El reencuentro

1.5K 54 4
                                    

Recinto de las amazonas

Marin llego a la cabaña de su amiga como cada tarde, era la hora de la comida y no tenia ganas de cocinar, habia planeado llevarse a Shaina a comer al rodorio para evitar la fatiga

La amazona del aguila toco sonoramente la puerta, llamó en varias ocasiones pero no obtuvo respuesta, se comenzó a incomodar y tocó con más fuerza

-Quien quiera que sea, alejese de mi puerta o haré que lo exterminen- la voz era de su amiga pero esa respuesta no era común en ella

Una gran inquietud se formó en su rostro e inmediatamente volvió sobre sus pasos para ver que era lo que sucedia, golpeó la puerta tan fuerte que la joven salió de la cabaña con la cara roja como un jitomate

-¿Me puedes decir quien demonios te crees para venir asi a mi casa y tocar de esta manera?- la muchacha miro con detenimiento a la amazona que tenia por delante

-¿Y tu puedes empezar por explicarme quien eres y porque estas ocupando el cuerpo de Shaina?- la peliverde puso una cara de sorpresa y se llevo las manos a la cabeza, empezo a emitir quejidos de dolor y terminó por desmayarse a los pies de una asombrada Marin que no se explicaba nada

Templo de Leo

El propietario del templo se pasaba dando vueltas y vueltas por su habitacion, no sabia como reaccionaria Marin en caso de la amazona descubriera las fotos que el escorpion le tomó, en una borrachera hace dos meses

Su piel se enchinaba y le provocaba escalofrios, estaba pensando cual sería la reacción de la pelirroja en caso de que su compañero dorado le diera aquellas imagenes:

Todo habia comenzado cuando acepto irse a cenar con Milo dos semanas atras, cenaron y posteriormente se metieron a un bar. Un par de chicas se le unieron y las copas hicieron mella en el, cuando despertó estaba en un hotel, con aquellas muchachas en una cama y con una resaca espantosa

-¿Entonces vas a ayudarme o no?- la voz de su verdugo lo devolvio a la realidad

Estaba entre la espada y la pared, por un lado, si marin descubria lo sucedido; seguramente terminaria su relacion con el y optaria por irse del santuario, mientras que por el otro lado, ayudar a Milo tampoco le gustaba para nada, Aioria estaba convencido que cuando tuviera a la cobra en su cama se desaria de ella y eso iba en contra de sus principios

-Oh vamos Leon, no tengo todo el dia- el castaño apreto los puños con rabia, odiaba sentirse acorralado

-¿Que tengo que hacer?- Milo no oculto su alegria y sonrio abiertamente

-Es simple, gatito, solo tendras que mantener a tu pelirroja novia lejos de Shaina- el griego se dejo caer en el sofa con tranquilidad

-Quiero que sepas que si esto es parte de algun truco sucio, te vas a arrepentir de intentarlo conmigo-

Milo bostezo sin tomarle importancia, sabia que tenia al Leon en la palma de su mano, en su mente pensaba que era estupido rendir su orgullo por una mujer pero tambien pensó -¿algun dia perdere mi orgullo asi?-

Olimpo

-¿Porque crees que haria algo asi?- El padre de los dioses miraba divertido al insolente que lo retaba emocionado

-Porque esta enlodando mi honor, soy la burla de los demas dioses y por lo tanto, exijo que sea castigada- Zeus elevó una ceja y analizo al molesto Hefestos que lanzaba llamas por los ojos

-No estas en posicion de exigirme nada, tu tienes la culpa por no satisfacer a mi hija- el cornudo dios se asombro por la declaracion de su suegro

-Entonces supongo que usted es el culpable de que yo tenga una prostituta por esposa, si es verdad aquel dicho " de tal palo, tal astilla"-  el anciano, lejos de molestarse por el comentario sonrio ampliamente y se levanto de su trono

-Lo que un dios de baja categoria piense y diga me es indiferente, pero si te dire una cosa: arregla tus asuntos maritales y evitame la pena de burlarme en publico de ti-

Zeus salió de la habitacion conteniendo las carcajadas que tenia preparadas, pero quien no reia era Hefestos, haria que Afrodita pagara cada una de sus humillaciones

-Tarde o temprano volveras a casa y tu vida a mi lado será tan miserable que desearas volver a la tierra con tu hermana-

Templo de Escorpion

Aquel sonido de tacones inquietó al escorpion, hoy no tenia planes de salir y estaba tomando una relajante ducha para quitarse el estres pero de pronto su mirada se nubló y todo se volvió oscuridad

-Se que eres tu, puedo sentirlo- aquella voz lo hizo volver en si, conocia aquel sonido pero tenia sus dudas

Poco a poco abrió los ojos, se familiarizó con su entorno y recordó donde se encontraba, un par de ojos verdes lo miraban con curiosidad y cuando se enderezó se dio cuenta que seguia en el jacuzzi y la dama que lo observaba se unió a el

-Debes ser tu, estoy completamente segura- en un movimiento que ella no se esperaba, el peliazul tomó su rostro y la besó ardientemente

-Soy yo, Afrodita- cuando les falto el aire, se separaron y ella se abrazo a su pecho

-Ares, me hiciste tanta falta- el se limito a tomarla por la barbilla y besarla nuevamente

-Creo que es hora de demostrarte cuanto te extrañe....-

La otra cara de MiloDonde viven las historias. Descúbrelo ahora