ENAMORÁNDOME DE MI DULCE ESPOSO

CAPÍTULO 14

JIMIN PVO

– Señor Jimin, la junta de hoy fue cancelada. El señor Lee no puede atenderlo hasta la próxima...- escuchaba como hablaba Hee Yeon hablaba y hablaba, pero nada de eso me importaba en estos momentos, toda mi mente solo estaba cargada por pensamientos de Jungkook, me preocupaba, ayer lloró mucho sentía miedo que me haya mentido y sea más grave.

Solo espero que se haya comido todo lo que le preparé, nunca había sido de prepararle algo a otra persona, pero con él es diferente, me ponía nervioso, pero a la vez me encantaba, ver su rostro tan feliz mientras comía algo que yo le preparé, ¿por qué tiene que ser tan tierno este mocoso?

– ¿Jimin, escuchó lo que le dije? - Hee Yeon me sacó de mis pensamientos, la miré no muy contento por interrumpirme.

– Sí, escuché todo, me avisas para cuando se cambie la reunión y ahora me puedes dejar solo mi esposo ya está por llegar. - Hee se ruborizó, para luego asentir con su cabeza y desaparecer, me recosté en el sofá en espera de Jungkook, cerré los ojos un momento esperando que Kookie se acercara a mí para darme su tan esperado beso de "te extrañe"

La puerta se abrió, ya sabía quién era por lo que me quedé en la misma posición, sentí el aliento de alguien en mi rostro, era extraño no podía sentir ese dulzor tan embriagante de Kookie, sentí unos labios posarse sobre los míos, pero estos no eran suaves como los de Kookie, estos no eran mis dos algodones de azúcar, abrí de inmediato los ojos para ver de quien se trataba, al hacerlo vi a ¿Yoongi? Le empujé de inmediato para separarme de él.

– ¡¿Qué mierda crees que haces?! - grité nervioso, llevé mi mano derecha a mis labios para limpiar todo rastro del beso, seguí pasando mis manos por aquel lugar, pero la textura de sus labios todavía estaba, necesitaba borrar aquella sensación, Kookie no merece nada de esto.

– ¿Cómo que mierda hago? No crees que es obvio ¡¿por qué te limpias tanto los labios piensas que por qué no estuve contigo me acosté con cualquiera?! - gritó aquello más que furioso, negué con la cabeza aturdido por todo.

– Jamás pensaría eso de ti, de qué quieres hablar. - mi voz sonó suave, ya no quería gritar ni nada.

– Acepto Jimin, acepto esperarte el maldito año que me pediste, después de todo ya no queda nada para que se acabe tu estúpido contrato. - por la mierda, nunca había estado tan enojado conmigo mismo, eres un imbécil Park como fuiste capaz de haberle pedido eso, eres un maldito...

Yoongi nuevamente comenzó a acercarse a mí, cuando estuvo lo suficientemente cerca llevo sus labios a los míos, ambos estábamos a centímetros, pero yo no pude, no podía hacerle esto ni a Kookie ni a Yoongi.

– Lo siento. - susurré aquellas palabras sin alejarlo de mí.

– Realmente lo siento Yoongi, pero no puedo, no puedo aceptar que me esperes porque yo no volveré, y-yo... él, Jungkook, mi esposo es alguien muy bueno. Él se convirtió en mi pequeña burbuja de felicidad y no quiero romperla, perdón. -

– Te enamoraste, eres un idiota no me pidas perdón. Realmente deseo que seas feliz, aunque tenía la pequeña esperanza que yo sería aquella persona, pero me equivoque. - Yoongi dijo aquello en un susurro, su voz sonó tan bajita que me asusté, nunca había visto esa expresión en su rostro se veía tan destruido, sus ojos estaban brillantes, pero aun así me sonrió y me deseó ser feliz, algo que me hizo sentir aún peor, fuiste realmente un animal Park.

– Adiós. - dijo aquello para luego desaparecer de mi oficina, mi pecho dolía, me sentía tan mal, Yoongi no merecía esto, él es alguien realmente bueno es un poco gruñón, pero siempre se preocupó mucho por mí, solo espero que el también encuentre su pequeña burbuja de felicidad...