Daddy {Rubelangel}

xv.

El viento golpeando su rostro, el ocaso, el olor a la tierra mojada anunciando una bienvenida a la lluvia junto con el olor a cigarrillo crea el entorno agradable y de libertad. Voltea a ver a Richard en varias ocasiones él le responde con sonrisas y el brillo que provoca en sus ojos el leve brillo del sol tras su cercano ocultamiento; brillan tanto que hipnotizan a Rubén obligandolo a besarlo, para continuar con aquello que ya había iniciado detuvo el auto. Rubén subió completamente su cuerpo al del otro moviendo sus caderas para exitar el miembro de su piloto sin parar de besarlo, el sabor tenue a cigarrillo provoca un sabor amargo en su boca el que no puede evitar seguir probando, introduciendo su lengua y dandole vueltas en la boca de Richard; el ya mencionado aparta a Rubén de él tomando sus caderas para añadir...

- Lo siento... - Rubén lo mira frunciendo el seño, y el momento "magico" acaba cuando una persona abre la puerta y lastimandole los brazos al ya mencionado lo saca arrastrándolo fuera del auto.

Con una cinta callaron sus gritos y con una venda negra cegaban su vista...
Quien lo diría, intentando escapar de ser tratado como un esclavo sexual, y que le hicieran eso, acabo cayendo en el mismo oscuro y profundo pozo.

El cuarto oscuro.

El auto llegó a una cabaña muy lejana de la ciudad, a jaloneos, gritos y golpes fue como bajaron a Rubén del auto. Pero el quería ser fuerte... ó aparentar serlo, mordía su labio evitando que las lágrimas recorrieran sus blancas y suaves mejillas. Parecía mas un requerimiento para entrar a ese lugar el estar desnudo, y eso fue lo que le hicieron; a pesar de muchas veces haberlo estado, todas esas veces fue con Mangel... a salvo donde él apreciaba si cuerpo pero él ya no estaba más y volvió a aquellos momentos de su infancia, donde su madre sufría de abuso intrafamiliar y su novio golpeaba a Rubén, era 'un puto borracho sin motivo en la vida" como lo llamaba él ; por eso él decidió decirles que era gay, para escapar y no volver. Conoció a Mangel en la calle, Rubén dormía en una banca, con suerte comía una asquerosa y putrefacta comida... pero lo llevo a su casa le dio alimento, calor y sobre todo amor algo que para Rubén era desconocido y con el tiempo sus lazos se volvieron fuertes y cayeron en lo que es hoy, o mejor dicho lo que son hoy.

Una ventana y cadenas adornaban la fría, sucia y oscura habitación.
En su cabeza solo giraba la idea
" ¿Qué me harán? " y gritos internos que pedían dolorosamente estar en los brazos de su amado Mangel.

Y la luna con las lágrimas, una vez más eran sus únicas compañeras.

×Mangel×

Sentí un fuerte golpe en el pecho. Desde que conocí a Rubén, "adopté" algo así como un sentido protector; un golpe en mi pecho... justo en el corazón eso era como me avisaba que estaba en peligro. Cuando eso sucedió supe que algo andaba mal, tomé mis cosas y salí, conducía demasiado rápido; me salté varias luces rojas pero ahora no estaba para seguir las malditas leyes de la estúpida sociedad. Solo quería encontrarlo y salvarlo, porque a pesar de todo lo buscaría en un millón de mundos más, hasta estar junto a él.

Porque... mi mundo es él.