Capítulo 1: Error Inesperado

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Narra Cristel

Me levanté de mi cama. Hoy el clima era bastante caluroso.

Odiaba los días calurosos.

Me di un baño, me puse un short de mezclilla blanco, una blusa de tirantes negra, y salí a desayunar. 

Era domingo, así que no iba a trabajar a la secundaria.

Saludé a mis padres y luego les comenté.

—Bueno y ¿qué pensaron respecto a lo que les dije ayer de irme de la casa y comprarme un departamento?—.

Mi padre me miró.

—Pues yo digo que está bien. Ya eres una adulta y puedes hacer tu propia vida, y por lógica también vivir sola. Así que te apoyo—.

Yo sonreí.

—Obviamente yo también te apoyo. Sólo estoy algo triste... Pensé que jamás te irías de ésta casa...— habló mi mamá.

—Pues hoy mismo me voy. Ya compré el departamento, sólo me queda hacer mis maletas. Sé que es repentino, pero deseo independizarme y dejar de ser una carga para ustedes. Bueno, me retiro a mi habitación a comenzar a empacar— les informé.

Ambos se sorprendieron pero no dijeron nada.

Dejé mi plato en el lavabo, para irme a mi habitación.

[...]

Después de una hora, dieron las 11:00 am, y por fin había terminado de alistar mis maletas. 

Salí de mi habitación después de darme un baño, me alisté y tomé mis maletas y bolsa.

Fui hacia la sala en donde encontré a mi padre sentado viendo la televisión, y a mi madre leyendo un libro. 

Ambos me miraron, se levantaron, se acercaron a mí y mi madre apunto de llorar me dijo.

—¿Estás lista?—

Yo asentí con la cabeza.

Mi padre me sonrió.

—Bueno, luego nos avisas y nos mandas la dirección de tu departamento ¿okay?— volví a asentir con la cabeza.

Salí de la casa y detrás de mí, ellos. 

Metí las maletas a mi auto, subí y arranqué, después de haberme despedido.

[...]

Tras dar algunas vueltas y comprar comida, utensilios de cocina y objetos de limpieza, me dirigí a mi departamento.

Entré al gran edificio de diez pisos. 

Llegué a la recepción y me dirigí con la mujer que me había vendido el departamento.

—Buenos días, bienvenida, ¿va a rentar algún departamento o comprar algún departamento?— me preguntó.

—Ya compré un departamento. Me puede dar las llaves del departamento 242 del quinto piso, por favor. Aquí están los papeles de la compra—.

Los tomó y revisó.

—Su nombre es Cristel Estefanía González Martínez. Es un departamento de clase media, tiene un baño, dos habitaciones con camas individuales, una lavandería, una cocina, un comedor y una sala ¿estoy en lo correcto?— me dijo.

Yo asentí con la cabeza.

—Bienvenida, aquí tiene sus llaves— tomé las llaves.

Después tomé mis dos maletas, me dirigí al ascensor, presioné el botón del quinto piso, y justo cuando se cerraban las puertas, una mano lo impidió. 

Amor Por Error [Corrigiendo]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora