Déjame enseñarte

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Cara mantuvo el suspenso hasta el final y yo sentía como mi corazón latía tan rápido que pensé que saldría de mi pecho. Ella me ayudaba a avanzar para no tropezar aunque con lo torpe que soy igual lo hice, claro que ella siempre estaba allí para sujetarme, mi ángel guardián, pasaba sus manos de mis muñecas a mis caderas o cintura y algunas veces a mis hombros para girarme, el contacto lo hacía tan lento que era como esos licores que queman y sientes como va pasando por todo tu cuerpo.

Cara: Vengo aquí cuando necesito pensar, es mi lugar especial - ya no podía esperar mas.
Cara desató la corbata y mis ojos iban recuperando de a poco la sensibilidad a la luz. Cuando por fin pude ver me encontré con la mejor vista del mundo, era un observatorio, el cielo nocturno, se veían las estrellas tan hermosas, era como una cúpula estrellada, como pintada pero era real.

Cara: sabes, se me hizo muy difícil pensar en algo que regalarte, ya que Louise dijo que no te gustan las flores muertas. - yo la mire en desaprobación - no es que ande hablando con Louise sobre ti, solo que me dijo no quiero que te estrelles con sus rarezas. Así que.

Dijo por último y se dirigió a una pantalla táctil el cielo empezó a cambiar. Se movía un poco y se hacía más grande. Cara tendió una colcha en el piso y me recostó con cuidado para luego ubicarse ella.

Cara: ves esa estrella de allá - hizo una pausa mientras yo la ubicada, Asentí - es tuya. No es muy difícil. ..

Voltie a verla, se veía tan linda explicando como consiguió la estrella y la certificación y que ahora tenía mi nombre, me encanta como habla con las manos.

Esta mujer me esta enamorando pensé, porqué resistirme más, me levanté un poco en su dirección y la mire a los ojos, como efecto ella se callo, pase mi mano por su mejilla y muy lentamente me acerqué hasta tener sus labios a un centímetro de los míos, dije gracias en un susurro y antes de que ella pudiera responder elimine el espacio entre nuestro labios y la bese, un beso casto lleno de cariño, sus labios tan suaves, profundizó el beso cogiendo mi cabeza y acercándome más, el movimiento de sus labios tan certeros y como de a ratos abría su labios para contener alguno de los míos, ya no podía respirar e intente alejarme pero ella mientras yo recuperaba la respiración me daba pequeños besos tiernos.

____: gracias - repetí

Cara: si así agradeces, la de regalos que te voy a llenar.

Reímos, volví a recostarme a su lado, pasó su brazo bajo mi cabeza y yo me acurruqué en ella. Permanecimos así mirando las estrellas por más de una hora, hablando de cosas sin sentido.

Cara: por qué no te gustan las flores? - pregunto por fin.

___: las flores muertas - le corregí.

Cara: bueno, por que no te gustan las flores muertas?

____: es un tanto poético, entregas rosas rojas para demostrar amor, pero son flores en agonía, han sido cortadas, morirán pronto y no entiendo como algo así puede avivar el amor, yo no disfruto teniendo algo que va a morir pronto, cerca de mí.

Cara: no lo había pensado así. Son hermosas.

____: tu eres hermosa y yo no te mataría para tenerte. Si encuentro algo hermoso lo mantengo vivo. No tiene más lógica?

Cara: pues sí. Entonces no flores muertas, anotado.

___: bien.

Cara: ya conociste la ciudad?

___: no en realidad.

Cara: dicen que no hay mejor forma de conocer Londres que con un Londinense.

Enséñame a vivir (Cara Delevigne y tú)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora