Don't touch

Ojos que no ven

Ambos sentían aquella presión en el pecho que los hacía querer unirse. Wonwoo observaba los labios de ella con ansia, queriendo probar su sabor aunque fuese un segundo.

Sin darse cuenta comenzó a acercarse mientras entrecerraba sus ojos, al igual que Selena, sus respiraciones chocaban. Wonwoo por instinto inclinó la cabeza un poco, ella estaba tan sumamente feliz ¿tan fuerte era lo que él sentía que incluso se atrevería a besarla? En otro chico este pequeño acto podría incluso no significar nada, pero en él era todo tan diferente. Pasaba por encima de su miedo, de aquello que condicionaba su vida, para compartir un momento tan íntimo con ella.

Cuando sus labios se rozaron mínimamente un grito se escuchó desde afuera de la habitación provocando que ambos se separasen rápidamente y aclarasen sus gargantas que habían quedado secas esperando por algo que nunca llegó.

― ¿Selena? No tengo todo el día, ¡vamos!

― Te juro que en cualquier momento lo mato y verás que pronto supero todo esto del contacto físico. ―dijo ejerciendo toda su fuerza en la mandíbula mientras tenía sus manos en forma de puño provocando la risa de Selena. Ella golpeó su brazo y, con una mano lo tomó de este y con otra sostenía la cámara mientras lo dirigía hacia la sala donde estaba su amigo esperando impacientemente.

Cuando ambos llegaron Wonwoo lo fulminó con su mirada y susurró un "te odio" provocando que Seokmin contestase un "no creas que yo te quiero" con la misma mala gana.

Poco después, Selena hizo que el moreno se sentase en el sofá, este tenía el corazón latiendo rápido, pesado y con fuerza. Se sentía mareado, viendo como todo se movía a su alrededor. Sabía que Selena no le haría daño, por eso ella era la excepción, algo había en ella que le aseguraba que nada malo pasaría y, en realidad, aunque le aseguraran que sí que le haría sufrir pensaba que no le importaría y se arriesgaría por ella; sin embargo, Seokmin lo había juzgado como el resto, incluso desde antes de cruzar el umbral de la puerta, si le hiciera daño ¿incluso se alegraría?

Podía sentir su pulso rápido recorrer su cuerpo, estaba incluso hiperventilando cuando Selena encendió la cámara para grabar de nuevo. Él sentía lo mismo que aquellos artistas que tenían miedo escénico, intentaba observar lo que le rodeaba pero no conseguía ver nada. Aquellos gritos del pequeño Jeon Wonwoo comenzaron a retumbar en su cabeza. El hecho de que alguien lo tocase lo hacía sufrir, pero saber de antemano que existiría contacto físico era mucho peor ¿cuántas veces había dejado el cambio en las tiendas porque no rozasen la palma de su mano?

Segundos después de que Selena explicase lo que ocurriría, Seokmin se acercó y se sentó al lado de él como si fuese ajeno a la situación ya que realmente no creía que el caso fuese sumamente grave; sin embargo, Wonwoo se estrelló contra el otro extremo del sofá en un abrir y cerrar de ojos. Selena tragó ese fuerte nudo que estaba reteniendo en su garganta mientras veía la escena, en realidad, ella tampoco sabía hasta qué nivel llegaría todo aquello pero cuando vio las grandes gotas de sudor bajar desde la frente de Wonwoo supo en dónde se había metido.

Seokmin alzó una mano dirigiéndola lenta y dolorosamente hacia el brazo de Wonwoo, el cual cerró los ojos por aquello de ojos que no ven corazón que no siente. Pero no pudo, cuando aún los separaban veinte centímetros, Wonwoo se levantó del sofá rápidamente alejándose de él. No veía, estaba insensibilizado y no sabía qué hacer así que apoyó su espalda en la pared más cercana hasta caer sentado en el suelo.

Eres un desgraciado Jeon Wonwoo.

Nunca deberías de haber nacido.

Lily pásame el cinturón, este niño no sabe aún dónde está metido.

Aquellos gritos se acentuaron en su mente y como si volviese a tener cinco años, volvió a llorar, poco le importaba que hubiese alguien delante, siquiera recordaba que no estaba solo.

Selena apagó la cámara con rapidez y se dirigió a él, mirando a Seokmin para que se marchase de allí. Incluso él, el cual sin conocerlo ya odiaba a Wonwoo, había sentido cómo se le encogía el corazón al verlo de aquella forma, tan indefenso.

Wonwoo soltaba pequeños hipidos debido a la falta de aire por las lágrimas, sentía que estaba muriendo, mientras que Selena lo observaba con preocupación, no sabía si tocarlo en estos momentos era buena idea.

― ¿Wonwoo? Wonwoo, ¿me escuchas? ― Él siquiera la miró mientras seguía llorando, se encogía y rodeaba sus piernas con sus propios brazos.

― No me pegues por favor, ¿mamá? Ayúdame.