xviii.

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La salud de Rubén no mejoraba ni un poco, es más empeoraba; empezó a temblar demasiado ya no era una pequeña fibre sencillamente le hervía la sangre, sudaba frio cada gota corría por su cuerpo, Mangel solo conducía para llegar a un hospital para que fuese atendido; pero a pesar de su estado Rubén no podía quitarse la estúpida sonrisa del típico enamorado veía a su piloto apresurado y solo reía, supongo que el calor corporal le estaba afectando un poco la cabeza mas de lo que ya estaba.

Varios minutos mas transcurrieron, y para alivio de Rubén encontraron un hospital fue atendido casi de inmediato; pero tuvieron que quedarse, su cuerpo y salud era muy débil como para salir. Se encontraba una mesedera arrinconada bastante comoda, perfecta para el dolor de espalda que tenia Mangel por cargar a su pasiva, un poco nervioso acercó las yemas de sus dedos para deslizarlas por el suave y lacio cabello castaño, recorrió un par de mechones de su rostro para observar esos hermosos ojos verdes, parecían un par de esmeraldas brillantes, repetía una y otra vez el pequeño viaje de sus dedos entre el cabello tratando de tranquilizar la respiración del contrario. El toque de sus párpados marco una siesta que ayudo a recordar esos momentos con su modelo favorito.

The before a dreamer
Mangel

La hora del movil marcaba exactamente y mas que precisas la 1:00 am, una charla entre Mangel y Rubén había sucedido tras las cuatro paredes, cosas como que seria de ellos en el futuro y de que a pesar de todas las cosas que hacían a veces era aburrido estar el día entero "encerrado", aunque para Rubén eso ya era común.

- Eh oido sobre una nueva página en Internet llamada... - se detuvo a recordar- YouTube- añadió Rubén mientras bebia de su batido.

- ¿De que trata?

- Videos, grabas y subes contenido. Podríamos hacerlo, somos muy buenos con los video juegos, ¿no lo crees? - añadió a su frase para no sonar un tanto posesivo y tomar el lugar de Mangel.

- Suena divertido, luego lo veremos... pero ahora papi quiere jugar. - dijo acercándose a Rubén, recorriendo su mano por la larga pierna del contrario para provocar que su piel se erizara.

- Bueno pues tu pasiva nunca se cansa de darte placer.

Tomó su camiseta levantandola, sacándose los pantalones un tanto apresurado a sentir el escalofrío que se formaba en su cuerpo en cuanto el tacto de Mangel se acercaba.
La cremallera de los jeans negros del pelinegro fue llevada hacia abajo, cuando la mano de Rubén se introdujo para tocar su miembro una sensación eléctrica recorrió su cuerpo; las piernas de la pasiva se abrieron de par en par para dejar posar su el cuerpo de Mangel completamente y sintiera su erección. El tema de los disfraces para ellos era muy interesante y divertido, para llenar este "requisito" Rubén corrio al armario por un pequeño top blanco, de dos lineas recorriendo a los lados y un gran moño rojo, se poso en la cama levantando su cadera incitando a Mangel a tocar su pene, a lo que él correspondió subiendo y bajando su mano, para que el nivel de velocidad en que lo hacía aumentara, llegando a masturbarlo, dandole la vuelta a Rubén, Mangel colocó su pene en la entrada del otro dando "apuñaladas" duras y con velocidad lo que provocaba que el ojiverde gimiera, y diera gritos de satisfacción, lo que hizo que Mangel prosiguiera eran sus risas tan lindas y sonoras.
Cuando se encontraba a punto de llegar al orgasmo lo único que podía hacer era morder la almohada y tomar con los puños aquellas sábanas blancas, testigos de las noches que pasaban juntos, haciéndose feliz. Siendo una pareja que el mundo repudiaba por ser simplemente "gays", por algo que los demás llamaban "enfermedad" siendo sencillamente amor incluso más verdadero que todas esas relaciones de hombre y mujer.

Extasiado de placer, se encontraban ya descansando uno al lado del otro, Mangel dormía, mientras que Rubén permanecía con una sonrisa en el rostro, parecía un niño al cual le habían comprado ese juguete que tanto quería. Y cerró sus ojos, pensando en lo afortunado que era al estar con un chico tan bueno, ¿realmente lo merecía?... no importaba solo estaban juntos eso es lo que todos queremos. Lo que mas le sorprendia era esa sensación de mariposas en su estómago, que le provoca ver los ojos negros de su 'Mahe' porque a pesar de esto ser su "daddy" el lo amaba.



Daddy {Rubelangel}Donde viven las historias. Descúbrelo ahora