Capítulo 6: Miércoles con ella

103 7 0
                                    

Narra Carlos

Mi familia estaba conformada por cinco integrantes, mis padres, mis dos hermanos mayores y yo.

Gozábamos de una buena posición económica, gracias al trabajo de mi padre.

Me levanté y me dirigí al baño de mi cuarto, para darme una ducha.

Cuando terminé y me alisté, bajé a desayunar con los demás.

—¿Cómo te fue en tu primer día como subdirector? ¿Te trató bien el director?— me preguntó mi madre.

Sonreí.

—Me fue muy bien. Si no hubiera sido por mi padre, no podría haber llegado a tal puesto—.

—Te lo mereces. Después de un tiempo te daré un lugar en la empresa familiar—.

—Si padre, gracias— le respondí con una sonrisa.

—¡Felicidades! Aprovecha esto, y pronto estaremos los tres trabajando en la empresa familiar— me felicitó mi hermano, el mayor. 

Yo asentí.

Después de unos minutos, terminé de desayunar.

Me despedí de todos y me dirigí al trabajo en mi auto.

Narra Cristel

Después de dejar a "sonrisitas" en la UNI, me dirigí a mi trabajo. 

A dónde llegué a las ocho en punto.

Estacioné mi auto y bajé.

Encontrando a mi lado un auto rojo aparcado, de donde bajaba el subdirector Carlos.

Pasé alado de él, evitando que me viera.

Cuando pensé que lo había logrado, escuché una voz detrás de mí.

—¿Está huyendo de mí?—.

Me giré.

—Por supuesto que no, buenos días señor subdirector— le respondí con una sonrisa.

Él se río.

—Buenos días. Y por favor, no me llames señor ¿si? Podemos hablarnos informal cuando estemos fuera del trabajo o a solas ¿okay?—.

Yo asentí. Y ambos entramos a la secundaria.

Narra Sebastián

Era miércoles, lo que quería decir una cosa: Friend time.

Sandra y yo íbamos a mi casa y pasábamos un buen rato. 

Sólo que en esta ocasión, sería en mi departamento, el cual... También pertenecía a Cristel.

—Espero no se moleste conmigo pensé en mi interior.

Estaba más que claro que de esto nadie tenía conocimiento en la UNI. 

Si fuera así, Sandra y yo estaríamos en graves problemas.

Ya saben.

Muchos pensarían que teníamos esa clásica relación prohibida de maestra-alumno. 

Aunque claramente ese no era nuestro caso.

Al principio se lo quise contar a John, pero conociendo su boca suelta, decidí que lo mejor era que no.

******Hora de salida******

Por fin el timbre anunció la salida.

Amor Por Error [Corrigiendo]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora