El Cambio De Mi Vida

Capitulo 32

—Y eso fue lo que sucedió, por eso es que reaccione tan mal cuando confesaste que habías abortado.—Lucas me termino de contar parte de su historia.

Historia que yo creía que no existía, tal vez solo pensaba que yo era la única que sufría, me equivoqué, al saber que si hay personas que en verdad sufren y mucho, no todas iguales que las otras, pero igual hay dolor en su vida, en su alma, como consecuencia de su sufrimiento está la desconfianza que algún día le podría volver a pasar lo mismo, que se va a repetir la misma historia que tanto te causó daño.

Eso era lo que Lucas pensaba, pues él no pudo dejar de comparar a su ex novia conmigo, pues habíamos hecho lo mismo pero con distintas razones, él pobre se había ilusionado tanto con la idea de ser padre y se entera que con la decisión que tomó esa chica, no sólo se fue la vida del bebé sino de ella, es lo que a mí me lleva a pensar, ¿Qué hubiera pasado, sí conmigo hubiera sucedido lo mismo?, nadie sufriría por mi, en ese momento todos me odian, me juzgaban y criticaban sobre lo que según yo había cometido, nadie me dio la oportunidad de aclarar nada, solo me señalaron y juzgaron por ellos mismo, tal vez era también lo que había sucedido con Lucas, pensó que era igual que ella, pensó que yo era una maldita cobarde, aunque yo lo acepto, lo soy o bueno lo era, yo debí quedarme con ese bebé, no debió importarme lo que dirán de las personas, no debí dejarme influir por mi madre, ella pensó que era lo mejor pero lo que ella no sabía es que ese bebé tenía la posibilidad de ser de mi padre, qué horrible suena eso pero es la verdad, abuso de mi son importar que era su sangre.

—Lo entiendo, sé que no fue fácil para ti enterarte algo así de mi pero también tenias que quedarte para escuchar la versión completa Lucas, no debiste juzgarme así, sé que sufriste y te juro, lo comprendo totalmente pero ¿Qué hay de mi?, no me escuchaste e hiciste lo mismo que los demás, juzgar sin escuchar.—él se paro y se puso al frente de mi.

—Se lo que hice, y sabes que me arrepiento, tuve que haber cumplido mi promesa pero simplemente me atacó, me agarro desprevenido saber que hiciste lo mismo que ella, tal vez no sepa tus razones de porque lo hiciste pero es algo que siempre me va acompañar conmigo. Lo siento por lo que te dije, sabes que no es verdad, solo quiero que me perdones.—se acercó a mí y vi sinceridad en sus ojos.

—Sabes que algo así sabía que iba a pasar, esa era la razón que ponía tantos trabas para no contarte nada, no era porque no te tenía confianza, era el miedo hacia tu reacción, si otras personas reaccionaron mal, tú también lo harías.—Lucas me miró ofendido.

—Yo no soy otras personas Franchesca.—dijo alterado.

—Pero reaccionaste igual querido.–me acerqué a él igual de alterada.

—Ya te expliqué mis razones, eres tú la que no acepta mis disculpas.—habló un poco más fuerte.

—No es que no lo acepte, lo hago, solo que tú.....—

—¿Yo qué?.—me interrumpió.

—AGH.—grité—Sabes así no vamos a llegar a ningún lado, tú estás enojado, yo también, así que calmémonos y arreglaremos las cosas.—me senté— Además hay que aprovechar que estas aquí y no sé cuando te vayas.—dije más tranquila.

—¿Cuándo me vaya?, ¿Acaso no te regresas conmigo?.—preguntó indignado.

—Mi hermana me necesita, lo sabes, no puedo regresar ahora.—trate de explicar.

—¿Cómo que no puedes? Y ¿Nuestra relación?, ¿Qué hay de ella?, yo también te necesito.—eso dolió, yo también lo necesito a él pero no tengo pensamiento egoísta, mi hermana está pasando por mal momento y tengo que estar con ella.