Capitulo 12

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No me podía creer que las cosas acabaran así. Pensaba que estábamos hechos el uno para el otro, pero solos somos unos críos caprichosos que no saben que para amar, hay que sufrir. Entre en clases y me senté un chico del equipo me dio un pañuelo y me dijo ánimo. Parece que todos se habían enterado, me reí porque la gente del instituto son como abuelas, muy cotillas. Es imposible guardar un secreto.

Deje de pensar en eso y me puse a pensar en que esta tarde, conocería el sexo de mis bebes ya podría ponerles nombres. Aunque también estaba asustada porque en los embarazos múltiples, siempre puede haber problemas o complicaciones.

Esta tarde le preguntaría al médico todo sobre lo que tenía dudas, lo apunte en mi agenda para que no se me olvidara. Estuve mirando por internet y hay una prueba que se llama amniocentesis para ver si los bebes pueden tener alguna enfermedad. Tendría que hablar con Mer acerca de esa prueba, pero quiero saber lo máximo que pueda sobre mis bebes.

Estoy cada dos por tres mirando el reloj para ver cuando se acaban las clases. Por fin suena el timbre, recojo mis cosas rápidamente. Al salir de clase veo que el jugador de mi clase y el capitán me estan esperando a la salida. Se lo agradezco para evitar encontrarme con Iván. Voy a mi taquilla y veo a mis amigos, apoyados en ella.

Ricky le hace un saludo con la cabeza al capitán, les agradezco y se van. Veo que los dos tienen una sonrisa enorme y se por qué, parece que Ricky y el capitán por fin tenían algo en común, sus ganas de protegerme.

Valen- es la hora Lorea por fin sabremos el sexo.

Ricky me abraza y yo le devuelvo el abrazo. Pero siento más presión de lo normal Valen se unió. Deshago el abrazo y los miro a los dos sonriendo.

Lorea- bueno chicos nos vemos a las 7 en la clínica, ¿vale?

Ambos- ¡claro!, allí estaremos.

Iván estaba escuchando, iban a saber el sexo de sus bebes. Que cojones había hecho. Quería estar con ella, formar parte de la alegría que veía en su cara. Y sobretodo ser el, el que hiciera que ella fuera feliz. Lo tenía difícil, ella había sufrido mucho y yo tenía parte o mucha de culpa. Solo había una persona que podía ayudarlo, su madre.

Primero tendría que llamarla y que ella le perdonara. Sería difícil pero iba a conseguirlo, aunque hoy quería estar con ella y ver su cara al saber el sexo de los bebes. Sabía a qué clínica iban y les oye decir que a las 7 asique iría allí a esperarla. Luego pensó que mejor se lo diría para evitar enfrentamientos. Asique se marchó a casa de su madre, sabían dónde vivían porque las siguió una vez.

Estaba nervioso no sabría quien le abriría a puerta al llamar, aun así se armó de valor y llamo a la puerta. Pasaron unos minutos hasta que la puerta se abrió.

Mer- ¿Qué haces aquí, Iván?

Iván- yo... bueno... veras, estoy un poco nervioso. Solo quería decirte que lo siento.

Mer- ¿Qué sientes Iván?

Iván- todo, como os he tratado a los dos. No es lo que quería en mi vida y sé que os he hecho mucho daño, no va a ser fácil que volváis a confiar en mí. Pero pondré de mi parte, me lo tome fatal os abandone en vez de apoyarme en vosotras. Soy un cobarde me asuste y lo lleve de la peor manera. Quiero a mi familia, yo solo puedo decir que pondré todo de mi parte para que seamos felices si me dejáis, claro.

Mer- si va a ser complicado, has tardado mucho en darte cuenta de tus fallos. Por mi parte me parece bien, porque somos humanos y nos equivocamos. Adema me has sorprendido, no pensé que vendrías a hacer esto. Fuiste un cobarde pero ahora eres valiente al venir aquí. Ahora habla con Lorea, ella será más difícil según me ha comentado.

Lorea- no hace falta, vi quien era y estuve escuchando. Iván tendrás que ganártelo, no te voy a decir que no porque estos bebes son también tuyos, siempre participaras en sus vidas. Pero tendrás que ganarte estar en las nuestras.

Iván- lo se Lorea, me ganare vuestra confianza y vuestro perdón, aunque me cueste. Quiero preguntarte algo.

Lorea- claro, dime.

Iván- ¿sabes el sexo de los bebes?, bueno en general me gustaría saber todo lo que me he perdido sobre vosotras y sobre ellos. Quiero comprarles algo.

Lorea- no lo sabemos aún, vamos esta tarde. Puedes venir, en cuanto a lo otro. Creo que tú madre y yo podemos invitarte a tomar algo, y contarte todo. Así ves la habitación de los bebes y me dices que te parece.

Mer- me parece genial Lorea, además si quieres comprarles algo de regalo ves lo que tenemos para evitar comprarle lo mismo.

Yo sonreí, esto empezaba bien. Me dejaron pasar yestuvimos charlando hasta que llegó la hora de irnos a la clínica para saber elsexo de los bebes, a sus amigos que la iban a acompañar. Pero lo más importanteque estuvieran sanos y no hubiera problemas. 

Nos subimos en el coche los tres, menos mal que me dejaron acompañarlas. Ya era hora de tomar control sobre mi vida y hacer lo que está correcto. Aunque paso a paso, estaba contento de que hasta ahora iba bien. Pero no sabía cómo iban a reaccionar sus amigos, espero que no haya problemas.

Estábamos llegando a la clínica y ya podía ver a sus amigos en la puerta, estaba emocionado por saber el sexo. Pero sobretodo porque no era tarde para estar en sus vidas. Aparcamos el coche, antes de que Lorea pudiera bajar salir corriendo, le abrí la puerta y le tendí la mano porque sé que le cuesta levantarse con su barriga.

No me di cuenta que al agacharme para darle la mano, la chapa de alcohólicos anónimos se salió por el cuello de la camiseta. Ella la cogió y me miro sonriendo, era un punto a mi favor. Después de enterarme empecé a beber, no sabía si era alcohólico pero iría a las reuniones regularmente por si acaso.

Lorea- me gusta que veas los problemas.

Iván- no sé si es un problema como tal, pero al ir a esas reuniones me siento mejor. Espero que no te importe.

Lorea- para nada, esto son puntos a tu favor.

Iván- no digas nada, no es que no quiera que lo sepan. Simplemente no estoy preparado para contarlo.

Lorea- me parece bien, es algo tuyo, personal. Sabes que cuando estés preparado puedes contarme lo que quieras, cualquier problema.

Iván- gracias Lorea.

La ayude a bajar y nos dirigimos a la puerta, Mer está hablando con Ricky y con Valen, supongo que le está contando el porque estoy aquí. No parecen enfadados, no sabría decir con exactitud que estan pensando. Pero no puedo acobardarme, es mi familia y quiero formar parte de ella. Nos estamos acercando a ellos, estoy nervioso no solo por ellos, sino por saber el sexo y ver que todo está bien. Espero que no haya problemas.

Llegamos a su lado y no dicen nada, es un poco raropero no pienso decir nada. La recepcionista nos dice que esperemos un poco enla sala de espera. Lorea me coge de la mano, supongo que el movimiento de mipierna le dio la pista de que estaba atacado de los nervios. Pasan 5 minutos ynos llaman para entrar, es la hora.    

Hermanastros.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora