeans deslavados y una sonrisa que iba desde burlona hasta cínica.

- Asi que por fin has decidido traer a Victoria aquí! ! - su voz tan grave como la de su papá.

- Alek! - no supo que mas decir,  el ambiente se habia tornado tan tenso, solo Alek parecía disfrutar.

Se sentó y una doncella enseguida le sirvió el primer plato, Sebastian lo miraba con furia y eso parecía divertirlo más.

- así que Sebastian jamás te comentó que existía, debes perdonarme por no mencionarlo pero pensé que él tenía que contartelo ya que es tu novio...o eso parece - dijo con una sonrisa.

Victoria lo miró perpleja y Sebastian la miró con expresión de disculpa., - te pido una disculpa Vic, es sólo que siempre que aparecía estaba lo bastante molesto como para hablar de él.

- bueno estos no son temas que deban tratarse en la mesa- dijo su padre tajante.- ya viene el postre.

Habían terminado de comer y Sebastian la habia llevado a conocer los jardines, eran enormes, hermosos, los árboles tan altos formaban caminos sinuosos y misteriosos, el ruido de un río se escuchaba cerca, las flores salpicaban el paisaje por todas partes y las pequeñas fuentes estaban llenas de pajaritos que trinaban.