Capítulo 2- ¿Me gustan las chicas?

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Harry estaba a punto de dar un paso muy importante en su vida, enfrentaría a ese chico de una vez por todas. Apenas dio unos cuantos pasos, con dos copas de tequila, una en cada mano, y cuando está por tocarle el hombro al chico del campo de futbol Nath (la chica con la que se encontraba Harry hace unos minutos) se acercó a él dejándole helado casi derrama las copas en el suelo.

—¿Te perdiste a medio camino o que, amor?—Lo acercó a ella, sujetado por el cuello. A Harry no le quedó más que seguir a su disposición, como todo un caballero, o mejor dicho como un calenturiento detrás de una falda con un buen trasero debajo, pega sus labios con fuerza en los de el chico, y él correspondió al beso.
Ese chico tan misterioso al percatarse de la escena, sólo lo miró con ¿Decepción? ¿Agobio? , pues lo único que él hizo fue soltar esa risa de nuevo.

Al terminar de besar a Nath, miró hacia donde se suponía que estaría aquel chico, pero ya no estaba, ¿A dónde fue?  Meditó esa pregunta en su cabeza más de una vez durante toda la noche.


                                                                               [***]


Un par de cervezas, un par de canciones, unos cuantos cigarrillos después Harry estaba más su mente flotando en el aire que en la tierra. Cada cerveza significaba un poco menos de conciencia para Harry, y mientras tanto Nath no paraba de bailar junto a él.
Harry había perdido el control total de su cuerpo, y sin darse cuenta ya se encontraba en una de las habitaciones. Mareado sin el control de su cuerpo tambaleando llegó hasta la cama y se dejó tumbar boca arriba. La rubia a horcajadas se montó sobre él y comenzó por quitarle la camisa dejando su pecho desnudo, besando desde su cuello hasta todo su pecho, después bajando hasta la bragueta del pantalón, calentando poco a poco al chico...

A la mañana siguiente, Harry despertó y lo primero que sus ojos miraron fue el rostro de esa chica, con la que había pasado la noche inconscientemente. Sin recordar absolutamente nada.
¿Qué diablos... Harry se preguntaba a sí mismo ¿Qué habrá ocurrió la noche anterior?

—¿Cómo amaneciste?— Pregunta Nath soñolienta.

—Bien..., ¿Te molesta si voy al baño?— Sin obtener respuesta alguna baja de la cama y de puntillas camina por la habitación tomando todas sus cosas y aún en boxers sale de la habitación. Antes de ser descubierto.

No hallaba la manera de safar de ella, de poder salir libre de ahí sin sentirse culpable. Una dolor terrible de cabeza no le deja pensar de manera clara y la resaca de los tequilas de anoche ya se hace presente. Colocándose la ropa mientras camina por el jardín, y apresurando el paso casi tropieza. Llega hasta la parada de autobuses y por lo menos para cuando llega el que lo lleva directo al instituto, hasta pudo darse el tiempo de acomodarse el cabello. 


Tan pronto le fue posible, ya estaba de regreso en el instituto.

—¿Qué demonios te pasa ,Niall?— Harry  gruñó enfurecido apenas lo vio, el rubio sólo lo miró desconcertado.

—Pensé que la pasabas bien. —Trató de excusarse pero no resultó viendo lo enojado que se encuentra Harry. Rascó su nuca en símbolo de nerviosismo.

— Ah, pues sí, pero ¿te parece bien, tener sexo con alguien mientras estás hasta el culo de borracho?— Gritó eufórico. Y todos los presentes en el pasillo le observaron al escucharlo gritar pero apenas los miró Harry con esa cara de pocos amigos todos volvieron a sus actividades.

— ¡Ya hombre! ¿A quién te cogiste ahora?

—Nath Brians.

—¿A Nath Brians?¿Es enserio?, - Soltó una pequeña risa. —Y te estás quejando cuando otros te envidiarían, incluyéndome claramente. Joder, La chica con la que tuviste sueños mojados toda la secundaria— Niall lo dijo en voz alta y Harry lo asesinó con la mirada.

Silent Feelings ~ (Larry.Stylinson) || #Wattys2016 ||CORRIGIENDODonde viven las historias. Descúbrelo ahora