Un encuentro inesperado (Asking Alexandria)

Capítulo 15. Remordimientos.

SAMANTHA'S POV

Me desperté a la mañana siguiente de la fiesta en mi habitación, me dolía mucho la cabeza y no era solo de resaca, me levanté, tenía un gran corte en el brazo y no podía apoyar bien el pie en el suelo, me vestí con una sudadera y unos leggins y bajé a la cocina, Jimmy le estaba gritando a Brian.

-Es que eres un inmaduro Brian, ¿viste cómo acabo mi hermana por tu culpa? -preguntó Jimmy a gritos- ¡Que es una menor!

-Vale, lo siento, yo no quería eso Jimmy, sabes que nunca le haría daño, la quiero mucho -dijo Brian cabiz bajo- pero no me pienso alejar de ella.

Brian se levantó de la mesa y salió de la cocina con la mirada en el suelo.

-Brian -dije cogiéndole la muñeca-.

Me miró a los ojos y me miró apenado, se sentía culpable por lo de ayer.

-Lo siento Sam, yo no quería que pasase eso -pasó por mi lado y se metió a su dormitorio-.

Entré en la cocina cabreada, me senté de mala manera en la barra, me eché una taza de leche con cereales y miré a Jimmy con cara de pocos amigos.

-Eres idiota James -susurré-.

-Te he escuchado Samantha -me dijo mirándome a los ojos-.

-¿Por qué lo tratas así? -le pregunté- él no tiene culpa de nada.

-Si que la tiene -me agarró fuertemente del brazo, haciéndome daño- y lo sabes.

-Eres idiota Jimmy -me levanté de la mesa con mi taza de leche en las manos- te odio.

Me fui de la habitación y subí a mi dormitorio, me acabé de tomar el desayuno y fui al dormitorio de Brian.

Abrí la puerta y estaba sentado en la cama con unos shorts con la cabeza apoyada en las manos y los codos en las rodillas.

-¿Estás bien? -le pregunté y se sobresaltó-.

-Sam, eeh...vete -dijo nervioso mientras se tocaba el pelo-.

-¿Qué te pasa, Brian? -le pregunté-.

Se levantó y se acercó hasta mi empujándome fuera de la habitación, sus ojos no tenían expresión, estaban fríos.

-Lo siento Sam, estás así por mi culpa, no puedes ni andar-dijo mirándome a los ojos-.

-No es tu culpa Brian, y lo sabes perfectamente-repliqué-.

-Sam -suspiró- me he peleado con tu hermano, es mi mejor amigo y no me gusta esto.

-¿El qué? -pregunté confundida-.

-No me gusta estar peleado con él, entiendelo, eres menor, quiere protegerte -hizo una pausa- no sé Sam, yo quiero que tu y yo podamos tener algo, pero todo es complicado, demasiado.

-Brian -susurré-...

-Shh...no digas nada -dijo poniendo uno de sus dedos sobre mis labios- pasa -dijo tomando mi mano y haciéndome entrar en el dormitorio-.

Cerró la puerta y me dejó atrapada entre su cuerpo y esta, me miraba con otros ojos, ¿fascinación? quizás.

Me acarició el pelo con sus delgados dedos y los llevó hasta mi mejilla, ese juego lento me estaba matando, se acercó más a mi, estábamos a penas a unos cinco centímetros. Acarició mi mejilla y bajo su mano hasta mi mandíbula que en eso momentos estaba un poco tensa, deslizó aún sus manos más pasándolas por mi cuello, me tensé y me miró a los ojos, retiró su mano y la bajó por mi brazo lentamente hasta entrelazar sus dedos con los míos, su otra mano se apoyaba en la puerta con fuerza.

-Bésame -susurré-.

Eso mismo era algo que no esperaba, pero por su rostro se extendió una preciosa sonrisa con sus dientes perfectamente alineados.

-Como me gustas, Sullivan, me gustas tanto que superas a mis fuerzas y rompes toda mi cordura -dijo acariciando mi mejilla-.

El color de mis mejillas cambiaron de color, comenzaron a arderme, sentía un poco de vergüenza.

Se acercó a mi quedando a menos de un centímetro, nuestras respiraciones chocaban y podía oler su aliento, era perfecto.

-Repítelo -ordenó-.

-¿El qué? -pregunté confusa, me había perdido en sus ojos café-.

-Lo que has dicho hace unos segundos, por favor, quiero oirlo de nuevo -dijo casi suplicando-.

-Bésame Brian -le ordené-.

Justo en ese momento se acercó un poco más a mi y juntó nuestros labios, jugaba con ellos tiernamente hasta que su lengua pedía camino hacia mi boca, la dejé pasar y nuestras lenguas comenzaron a jugar la una con la otra.

Me cogió por la cintura para atraerme más a él, yo subí mis manos hasta su pelo y comencé a jugar con este, bajó sus manos lentamente a mis caderas y comenzó a jugar con el borde de la sudadera.

Nos separamos obteniendo oxígeno, el beso había sido largo y maravilloso, sentía que el corazón se me iba a salir del pecho, al igual que los pulmones, Brian tenía la respiración tan agitada como yo. Me sonrió, yo le devolví la sonrisa, nos volvimos a dar un rápido beso y nos tumbamos juntos en la cama mientras él jugaba tranquilamente con los dedos de mi mano.

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Bueno, nuevo capítulo, no es muy largo, pero es un capítulo normalito(no me arranqueis la cabeza) sólo espero que os haya gustado.

Bueno, también avisad de que cuando llegue al capítulo 20 comenzaré a subir una historia de Oliver Sykes, por si hay alguien a quien le interese leer(ya diré el nombre y eso).

Por otra parte el viernes y el sábado no estaré en casa, lo que significa no internet, no subo capítulo, sibpara el sábado por la noche tengo algo aceptable, subiré.

Y ya por último, ¿qué os parece la historia?, ¿os gusta?, ¿cómo debería seguirla?

comentar y darme vuestras opiniones^_^ influenciaran a los siguientes capítulos!

Un beso enorme:)