ENAMORÁNDOME DE MI DULCE ESPOSO

CAPÍTULO 17

JUNGKOOK PVO

– ¿Q-que tu q-qué? - la voz de Tae sonaba un tanto nerviosa, sus ojos estaban abiertos como platos, me miraba a mí para luego mirar a Jimin. Les había llamado a penas tuve la oportunidad, Tae, era mi mejor amigo, mi hermano y no quería que se enterase por mi madre, de ser así de seguro no me lo perdona.

– Estoy embarazado Tae, con Jimin vamos a ser padres. - Tae seguía sin creérselo.

– Serán padres... - dijo aquello mientras miraba fijamente mi vientre, asentí con mi cabeza ante sus palabras.

– ¡Ay! ¡Mi Kookie tendrá un bebé! ¡seré tío! ¡Hobi, amor seremos tíos! - ver aquella reacción me hizo sonreír a decir verdad me preocupaba la reacción de mi amigo, Tae de inmediato se acercó a mí para luego abrazarme, correspondí su abrazo.

– Mi Kookie ¡felicitaciones! esto es increíble, por fin tendré a alguien con quien jugar. - todos comenzamos a reír ante las palabras de Tae.

Hoseok o Hobi como me dijo que le dijera miraba fijamente la escena, ver aquella sonrisa en sus labios me hizo feliz por mi amigo, se veía de lejos que él realmente lo amaba, Tae se separó de mí para luego acercarse a Jimin, le miró fijamente sonriéndole.

– Gracias por cuidar tanto a mi amigo, felicitaciones serás un excelente padre. – presenciar aquella escena hizo palpitar mi corazón, me sentía dichoso, lo más importante para mí era que por fin Tae y Jimin se entendieran, después de todo ambos son muy importantes para mí.

Por otro lado, Hoseok estuvo un buen rato molestando a Jimin, se ve que son buenos amigos, luego de aquello me abrazó felicitándome, sonreí correspondiendo su abrazo susurrándole:

– Cuida a mi amigo, sé perfectamente como es y se ve que te ama mucho. - sentí la sonrisa de Hobi en mi cuello.

– No tienes idea de cuánto lo amo, es lo mejor que me ha pasado. Gracias por la pintura. – escuchar sus palabras desató que una enorme carcajada se escapase de mis labios, ahora por fin sé qué fue lo que le pasó con mi pintura.

Hoseok también comenzó a reí mientras tanto Jimin junto a Tae nos miraban como preguntándose "¿Y a estos qué les pasó?".

– ¿Cuánto tiempo tiene esa galleta dentro tuyo? - la pregunta de Tae me puso nervioso.

– Un m-mes. – nuevamente sus ojos se abrieron de sorpresa.

– ¡Tanto tiempo y hasta ahora me vengo a enterar! - la mirada de Tae era acusadora.

– Tú tampoco me habías presentado a tu novio estamos a mano. - Tae me miró fijamente para luego negar con su cabeza.

– ¿Nunca te puedo ganar verdad? - sus palabras nuevamente me hicieron reír, siempre pasaba lo mismo, cada vez que Tae me iba a recriminar algo nunca podía, porque siempre tenía algo que recriminarle a él, le saqué la lengua en forma burlesca para luego comenzar a reír...

– Kookie me tengo que ir, pero lamento decirte que no te desharás de mí, vendremos a verte muy seguido. - tras decirme aquello Tae intentó poner rostro siniestro, pero solo consiguió que todos comenzáramos a reír de su puchero, ambos se despidieron para luego salir tomados de la mano de nuestro departamento.

– Creo que fue más difícil que tu amigo me aceptara, tu padre me adoró desde el comienzo. – murmuró alzando una ceja de manera burlesca, me tumbé en el sofá dejando mi cabeza en sus piernas, para luego abrazar su cintura.

– No sabes lo feliz que me hace que al fin se comiencen a llevar bien. - Jimin sonrió mientras sus adorables dedos comenzaban a acariciar mi cabello. Me sentía tan cómodo, el cuerpo de Jimin era tan cálido, cerré mis ojos un momento sintiendo las caricias, el sueño nuevamente me invadió y sin que pudiera hacer nada, caí rendido en un profundo sueño solo alcance a escuchar una voz que me decía