A la sombra de tus sueños

INDECISIÓN

Khevan me mira complacido

- has tomado una buena decisión - me dice - ahora tenemos que hacer un exorcismo.

- Un queeeee? ??, noo! yo no tengo un demonio dentro!

- no propiamente pero tienes algo que les pertenece, será hoy mismo. No tienes nada que temer.

- es fácil decirlo...

- si pero también tienes que confiar en mí- abre la puerta de mi habitación para irse.

- a donde vas?!- parezco una niña chiquita con terror a quedarse sola.

- a entrenar a Gabriel, tal vez debas ir a pasear a la playa para relajarte- y se va.

Me levanto de la cama decidida a hacerle caso. Cuando salgo de la casa la brisa me acaricia y el efecto relajante es casi instantaneo y cuando llego a la playa me siento totalmente en paz. Me siento en la orilla y dejo que el mar me moje un poco, entonces tengo una idea, me levanto y camino hacia la gran pared de piedra, entro por la pequeña abertura y de nuevo me dejo sorprender por la belleza del lugar, cuando dejo de maravillarme noto una figurilla en el agua, su cabello morado se abre como un abanico en esta, sus grandes ojos están fijos en el hombre que esta sentado a la orilla del lago, ella está desnuda por lo que casi me siento desfallecer, pero luego ella mueve la cabeza en mi dirección y Sebastian voltea, ella se sumerge y desaparece.

Él me mira con un dolor que no puedo ignorar, sus ojos están tan rojos e hinchados.

Me quedo congelada en mi lugar,  mi corazón emprende una carrera, y el dolor se apodera de mí... es desgarrador...él vuelve su mirada al lago y yo simplemente no sé que hacer.

Me quedo parada como una eternidad y luego sólo me muevo por instinto, hasta que quedo tras él, ni siquiera voltea a verme y eso me paniquea más.

- debo decir que lo subestimé- me suelta de pronto- sabía que tenía un sentimiento por ti pero no creí que tu sintieras lo mismo. Y con esa intensidad! y lo mejor de todo esto es que me cae tan bien! en verdad lo he llegado a considerar mi amigo a tal grado que le confiaría mi vida...y la tuya.

Me hinco y le pongo la mano en la espalda.

- te amo- y él se estremece, sé que está llorando y me siento terriblemente culpable, porqué tiene que ser tan difícil! !? en verdad lo amo, soy tan egoísta! los amo a los dos de una forma tan diferente pero igual de intensa.

- te amo Vic, siempre te voy a amar y lo único que quiero es que seas feliz no importa con quien.

- yo era feliz contigo...

- yo cometí errores Victoria y acepto las consecuencias. Sólo quiero pedirte algo.

- que cosa?

Se voltea y se hinca frente a mí, sus ojos grises enrojecidos transmiten tanto dolor que no le puedo sostener la mirada.

- mañana me voy de aqui

- a donde! ?

- prepararé el terreno para la batalla

- pero tu solo?

-iré con algunos ángeles no te preocupes. Estaré bien. Lo que quiero pedirte es que pase lo que pase te mantengas alejada de la lucha.

- ya hablé con Elias, ya hice mi elección.

- me da gusto, ahora estoy tranquilo.

- Seb... no quiero que te pase nada. ..

- no me va a pasar nada, estaré mas concentrado sabiendo que estas a salvo.

Los dos nos quedamos callados, cada quien hundido en sus pensamientos, enfrentandose a sus miedos,  veo una ondulación en el lago y recuerdo lo que vi.