Un encuentro inesperado (Asking Alexandria)

Capítulo 10. Ben.

Quería hablar con Jimmy, necesitaba tener cerca a Ben, me había llamado más de veinte veces pero en medio del bosque no tenía cobertura por lo que no pude hablar con él.

-Jimmy -lo llamé-.

-Dime -dijo girándose sobre si mismo y mirándome-.

-Echo de menos a Ben -dije mirándo al suelo-.

-¿Quién es Ben? -preguntó-.

-El chico con el que me vistes los otros días.

-Ah, ese, ¿qué quieres que haga? -preguntó-.

-Llévame a verle, por favor.

-No voy a arrancar el coche, si quieres le dices que venga aquí si encuentra el camino, en ese caso no digo que no -me dijo-.

-¿En serio? -pregunté-.

-Si, ¿cuándo te he mentido yo?

-Gracias -le sonreí y le bese en la mejilla-.

Subí a mi habitación y llamé a Ben.

No me lo cogió así que volví a llamar y me descolgó la llamada.

-¿Si?

-¡Ben soy yo! -exclamé-.

-Hola preciosa, ¿dónde estabas? te he echado de menos-dijo con su tierna voz-.

-Fuimos de acampada y allí no había cobertura, bueno, ¿estás ocupado?-le pregunté-.

-¿Por qué?-preguntó él-.

-Por si te pudieras venir a dormir conmigo aquí, mi hermano me deja.

-Pero...¿tu quieres?, yo puedo ir, pero mañana por la noche tengo que estar de vuelta.

-Si, claro que quiero Ben, vente.

Ben al final aceptó, dijo que en dos horas estaría aquí, y así fue, a las dos horas estaba llamándome al móvil, lo cogí y me dijo que estaba en la puerta, bajé y allí estaba él.

-Ben -dije mientras me abrazaba-.

-Hola pequeña -dijo besándome la mejilla- te he echado mucho de menos -me susurró al oido- no sabes cuanto.

-Y yo.

Me acercó a sus labios y comenzó a besarme tiernamente, como si hiciera fuerza me rompiese, era adorable.

-Ven -dije dándole la mano- vamos a mi habitación, dejas tus cosas y nos damos una vuelta por ahí.

-Perfecto -dijo sonriéndome con su perfecta sonrisa-.

Subimos a mi habitación, dejó sus cosas sobre la cama y salimos, justo en ese momento salió Syn de su habitación y me miró, después miró a Ben con desprecio y ¿celos? y después volvio a mirarme.

Pasó de nosotros y se metió al baño, en ese momento me sentí mal, pero tenía que aguantarme, el daño ya estaba hecho.

Salimos de la casa y comenzamos a andar por el bosque.

-Tengo que decirte algo con respecto Synyster.

-¿Quién? -preguntó confuso-.

-El que hemos visto, el que decías que estaba celoso los otros días -le conté-.

-Si, ¿qué ocurre con él?-preguntó-.

Se me hizo un nudo en la garganta, pero tenía que contarselo.

-Me besó en varias ocasiones y una vez o dos le seguí el juego -dije mirando al suelo-.

Ben soltó mi mano, nuestros dedos entrelazados dejaron de estarlo.

-Ben, lo siento, yo no quería.

-¿Te has acostado con él? -preguntó-.

-¿Qué? -pregunté confusa- no, no lo he hecho.

-Vale -dijo seco-.

-Ayer lo ignoré todo el día, huyo de él constantemente -dije mirándo al suelo-.

Elevé la vista hasta sus ojos, estaba serio, cabreado, se le notaba mucho, volví a mirar al suelo y noté su mano tomando la mía y entrelazando nuestros dedos.

-No te preocupes, ya ha pasado, a parte, confío en ti -me dijo ya más relajado-hey, mirame -dijo tomándome por la barbilla-estás preciosa -sonrió-.

Se acercó a mis labios y comenzó a besarme. Andamos un rato más, Ben me tomó por la cintura me levantó y me sentó en un tronco que había allí.

Después el se subió y me tomó la mano.

-¿Y tu hermano no me matará por la diferencia de edad? -me preguntó mientras me acariciaba el pelo-.

-No creo -dije riendo- él solo quiere verme feliz.

-Eso me gusta -me acariciaba la cara suavemente- tu me gustas -dijo mirándome a los ojos-.

Se acercó sin esperar respuesta y me volvió a besar.

-¿Volvemos? tenemos que almorzar-le dije-.

-Claro, vamos -dijo sonriéndome-.

Llegamos y Synyster estaba sentado en la puerta fumandose um cigarro y ¿de sus ojos salían lágrimas?