Sólo espera un minuto

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El sistema nervioso de Selena se encontraba al borde del colapso, ¿qué debería contestar? ¿La verdad? El tono de voz que había adquirido anteriormente el moreno le provocó tanto miedo que no estaba segura de si debía siquiera contestar o si era una simple pregunta retórica, tal vez él estaba malinterpretando sus intenciones.

―Yo... Bueno, sólo venía a ver un par de actuaciones.

―¿Esperas que te crea? Sólo suéltalo y vete de aquí. ―Las palabras de Wonwoo afectaban en cierta forma a Selena y esto hacía que su enfado aumentase y, con ese humor, la respuesta negativa sería aún más evidente por parte de él.

―Yo sólo... ―Selena soltaba palabras sin sentido mientras que él alzaba una ceja para expresar lo poco que estaba entendiendo de la conversación. ―Joder, necesito tu ayuda ¿vale? ―Wonwoo soltó una risa sonora para luego quedar en silencio cuando se dio cuenta de que Selena hablaba en serio.

―Debes de estar bromeando, ¿cierto? ¿Te golpeaste la cabeza bien fuerte cuando te desmayaste? Porque por si no te has dado cuenta, desde que te conocí sólo me has dado problemas.

―¿Sabes qué? No importa. ―Selena comenzó a andar por el pasillo para llegar a la sala donde todo el mundo se encontraba; sin embargo, Wonwoo corrió hasta colocarse en medio de su camino.

―Tengo curiosidad. ―Dijo simplemente, dándole a entender a Selena que quería saber en qué lo necesitaba, aún a sabiendas de que no le haría el menor caso en cuanto lo supiese.

―¿Acaso cuando lo sepas cambiarás de opinión? ―Wonwoo se encogió de hombros ligeramente con el "no" escrito en la cara.

―Sólo quiero una historia graciosa que contarle a mis amigos.

―Es increíble que en el fondo había venido a ayudarte, eres un imbécil. ―Masculló en voz baja; sin embargo, no lo suficiente ya que el chico frente a ella logró escucharla, acorralándola contra la pared con una cara de pocos amigos.

―Repite eso. ―Él esperaba un silencio como respuesta, pocos eran los que se atrevían a plantarle cara.

―Im-bé-cil. ―dijo lentamente, mientras que con cada sílaba la mirada de Wonwoo se oscurecía más y más volviéndose tan tenebrosa que Selena casi se echa a llorar.

―Vete de aquí. ―Por una milésima de segundo pensó en hacer caso de sus palabras; sin embargo, al escuchar el desprecio de sus palabras algo la hizo actuar hasta golpearlo en la mejilla con la palma de su mano y marchándose a continuación dejándolo con el corazón como si se tratase de un caballo galopando a máxima velocidad.

Selena salió con rapidez del local con los ojos cristalizados, siempre había sido una persona que aparentaba ser fuerte como una roca por fuera pero por dentro era de cristal y una simple mirada con altanería y soberbia rompía su corazón en miles de pedazos. ¿Él era tan malo como ya le avisó anteriormente? Cada vez estaba más segura de ello. Además, no estaba loca, sabía que Wonwoo era capaz de darle una paliza ahí mismo sin importarle nada ni nadie, se lo había demostrado.

Ya en la puerta, escuchó a un grupo de chicos que rondaban su edad pero con un rostro que de haberlo visto por la calle se habría cruzado inmediatamente de acera. Echando un pequeño vistazo, se dio cuenta de que el que parecía el líder de ellos se le hacía familiar, como si lo hubiese visto antes y entonces lo recordó. El hecho de no tener la cara ensangrentada e hinchada hizo que le fuese más difícil reconocerlo, pero sin duda, era él, era el chico al que Wonwoo golpeaba con furia el día que lo conoció.

No se hubiese quedando espiando tras la esquina del local de no haber sido porque escuchó la palabra clave, "Wonwoo", y aunque se maldecía por ello, algo en su interior no pudo evitar escuchar de qué hablaban.

Don't touchDonde viven las historias. Descúbrelo ahora