La otra cara de Milo

¿Bella?

Geist despertó desnuda y con una gran sonrisa, pero cuando volteó a su costado, la cama estaba vacía; hizo un pequeño puchero y se fue directo al baño cuando escucho la ducha

-Amorcito,¿porque no me despertaste?- su voz melosa incomodó al cangrejo

-La pregunta sería ¿Porque no te has ido?- Angelo salió de la regadera y la empujó para pasar

-Amorcito, yo estaba esperándote para ver si....-,  -no tienes porque esperarme para nada, es hora de que te largues, no me hagas perder la paciencia y para cuando regrese no quiero encontrarte aquí- el cangrejo se vistió rápidamente y salió de su templo para ir a entrenar

-Seguramente sigue molesto con lo de su tonta hermana, el me ama y sólo es un mal momento-

Entró rápidamente al baño y se dio una larga ducha, se visto y comenzó a explorar el templo; vio los cráneos amontonados en un rincón

-Bonita decoración, máscara tiene sentido del humor-

Siguió su expedición hasta un cuarto que no habria simplemente con girar la perilla, recordó que en el cajón de la mesita de noche había un juego de llaves. Cuando logró abrir la puerta se quedó totalmente sorprendida

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Coliseo

Shaina y Marin terminaron su entrenamiento sin algun inconveniente, estaban guardando sus cosas cuando se dieron cuenta que un joven las miraba desde las gradas y hacia algo con una gran libreta

-¿Quien será ese tipo?- la cobra comenzó a molestarse porque el muchacho las miraba con mucha insistencia

-No lo se, pero creo que será mejor averiguarlo y si no pertenece al santuario, sacarlo inmediatamente- su compañera asintió y se dirigieron al rubio

-¿Quien eres y que buscas en el santuario de Athena?- las jóvenes preguntaron directamente y sin tapujos

-Disculpen mis malos modales, mi nombre es André Leroux, soy pintor y hermano de Camus de Acuario. Estoy aquí por una gira de mis galerías y me pareció una magnífica escena verlas peleando con esas extrañas máscaras- el muchacho tomó las manos de las dos y las besó; mientras les dedicaba una seductora sonrisa

Shaina retiró la mano despues del beso y miró con desprecio su gesto de caballerosidad, Marin quitó la mano y disimuladamente se limpió en el traje

-Lástima que seas un invitado de Camus, porque si por mi fuera, ya estarías de patitas en la calle- el francés esbozó una pequeña sonrisa por el comentario

-Me encanta su franqueza, señorita, quisiera que fuera modelo de mi cuadro estrella- ella sólo le dio la espalda y tiró de Marin para alejarse del tipo con aires de seductor

-Este tipo es más arrogante y vanidoso que 50 bichos, ¿no?- las dos chicas reían mientras el artista las miraba receloso

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Recinto del patriarca

El maestro Shion contemplaba una carta con melancolía, la caligrafía de aquel texto era perfecto, de una cursiva que se suponía muy antigua. Leía y releia la carta como si quisiera volver en el tiempo, se veía que muchas veces había sido arrugada por el coraje y el llanto, ya que en algunas partes las letras habían sido eliminadas por las lágrimas

-Él esta con vida, no te guarda ningún rencor; su madre jamás le hablo mal de ti, incluso eres un héroe para el- el Lemuriano levantó la mirada sorprendido

-Señorita kido, disculpeme estaba revisando la contabilidad del santuario y tomé un pequeño descanso- el patriarca agachó la cabeza mientras guardaba la carta en un cajón