*Fairy Oak, Un Nuevo Comienzo*©

Los poderes de los gemelos

Cuando llegamos a casa después de la búsqueda de Violet, noté que estaba pensativa.
Y creo que Alhelí también lo pensó porque le preguntó qué le pasaba.
-Viole, ¿estás bien? te noto distraída.
-Si...si...sólo estoy algo cansada por lo de hoy...
Alhelí no parecía creérselo así que insistió, y con una sonrisa pícara en sus labios dijo:
-Tu has conocido a alguien.
Violet le miró con los ojos como platos.
Su hermano la conocía demasiado bien, después de todo no dejaban de ser gemelos...
Violet se puso roja como un tomate.
-No-no...¿ A quién? He estado todo el rato contigo en el cole y en el bosque...
Viole se mordió los labios.
-Es un chico ¿no?
Violet se puso aún más roja, se sentó en la cama y le rehuyó la mirada.
-No... A quién y cuándo.
Al la miró a los ojos y los entornó.
-En el bosque.
-No tienes pruebas
-¿Y qué hay de ese collar?
-¿Qué collar?
- Ese que llevas
-No sé de qué hablas... Siempre lo llevo puesto...
-Casi cuela. Escupe.
-Yo...
-Viole, soy tu hermano, puedes contarme lo que sea, cuando no cuentas las cosas estás muy seria.
Además soy tu gemelo, no puedes escapar ni mentirme- Luego añadió con una divertida sonrisa y una voz misteriosa- Puedo leerte la mente...
La niña suspiró.
-¿Sabes que he aprendido a volar?
-No cambies de tema...espera...¿qué?
La brujita sonrió.
-Mira es así.
Elevó los brazos cerró los ojos. En su boca se dibujó una sonrisa.
-¿Estoy volando ya?
Alhelí la miró con cara de preocupación.
Ella abrió los ojos y miró al suelo.
Seguía de pie en él.
Luego miró a su hermano.
-¿Estás segura de que te encuentras bien? ¿Tienes fiebre?
-¡Volé, te lo juro!
Vainilla, que pasaba por ahí, rió y entró en la habitación.
-¿Qué os traéis entre manos ahora?
-Violet es una mentirosa, le pasa algo y no me lo cuenta, y dice que puede volar.
-¡Es verdad, no me lo invento, preguntárselo a Celi!¡Me caí al río porque me elevé sin querer y ahora sé volar!
Su madre abrió los ojos como platos.
-Que puedes hacer...¿qué?
-Volar, ¿por?
- ¿Y cuándo volaste?
-Pues..antes de caer al río.
Su madre dio un grito de júbilo y corrió a abrazarla.
-¡Jim, tu hija ha heredado mis poderes, es una bruja de la luz!
Jim corrió hacia la habitación y nos miró con los ojos como platos.
Acto seguido cogió a Violet y la giró en el aire.
-¡Mi hija es una brujita de la luz!
-¿¿En serio?? Pero lo he intentado ahora y no puedo volar.
Vainilla rió.
-Hija, las brujas de la luz sólo vuelan de día, al contrario de los magos de la oscuridad.
Los mágicos de la luz pueden crear, nunca destruir, transformarse en animales diurnos, iluminar lugares, convierten lo feo en bonito y lo bonito en maravilloso.
Yo de pequeña fui una bruja de la luz.
-¿Y por qué ahora no?
-Renuncié a mis poderes para poder estar con tu padre, como la abuela.
-¿Y yo qué poderes tengo?
-No lo sé, ¿has volado alguna vez?
-No...- Se le notaba decepcionado.- ¿Podría ser un mago de la oscuridad?
-Eso no se elige, o se nace de la luz, o se nace de la oscuridad.
-Ah...
-¿Sabes qué? Vamos a comprobarlo, llamemos a los tíos.
Un rato después, toda la familia se encontraba abajo.
Vainilla les contó lo ocurrido a Grisam y a Pervinca.
Pervinca felicitó a su sobrina y se acercó a Alhelí.
-No estés triste Al, a mí me pasó lo mismo a tu edad, pero ahora vamos a comprobar qué poder tienes-
Pervinca se había convertido en una mujer sabia y madura, aún algo rebelde, como su marido. Me sentía muy orgullosa de ella.
Grisam sonrió.
-Te vamos a enseñar a volar, en el caso de que seas un mago de la oscuridad.
Al sonrió.
-Vale, empecemos.
Grisam se acercó a él.
-Piensa en un animal nocturno que vuele, tu favorito. Cierra los ojos y concéntrate en ese animal.
Bien, ahora mira al cielo y relaja los brazos, no los eleves...
Muy bien.
-¿Estoy volando ya?
-Compruébalo tu mismo
El maguito abrió los ojos.
-Estoy...¡Estoy volando!
-¡Dobla una rodilla y manten los brazos pegados al cuerpo para ascender poco a poco, si quieres ascender más rápido, dobla las dos.
-¡Uoooo!
-¡Cuidado no seas tan brusco! ¡Separa las piernas para frenar!
-¿Así?
-¡Muy bien!
-¿Cómo bajo?, Anda, aquí arriba hay un gato...
-¡Junta las piernas y eleva los brazos poco a poco, no te vallas a caer!
En cuanto aterrizó, corrió a abrazar a su tío.
-¡Soy una mago de la oscuridad! Gracias...
Éste se agachó y le revolvió el pelo.
Se conservaba tan joven que parecía su hermano mayor.
Después de la experiencia, llena de gritos de júbilo abrazos y felicitaciones, todos se fueron a la cama.
Los gemelos estuvieron un buen rato hablando antes de ir a dormir.
-Por cierto, no me has contado con quién te encontraste en el bosque...
-Te lo cuento mañana- se dio la vuelta.
El niño suspiró.
-Está bien, no te molesto mas, pero lo averiguaré, a mí no se me escapa una.- Y dicho esto, el también se dio la vuelta.

Un rato después llegó Babú a la habitación para comprobar que estaban arropados y vio a Violet sentada en la cama.
-Qué pasa cariño, ¿No puedes dormir?...
-No...
Se acercó a la cama de su hija, la arropó y la besó en la frente.
-Me quedaré contigo hasta que te duermas.
-Vale...-La niña se quedó pensativa.
-Mamá...
-¿Sí?
-¿Cuándo fue tu primer beso con papá?
-Si te lo cuento...¿Te dormirás?
La niña asintió.
-Bien, pues te lo contaré.
Antes de que empezase a relatar, no pude evitarlo, y dije desde mi caseta:
-Suspirosuspiroso...
Vainilla se giró para mirarme, me sonrió y me hizo un gesto para que bajase a escuchar el relato.
Cuando me hube acomodado en su hombro, ella cogió aire y empezó a relatar...