Alice
Retome mi rutina como cada lunes, el invierno ya había llegado nuevamente para quedarse por lo que con Beth decidimos salir a compararnos un par de abrigos, no suelo ser la chica que sale de compras pero realmente necesitaba algo más abrigado y a su vez aprovecharía la ocasión para después de tanto tiempo que ahorre, comprarme al fin una moto y no cualquier moto, era una Zanella Styler 150 Z3 color verde oscuro con su asiento en color manteca, que estaba la tienda más pequeña de motos en el centro.
Beth saldría del trabajo al medio día por lo que ella pasaría por mí cuando termine mi turno, realmente me gusta mi trabajo, es decir, a que amante de la lectura no le gustaría un trabajo en la librería pero como todo tenia sus pros y sus contras, como por ejemplo tener que soportar a los grupitos de adolescentes que vienen a irrumpir la hermosa armonía de paz que hay en el ambiente, casi dos años que estoy trabajando aquí y sigo sin acostumbrarme a ello, solo intento sonreír e intentar que no desordenen demasiado las estanterías.
- ¿tu eres la novia del Emanuel Arollo verdad?- dijo una chica de pelo verde, era más baja que yo y su prominente busto la hacia ver más rellena de lo que en realidad era.
- no tengo novio- conteste secamente, lo ultimo que necesito en este mundo es que se rumoree que salgo con un chico que a penas conozco
- hay evidencia de que mientes- su tono era desafiante y estaba comenzando a irritarme
- si tu lo dices- no puedo tratar mal a un cliente por razones obvias y por lo menos hasta salir de esta librería, debía tratarla con el mayor respeto que no merecía.
El pequeño grupo estuvo un buen rato en la librería, hasta que casi al final de mi turno se marcharon, sin comprar nada. Es extraño lo que esas desconocidas dijeron de mi pero prefiero ignorar el comentario y rogarle a Dios o quien sea que se estén confundiendo de persona.
Al salir no encontré a Beth por ningún lado por lo que la llame.
- Beth ¿donde estas?-
- Salí tarde del trabajo estoy por salir para allí, lo siento.-
- oh no es nada, te espero en los banquillos de la plaza que esta en la otra manzana-
- okey, bye -
- bye-
Di algunas vueltas a la plaza caminando, a la espera de Beth pero termine por sentarme al pie de un árbol, tome de mi bolso el fiel cuadernillo de dibujos que llevo a todos lados y comencé a dibujar, esta es la primera vez que dibujo algo así pero comencé a dibujar un retrato de mi madre mirando a través de una ventana, la ventana de la cabaña que tenemos a las afueras de la ciudad, realmente añoro ese lugar y ahí la vi a ella, no se si era mi imaginación pero la vi tan claro como puedo verme a mi misma en un espejo, su pelo seguía corto y su cuerpo estaba delgadisimo pero no se veía triste, ni cansada o en otras palabras drogada como solía verla en el hospital, tenía una sonrisa escondida en sus labios, esos labios pequeños y finos que en su rostro se veían extremadamente hermosos, giro su rostro hacía mi y en sus ojos se hallaba la empatia o quizás la emoción, no lo se pero en mi garganta un nudo apareció y sentí como una lagrima mojaba mi mejilla en su camino al suelo.
- oh Alice- su voz sonaba claramente en mis oídos pero a su vez un eco la acompañaba.
De repente su mirada se torno triste y simplemente ella desapareció, es lo mas extraño que me paso en la vida, fue como si estuviera claramente en frente de mi en un instante y al siguiente no, a su vez eso me pone triste ya que desearía haberle dado un ultimo abrazo, de esos que te reconfortan.
- ALICE!! ALICE!- gritaba Beth frente a mi
- que paso?- pregunte sinceramente, no entendía si había sido un sueño o que era lo que había ocurrido realmente
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Venus y Neptuno
Ficção Adolescente"Está no es la historia de dos personas conociéndose en el mundo. Es más bien, sobre dos mundos colisionando. Uno era azul, eléctrico, audaz, ávido, vibrante, vivo, sobre todo eso. Vivo. El otro, por el contrario, era pálido, calmo, triste, y esta...