Cartas Sin Destino

Penúltimo Capítulo Cartas Sin Destino

Recordé lo que  me dijo Chris y al unir las piezas  todo concordaba. Todo empeoró esa semana, no habían más Saludos, ni más salidas o esperar nos.
El salía con alguien más y no era necesario ser muy listo para saber que pasaba. Esa tarde estaba dormitando en mi sillón cuando sonó la puerta, me levanté a abrir pensando que Tom  estaba ahí, vi el reloj y  me Di cuenta que era imposible. Una mujer de veintitantos, cabellos negro, ojos azules. Bastante alta, portando un vestido azul estaba ahí, su parecido con Nic era asombroso.

- Usted  ¿Es la señorita Alcázar? - me miro un segundo y me recordó tanto a Nic, pero era imposible el había muerto varios años atrás -

- Si soy yo -

- Mi abuelo pidió que le entregara esto sólo que por años fue sólo una leyenda.-estiró la mano para entegarme un gran paquete de cartas, sucias manchadas por el riempo -Pidió que se las diéramos es algo importante al parecer - las tome y las vi con más calma - Si no le molesta quiero leerlas con usted -la pase a la sala la senté en el sillón y le Di una taza de café, me senté a leer las cartas una a una -

4 de abril de 1943
Desde que me uní en sagrado matrimonio no había sido tan feliz. La unica forma de describirlo es decir que te amo como nada en el mundo. Soy tu hombre, soy tu amante y Soy tu esclavo. Hace unos días consumimos nuestro amor, lo fundimos hasta el punto de volverlo cenizas, y de estas resurgimos como aves fenix. Y fruto del amor que te profeso tendremos un hijo. Estoy tan emocionado mi hijo o hija espero tenga esos hermosos orbes azules de su madre. Me moriría si te matas o me mataría si te mueres. No hay mundo o constelación en la que no te buscará.

15 de abril de 1943
Ella lo confesó, los motivos de por que te fuiste, quería dejarla pero no pude por nuestro hijo. Me sentí  no defraudado, usado. Nunca había sido tan cierto eso en que creí. No te culpo era una misión, nos equivocamos al enamorarnos. Pero volveria a nacer sólo para verte a ti, a la verdadera Madeleine, a mi verdadero amor, lo daría todo.

25 de febrero de 1946
Hay algo que no me deja dormir, encuentro alcranes bajo la sábana y mi cama florta como sobre un lago. Estoy sólo francamente sólo. Y cuando la hora vacía sobreviene no estás para bailar con tus manos en mi rostro, para curarme el corazón a besos, no estás. Un médico me a dicho que tengo el corazón de gota, y le creo por que me siento como una gruta que cae perpetuamente cae y se regenera perpetuamente.

18 de agosto de 1950
Estuve mirando el atardecer en aquella vieja banca donde mirábamos el lago. No tiene el mismo efecto. Intente mil veces las cosas con la otra Madeleine no se si vaya a funcinar  pero tú no vas a volver, mejor será que te dejé ir. No pienses mal no significa que no te ame.

7 de julio de 1957
He querido dejarla pero tuvimos más hijos, dirás es un pretexto absurdo para tener sexo y eso creo. Pero amo a mis hijos, lo hice por que era una pequeña copia tuya. No eras tu pero no tenía nada, y no era tan mal tener por lo menos un dibujo, un boseto de esa hermosa escultura de tu cuerpo. Mi Torre  del desierto, mi fortaleza implacable. Tu eres la razón de creer en el mundo

29 de noviembre de 1960
Me gustatia llevarte a tomar una taza de té cerca del gran reloj. Quisiera ver la lluvia contigo y en vez de compartir un paraguas, basarnos bajo el encanto de la lluvia. Tengo mis recuerdos, y sólo así estas conmigo.

17 de julio de 1963
Me volviste fan de tus ingleses, la pequeña Madeleine y el pequeño Nic están fascinados, el dice que es Lennon. Te entiendo cuando decías  que los amabas, si tu fueras yo ya hubiera muerto en un acto suicida sólo por un autógrafo. Hoy es tu cumpleaños. Me emocionaba decir que lo pasaba contigo. Veo pasar el tiempo y no te tengo a ti, no quiero demostrar nada, te Di todo y ahora que Me quedé vacío aún grito tu nombre. Los células de memoria tienen tatuado tu rostro, y por dentro revivo tus besos.