35. Dos Viñetas I. El beso

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Tanto Nymphadora Tonks como Audrey Svevo eran grandes duelistas, habían sido enviadas a una misión que resultó muy sucia. Ambas terminaron con las túnicas llenas de lodo, los zapatos ni se diga. No podían pasar el resto de la tarde con el cabello lleno de ramitas y barro en la cara.

Por fortuna el departamento de Aurores contaba con regaderas para casos como ese. Tenían que bañarse o tener que lidiar con las aves que al ver su aspecto las buscaban para anidar en sus cabelleras.

Rápidamente tomaron una ducha separadamente para estar frescas como lechugas. Se tenían mucha confianza, así que andaban impúdicamente en ropa interior una frente a la otra.

Una pequeña mancha morada destacaba en la cadera de Audrey, Tonks conocía ese tipo de marcas, Remus era poco discreto al dejárselas en el cuello y la espalda, pero la cadera era un lugar... nuevo.

-¿Qué es eso? –Tonks preguntó maliciosa.

-Oh –Audrey se llevó una mano a la cadera tratando de ocultar la marca –nada.

-¿Nada?, no luce como nada.

Ambas rieron, se sonrojaron.

-Extrañas costumbres de alcoba de Severus –confesó Audrey.

A Tonks la recorrió un escalofrío repentino, nunca se lo había imaginado haciendo... eso y menos con su amiga, hasta ese momento tuvo que comprender que, pues sí, lo hacían y probablemente como conejos.

II. Nada combina con Snape

-¿Y si tuviéramos un hijo? –Audrey era tan inoportuna a veces, preguntaba eso después de haber pasado una noche de locos con Severus.

-¿No estás... o si? –él respondió asustado.

-No, no seas tonto, sólo me preguntaba que nombre te gustaría.

-Difícil... -él pausó –nada combina con Snape.

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Un Moment Pour Toujour creado por Sufjan TweedyDonde viven las historias. Descúbrelo ahora