Capítulo 34

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Me despierto sintiendo un gran peso en todas mis extremidades, agreguemos adicional el peso del cuerpo de John, imágenes de lo ocurrido la noche anterior vienen a mi mente y me sonrojo, me remuevo en la cama y me volteo para quedar cara a cara con mi bello y sexy esposo, amo esa palabra, esposo, miro mi cuerpo y me sonrojo aún más al notar que ambos estamos desnudos, miro a John detenidamente, se ve tan bello cuando duerme, sus pestañas caen sobre sus mejillas, sus suaves y carnosos labios se ven tan apetecibles que me contengo de besarlo para no despertarlo. John se remueve y lentamente abre sus bellos ojos grises.

- Buenos días – me dice sonriéndome y se acerca y me besa.

- Hola – le sonrió tímidamente y John baja la vista hacia mi cuerpo haciéndome que me sonroje aún más.

- ¿Cómo te sientes? – pregunta y veo preocupación en sus ojos.

- Genial – le sonrió y vuelve a besarme.

- Me alegra escuchar eso – dice sonriente y se levanta de la cama, me sonrojo e instintivamente cubro mis ojos al verlo desnudo frente a mí, John se ríe y lentamente aparta las manos de mi cara – que no te de pena, deberás acostumbrarte – dice y se separa de mi, camina y desaparece entrando al baño.

Me levanto y tomo su camisa blanca que esta tirada en el piso, me la pongo y la abotono, me llega más debajo de los muslos, volteo a la cama y miro horrorizada las sabanas, están manchadas de sangre, antes de que John salga y las vea las quito y las llevo al cuarto de lavado, entro en el armario y tomo unas nuevas, tiendo la cama justo a tiempo para cuando John sale con una toalla alrededor de su cintura, me mira detenidamente y sonríe.

- Te ves preciosa – sonríe y entra al armario, suspiro, no se ha dado cuenta de las sabanas, me levanto de la cama y entro en el baño.

Me cepillo los dientes y tomo una larga ducha, la verdad es que me duele un poco la entrepierna cuando camino pero el dolor es soportable. Salgo del baño envuelta en una toalla y antes de entrar en el armario veo a John acostado en la cama con su bañador puesto, supongo que vamos al riachuelo ahorita así que entro al armario y me pongo mi bañador, luego un short de jean y una camisa de John, sonrió y salgo del armario, John no está en la habitación, salgo y lo encuentro en la cocina.

Me siento a su lado y hago una pequeña mueca, John me mira con preocupación, tomo una tostada con un poco de jugo de naranja y comienzo a desayunar.

- ¿Te duele? – pregunta John y yo niego con la cabeza.

- Solo un poco – asiente y se levanta y se para detrás de mí y me abraza.

- Gracias pequeña – me susurra y yo doy la vuelta.

- No amor, gracias a ti – le digo sonriente y se agacha y me abraza.

- Ven, vamos – dice y me levanto a su lado, toma mi mano y salimos de la casa - ¿quieres tomar un baño conmigo? – pregunta señalando el riachuelo y asiento.

John se quita la camisa y me mira, toma el dobladillo de la camisa y la quita por mi cabeza, toma el botón de mi short y lo desabrocha, me lo quita y me besa, luego toma mi mano nuevamente y entramos al riachuelo, el agua esta templada y me sumerjo en esta junto a John, cuando salgo me acerco y lo beso, esto me recuerda a la vez pasada que estuvimos aquí, la única diferencia es que el ahora es mío, mi esposo, enrosco mis piernas a su cintura y lo beso.

Pasamos toda la mañana en el río, y luego del almuerzo John y yo queremos ir a nuestro pequeño sitio, sonrío a John y salgo corriendo rumbo al mirador, siento sus pasos detrás de mí y voy corriendo lo más rápido que puedo riendo como loca, reduzco la velocidad y John me alcanza, me toma en brazos y sigue caminando.

Luego de unos minutos John me baja y se acerca para besarme, es un beso tierno, en el cual le demuestro todo el amor que siento por él, nos separamos por falta de oxígeno y nos sentamos a mirar a nuestro alrededor, yo entre las piernas de mi esposo con su pecho a mi espalda.

- Eres una tramposa – me dice y yo sonrió.

- Eso me recuerda – sonrió perversamente – nunca fuiste en realidad mi sirviente.

- Pero tú hiciste trampa.

- Pensar que hace unos meses solo eras mi profesor – le digo suspirando.

- Incluso desde el primer momento pequeña, siempre me gustaste – sonrió ante sus palabras y volteo para mirarlo – lo admito, el pequeño John solo fue una excusa para acercarme a ti.

- Lo sabía – le digo sonriendo.

- Y luego me mude a tu casa – sonrió recordando su loco arrebato de mudarse a mi casa.

- No puedo creer todavía que hayas hecho eso.

- Oye, yo no fui quien tocó la puerta de su vecino a las 3 de la mañana porque mi hijo tenía fiebre – sonrió al recordar esa vez.

- Estabas en bóxers, te veías condenadamente sexy – sonrió y me sonrojo al recordarlo.

- Fue la primera vez que dormiste conmigo – susurra en mi oído y yo me estremezco – y las que faltan- sonríe y me abraza.

- Y las que faltan – repito en un suspiro y me volteo apoyando mi cabeza en su pecho.

Aquí con él y con esta hermosa vista frente a nosotros me doy cuenta de algo, si se puede ser feliz, yo encontré el amor con él, con John, nada fue un obstáculo para nosotros, me enamore de mi profesor de historia y el de mi, y ahora estoy dispuesta a ser feliz a su lado y al lado de nuestro bebé, siempre estaré a su lado porque lo amo y el a mí.

FIN

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Oh el fin... ¿a quien le gusto?, es un poco corto, ¿quieren o no un epilogo?

Me siento muy agradecida con ustedes por todos sus comentarios y sus votos, y en general con su apoyo... Es mi primera obra finalizada en wattpad, la primera de muchas espero, estoy trabajando en una nueva que es totalmente diferente a esta, en realidad tengo varios proyectos en mente, espero que este les haya gustado y que lean las que vengan...

Si la historia Te gustó, sigueme, recomiendala a tus amigos, vecinos, a un viejito, indigente o desconocido que veas en la calle, en el metro o en cualquier otro sitio :D

Gracias por leer

Att. Mariana

P.D . Preguntenme lo que sea.. prometo responder

Mi Profesor de Historia #GDLJustTellThem - #JuventudLiterariaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora