Después de haber estado toda la mañana junto a Amy, Penny decidió acompañar a su amiga hasta su casa mientras que conversaban. Amy le contó a Penny que su matrimonio estaba casi por derrumbarse y que no podía hacer nada más que ver y llorar. Penny la aconsejó; le dijo que no hiciera eso. Que no se quedara viendo como todo se salía de control. Era irónico porque Penny era un poco desastrosa en el amor y ahora le tocaba a ella ser quien tuviera la voz de la experiencia.
Luego de un largo rato llegaron a la casa de Amy, finalmente se saludaron con un fuerte y cálido abrazo de esos que tú y yo amamos.
Penny antes de regresar a su hogar decidió visitar a su amiga, Iris.
Cuando llegó al edificio subió las escaleras ya que quería hacer tiempo. Los ladridos de Lili se podían oír desde el segundo piso . «Pero si es la pequeña Lili, le daré una paliza de mimos» pensaba Penny mientras que sonreía y subía escalón tras escalón.
-¡Ohh, pilla! -Penny tomó en sus brazos a la pequeña caniche mientras que ella le lambía parte de su rostro-.
-Linda, ¿cómo has estado? No te esperaba. -Iris le da un beso y se queda parada en la puerta mientras que Penny jugaba con Lili.
Iris al parecer estaba en compañía, se podía observar el total desorden que tenía la mujer en su casa. Había ropa interior masculina en el suelo, y la mesa principal se veía como si alguien hubiese roto todo lo que tenía encima.
Iris seguía parada en la puerta pero ahora se había recostado en el marco. -Penny levantó su mirada y vio el desorden-.
-Querida, ¿estabas ocupada? -Iris dio una señal con sus ojos y Penny pudo entender todo- Dis.. discúlpame ya me voy.
-Discúlpame tu, luego me llamas.
"Ay, maldición. Que estúpida ¿por qué tuve que venir justo ahora? Que vergüenza, Dios mío" dijo Penny mientras que bajaba por las escaleras como si alguien la estuviese persiguiendo.
«Tendré que acostumbrarme a ver que todos tienen a alguien a su lado con quien pasar buenos y malos momentos, mientras que yo bueno, tengo vida nocturna».
Penny parecía frustrada, y estaba realmente enfadada con ella misma. Decidió subir a un taxi para llegar lo más pronto posible a su casa. Ya era de noche y en donde vivía ya habían pasado varios hurtos así que decidió tomar precaución.
El hombre que manejaba el taxi observaba a Penny a través del espejo retrovisor, a Penny no le gustaba para nada esto. Deseaba llegar pronto a su casa. Había planeado prepararse un tazón de té y meterse a la cama.
Cuando el taxi llegó a su destino, Penny le dio el dinero al hombre. Ella salió del auto de prisa y gritándole unas terribles barbaridades al taxista.
"Que asco, es un atrevido. ¡¿Por qué son todos iguales Dios mío?!" -Penny había golpeado con fuerza la puerta del auto, seguramente el taxista se habría arrepentido de haber hecho lo que hizo-.
Mientras que revisaba su cartera en busca de las llaves de su casa, repetía "es un atrevido", se encontraba en la entrada y aún no las hallaba.
-Oye, ¿qué te han hecho, fue otro tonto más quien te ha hecho enojar? -Penny se sorprendió al escuchar que un hombre le hablaba desde la puerta de su casa. Cuando alzó la mirada sonrió al ver que el muchacho era Mark.
-¿Qué haces aqui? me asustaste -Dijo Penny sonriendo un poco más-.
-Lo siento, no fue mi intención. -Mark se acercó a Penny-.
-Era broma, nada me asusta -Los dos sonrieron-.
-Pero ¿qué te hizo el muchacho del taxi?
-No me hagas recordar. Cuando le di el dinero acarició mi mano y me pidió mi número de teléfono.
Espero que les guste, gracias por leerme.
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Nuestra historia también es tuya.
RomantizmSe narra el romance de Penny y Mark, hasta que llega a sus vidas Adele, la persona que va a iluminar la vida de Penny y viene para bendecirnos con su voz. Pero para esto, tienen que suceder varias cosas.