Capítulo 32: La casa de los horrores

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Más de 3000 palabras *-* récord 

#Prepárate para sufrir 

Capítulo 32: La casa de los horrores

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Dos le hace muecas a Kaled y el bebé se ríe mientras entran a Magic Technology, luego canta mientras sigue caminando, pero se detiene al pasar por al lado de una puerta que le da una sensación extraña. Antes de entrar divisa a un científico y le entrega al pequeño, entonces con toda la incertidumbre del mundo, abre aquella puerta que le da por una extraña razón, pavor.

Abrió sus ojos de par en par cuando entro, una sorpresa desagradable apareció ante él. Allí estaba, el hombre de sus pesadillas, su padre.

― Oh, estoy tan contento ― exclamo el demonio atado en la pared ― mi querida flor de loto ¿Te han regado bien? ― sonrió alegre y disfrutando ver la cara de horror de Dos.

Los ojos del metamórfico se humedecieron y sus manos temblaban. Retrocedió mirándolo fijo sin pestañar y luego se giró corriendo.

― ¡¡Superior!! ― grito asustado pidiendo la ayuda de su hermano, por el miedo que recorría todo su cuerpo.

Muchos años atrás...

Superior... Edad: 9 años.

El pequeño niño, en ese entonces, llamado Uno, observo la sangre que pasaba bajo la puerta. Su mano toco la manija y entro a la habitación. Ahí estaba, la vio, su madre tirada en el suelo, muerta... los pies descalzos de Superior se acercaron a centímetros del cuerpo, se sentó y no lloro. Se quedó ahí, mirando... su corazón sufría por dentro, pero su voz interior le decía que no debía llorar, no ahora. Había acertado, la puerta de entrada se escuchó, "Él"... había vuelto.

Sus hermanos corrieron a esconderse, Dos en el armario, Tres bajo la cama y Cuatro, la más pequeña, cerró la puerta de su pieza. Uno, el único que había visto el cuerpo de su madre, se quedó a la vista, sin moverse ni un poco de ella. Los pasos seguían acercándose y se detuvieron en la puerta de aquella habitación.

― ¿Pero qué tenemos aquí? ― los ojos cafés del demonio posaron su vista en el niño, no le dio importancia a la mujer que estaba muerta en el suelo ― un valiente... ― por primera vez Uno lo ve directo a la cara y su mirada no es de miedo, es de odio. El hombre lo ignora y abre un mueble grande donde hay diferentes objetos filosos, pero lo que agarra es una pala enorme y pesada, la cual se la tira en la cabeza al pequeño ― entiérrala ― ordena.

La sangre que cae de la frente de Superior al ser golpeado, hace su vista borrosa, pero no se intimida ante esta acción.

― No ― responde seco.

― No ¿Qué? ― exclama amenazante.

Todo el valor del pequeño desaparece al ver a su padre enojado y responde con temor.

― No... no puedo...

― ¿No puedes? ― levanta una ceja.

― Pe... pesa... ― toma la pala.

― ¿Y a mí que me importa? ― escupe en el suelo.

Uno, con toda la fuerza que tiene, intenta mover a su madre, pero le es imposible, solo es un pequeño niño, no tiene tal fortaleza y en esa época su poder de metamórfico había sido bloqueado, por una pequeña pulsera que tenía en su muñeca derecha.

Huye de tu destino (sin editar)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora