Wonwoo fue separando su cuerpo del de ella poco a poco, como si no lo deseara, ¿qué le estaba ocurriendo? Se sentía tan estúpido... Principalmente porque él nunca había tenido sentimientos agradables por alguien que no fuesen sus amigos, al menos cuando no lo sacaban de sus casillas, ¿entonces por qué ahora sentía aquellas cosquillas en el centro de su estómago cuando veía aquella chica remoloneando a su alrededor? Él no conocía más allá que su nombre y que era un verdadero dolor de trasero pero entonces por qué.
―Vamos. ―Selena llevó su mirada por primera vez después de lo ocurrido a los ojos de él, con la visión aún cristalizada por las lágrimas haciendo que todo en él se encogiese como respuesta.
―¿Vamos? ¿A dónde?
―Yo... ―Llevó su mano a su nuca y rascó débilmente. ―Te acompañaré a casa yo no quiero que te pas... bueno, sólo vamos. ―Las palabras se quedaron en la punta de su lengua, Wonwoo no quería que fuese más obvio de lo que ya estaba siendo.
Selena sólo asintió y comenzó a caminar en silencio mientras que pensaba en todo lo que había ocurrido y en lo que podría haber pasado ¿qué habría sido de ella si aquel moreno con puños de acero no hubiese llegado a tiempo? No quería siquiera imaginarlo y ahora realmente sí que sentía como una obligación el hacer todo lo que cupiese en su mano para ayudarlo, no sólo a superar aquel miedo con el contacto físico que parecía no afectarla a ella completamente, sino esta noche en la que él se encontraba en peligro también.
Las lágrimas no paraban de recorrer las mejillas de ella en silencio, el miedo aún se mantenía perenne en su cuerpo y parecía que sería así el resto de la noche. Wonwoo la miraba disimuladamente mientras que ella abrazaba su pequeño cuerpecito a sí misma, ¿por qué se sentía como si fuese la misma basura? Él carraspeó para ahuyentar aquellos pensamientos.
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―¿No pararás de llorar? ―Respiró aliviado cuando su voz sonó comprensible y no como la miserable persona que era. Ella lo observó con sus ojos verdosos llenos de inocencia haciendo que se sintiese si cabe mucho peor.
―Lo siento. ―susurró. Pasó el reverso de su mano por su cara para eliminar cualquier rastro de lágrimas. ¿Por qué ella pensaba que se lo estaba recriminando? Wonwoo tenía la necesidad de consolarla, pero claro, cuando la conversación más larga que ha mantenido con una persona del sexo opuesto fue a sus cinco años de edad no sentía que fuese de gran ayuda.
Él intentó ponerse en el lugar de ella, ¿qué debería de hacer para que ella parase de sollozar? Vio sus manos agarrando con fuerza sus costados mientras que tiritaba ¿sería por frío o por miedo? En un movimiento rápido, Wonwoo pasó su chaqueta oscura por los hombros de ella evitando rozarla. Selena paró su caminar y lo observó sorprendida, como si aquel acto fuese lo último que esperaba por parte de él y después escondió una pequeña sonrisa tras su cabello haciendo que él estuviese rodeado de una bola de fuego a pesar de encontrarse en aquella fría noche vistiendo una mísera camiseta de manga corta ¿por qué sus mejillas ardían con cada pequeño acto de aquella loca? ¿Por qué tuvo que aparecer para mover toda su vida sin siquiera conocerla?
Finalmente llegaron a la puerta del edificio, ella lo observó para hablar pero él sólo negó e hizo un movimiento de cabeza para que ella siguiese caminando. Las paredes del ascensor parecían encoger por segundo y que los cuerpos de ambos estaban demasiado cerca para su salud, hasta que finalmente las puertas se abrieron, un par de pasos después, ambos ya se encontraban frente al departamento de Selena.
Wonwoo metió las manos en los bolsillos traseros de sus vaqueros desgastados como signo de incomodidad, ¿qué debía decir o hacer?
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Agradeció mentalmente que Selena se adelantase y diese el primer paso.
―¿Dónde pasarás la noche? ―Él levantó la vista para observar aquellos ojos que tanto le estaban empezando a gustar en estas dos semanas.
―A mi piso, por supuesto.
―¡No! ―contestó rápidamente. ―Te dije... Te dije que te estaban esperando allí. Hoy no podrás volver, hazlo en la mañana, entonces será más seguro. ―susurró entre tartamudeos.
―¡Oh, claro! Será mucho mejor pasar la noche sentado en la acera con este frío. ―dijo con aire divertido, cosa que hasta a él mismo le sorprendió.
―Puedes pasar si quieres. ―Selena habló de forma atropellada y Wonwoo no pudo entender siquiera una palabra de lo que dijo.
―¿Qué?
―Que puedes pasar si quieres. –Repitió esta vez mucho más decidida haciendo que sus palabras cogiesen desprevenido a Wonwoo.
―Te recuerdo que puedo ser un asesino o un violador. ―dijo con media sonrisa recordando sus palabras de la semana anterior cuando se coló en el asiento del copiloto en su coche.
―No creo que los asesinos o violadores salven a chicas estúpidas a altas horas de la noche de ser violada por otro. ―Wonwoo chasqueó la lengua.
―Puede ser que sea muy egoísta y no quiera compartirte.
