-Era uno de los encargados de defensa personal, fue un gran consejero y amigo. Llegué a pensar que le gustaba pero creo que él respetaba mi matrimonio o bueno más bien a Aleksi. Todo el mundo le temía a mi marido. Incluyéndome. Estuve 2 años en la agencia, me entrené en defensa personal y manejo de armas de fuego. Siempre tuve contacto con Rumlow hasta que murió Aleksi. Después de eso todo cambió.
-Por qué no buscaste ayuda?
-Aprendí a amarlo así. -Victoria resopló. -Después de ver morir a su esposa y estar a punto de morir él también dijo que yo debía aprender a manejar su negocio y a defenderme. Pasaron 5 años y todo era de ensueño, yo era su mano de derecha. Conocí a todos los líderes de HYDRA alrededor del mundo o bueno la mayoría. Se movían en secreto como Aleksi, aunque algunos aún lo hacen. Sé muchos secretos y al igual que sus planes a futuro. Aunque ahora que S.H.I.E.L.D. cayó y se descubrió que HYDRA estuvo infiltrado por años, muchos secretos se descubrieron y algunos planes se truncaron. No todos porsupesto
-Yo fui uno de ellos.
-Sí pero no me dejes hablar más, aburro a cualquiera con mis platicas. Háblame de ti.
-No sé más que lo que tu sabes.
-Tienes planes? Qué quieres hacer?Negué con la cabeza. Ella se sentó de nuevo y me miró fijamente.
-No quieres tener una esposa y familia? Una casa? Un perro? O viajar por el mundo conociendo lindas chicas?
-No creo que sea posible en mi caso.
-Apreciabas a la camarera?Asentí, pensé en Jessy y el pequeño Andy. Ambos eran tan frágiles. No quería pensar en su sufrimiento.
-Ambos hemos sufrido mucho en nuestras vidas, Bucky. He sido torturada aunque no tanto como tú. Sé que se siente que hagan de ti lo que quieran. Que te traten como a un objeto. Que te utilicen para el mal. Por eso te agradezco que me sacaras hoy del Night Club. Iba a ser el objeto de ese hombre. Aunque no sé la razón de porqué lo hiciste. Espero que haya sido por celos, ya que, sería lindo.
Llevé mi vista a Victoria ella se veía derrotada, como una niña cansada y falta de comprensión. Llevé mi mano a la suya. Ella me sonrió tristemente. Se acercó un poco a mí, me tensé al pensar que me besaría, luego me dio un pequeño beso en la mejilla y me habló al oído.
-No estoy lo suficientemente ebria para besarte, además odio el vello facial, me da comezón Lo siento.
Le di una media luna en mis labios cuando ella se apartó.
-Sí sabes sonreír, Bucky. Sigue practicando esa sonrisa, sé que puedes sonreír más.
Nos acostamos en el suelo del quinjet, ella me contaba lo que anhelaba hacer antes de conocer a su esposo. Ella se acercó a mí y se durmió en mi pecho tiempo después.
Regresamos a la base al amanecer, Victoria me dio el día libre. Yo fui a mi habitación, tomé una ducha y dormí hasta tarde. Fui a la playa a caminar, ver el mar que me tranquilizaba, no sé porqué pero lo hacía, pasaron las horas y todo eran imágenes. Steve Rogers había vuelto a mis recuerdos, era diferente en el pasado, había cambiado mucho. Era extraño. Por qué había vivido tanto tiempo? Tanto como yo. Al regresar a la base fui al comedor.
La cena estaba lista, me dispuse a comer? solo como siempre en una de las mesas. Muchos agentes me observaban curiosos, ya era costumbre. Vi a alguien tomar asiento junto a mí, llevé mi mirada a su rostro y vi que era Marian.-Hola, James! -Me dijo algo afligida.
-Hola, señorita Preston. Volvió pronto.
-Dime Marian, ya te lo dije y sí, fue rápido. Al menos ya no está sufriendo. -Ella dijo resignada. Supuse que su madre había muerto.
-Lo siento mucho.
-Gracias!
-Quiere acompañarme a la azotea después de cenar?Ella asintió. Subimos a la azotea y tomamos asiento en el borde. Marian me contó todo lo que había pasado en el tiempo que estuvo en su casa viendo a su madre, la estaba esperando para morir.
Marian derramó unas lágrimas y se recostó en mi pecho. Yo la rodee con mi brazo metálico algo nervioso. Ella se sintió mucho mejor y fue a dormir tranquila esa noche.
Al siguiente día quise ir a ver cómo seguía su ánimo y que mejor excusa que ir por el mantenimiento de mi brazo.
-Buenos días, Marian.
-James, pasa! A quién se debe que vengas a ver mi desordenado taller?
-Sólo pasaba por aquí.Ella sonrió.
-Luces diferente, hoy! Es como si... -Ella negó con la cabeza. -Ven aquí.
Caminé hacia ella y me senté de frente. Tomó mi brazo metálico y subió la manga de mi sudadera. Marian le dio un poco mantenimiento a mi brazo mientras yo observaba sus ojos color miel y sus labios rosas finos que moría por besar nuevamente.
-Listo! -Ella dijo y se acomodó en la silla.
La tomé del brazo y la halé. Ella bajó su rostro con pena. Llevé mis dedos a su mentón y la besé. En eso alguien abrió puerta sin tocar. Era Victoria. Marian y yo nos separamos rápidamente. Ella llevó su mirada de Marian a mí varias veces, luego negó.
-Señorita Preston. Tiene un día de suspensión, sabe que son terminantemente prohibidos los idilios entre empleados en ésta agencia. Pase por mi oficina al terminar su turno.
-Sí, señora Petrov
-Señor Barnes, acompañeme!
-Lo siento. -Le dije a Marian y ella sonrió tranquila.
-No te preocupes.Caminé tras Victoria, llevaba un traje ejecutivo color celeste pastel. Entré a su oficina y me senté frente al escritorio.
-Vladimir me lo había dicho pero no le creí. Entienda que usted aquí no es un simple empleado, señor Barnes. Es uno de mis hombres de confianza. No se involucre íntimamente con las agentes o demás empleadas de la agencia.
-Bien, usted eso nunca me lo dijo.
-Lo sé. Lo siento.
-No pretendo seguir más aquí, no quiero asesinar a más personas. Sólo quiero hacer pagar a quienes asesinaron a Jessy y Andy. Y no suspenda a la señorita Preston, fue mi culpa.
-James... -Ella resopló. -Llevo 2 meses buscando a Rumlow y no lo encuentro.
-Qué? -Dije sorprendido. -Es el tiempo que llevo aquí.
-Así es. Desapareció de la faz de la tierra.
-Y qué piensa a hacer?
-Bucky... -Victoria negó con su cabeza. -Necesito que me ayudes a encontrarlo...
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Bucky Barnes: The Winter Soldier.
FanfictionLuego de la caída de HYDRA, Bucky Barnes, conocido también como el Soldado del Invierno, decide emprender una búsqueda para descubrirse a sí mismo. Recuerdos van y vienen, los fantasmas del pasado serán su martirio, aunque no todo será malo para nu...