Epílogo

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Querido lector.

Sé bien que te estarás preguntando ¿Qué clase de chiste malo es este? ¿En qué clase de cámara oculta estoy metido? Pero, por favor, no creas nada de eso. Esto es tan real como tú y como yo en su momento. Es difícil para mí poder comprender qué sucederá, hay mil caminos pero yo ya he decidido cómo será mi destino. Voy a morir. Vaya ¿Suena muy cruel? Supongo que sí.

Ah, debo estar mareándote con tantos hilos sueltos, así que iré desde el inicio.

Mi nombre es Joshua Hong, mi nombre coreano es Jisoo. Nací en Estados Unidos, L.A. California. Mi madre murió cuando yo aún era joven, mi padre... no tengo ni puta idea de dónde esté. Durante mi adolescencia comencé a fumar, beber, acostarme con quien quisiera, me uní a un bando con mis amigos, donde poco a poco nos fue llevando a la delincuencia. Para cuando me di cuenta, ya estaba corriendo por las calles huyendo de la policía, jalando gatillos y asesinando a sangre fría personas. Me creí inmortal, sin alma y sin sentimientos. Eso me permitió crear planes meticulosamente pensados para que todo saliera a la perfección. Sé que mi madre me hubiera guiado por un buen camino si hubiera seguido vivo, sé que ella hubiera evitado que yo me convirtiera en esto. Soy un monstruo.

Mamá, lo lamento. Te he fallado como persona, como hijo.

Escapé a Corea del Sur con un fin, y es causar el mayor acto de delicuencia que se me ocurriera. El primero que se me viniera a la cabeza, algo que dejara una huella. Y lo hice. ¿Qué sucedió? Jeonghan apareció. Al inicio no le presté atención, pero las cosas se descarrilaron. Tenía sueños, soñaba con él. Lo reconocí, creí que era pura coincidencia pero no... Cuando lo conocí, solo éramos él y yo. Nadie más, solo nosotros ¿Y qué obtuve? Un desastre.

Él causó que mi mente ideara un plan, lo observé desde las sombras, conocía su dirección, su número de teléfono, conocía la dirección de la casa de su hermano. Conocía todo de él, pero había algo que nunca me dejó de dar vueltas en la cabeza.

¿Por qué soñaba solo con él?

Gran parte de mí lo ignoró por mucho tiempo, pensando que solo era una de esas cosas del inconsciente, pero cuando lo conocí... Cuando lo conocí comprendí que era una señal de alerta. Si no lo detenía antes de empezar, sería demasiado tarde. No puedo explicarte lo que sentí cuando lo tuve a mi lado por primera vez en el 'trabajo', era una conexión. Sí, Jeonghan y yo teníamos una conexión única. ¿Cómo puedo hacer entender esto? Veamos...

¿Recuerdas cuando eras un niño, que conocías a alguien de tu edad y a los cinco minutos ya era tu mejor amigo?

Esto fue así.

Fue exactamente así.

Me di cuenta de que Jeonghan me gustaba, pero cuando quería detenerlo todo, siempre estaba Minhyun detrás. Él estaba desquiciado, él era un psicópata y siempre lo será. Minhyun es el tipo de persona que ves en las películas, que lees en los libros, aquellos que son tan crueles que solo parecen eso: un personaje de ficción. Pero existen, realmente existen. Su vida es como Dr. Jekyll y Mr. Hyde, inició con una doble vida, con dos personalidades, hasta que Hyde se apoderó completamente de su mente. Minhyun es cruel, no tiene sentimientos, no tiene compasión por nadie. Ni por mí, su jefe. Más de una vez intentó asesinarme, ya fuera porque no hacía lo que él quería o por el simple placer de matar.

Yo no podía contra él, por eso estaba Aaron. Aaron también estaba desquiciado, pero él era más un violador. Ellos se complementaban así: Aaron disfrutaba de torturar y abusar a la víctima, y Minhyun lo mataba al final. Los recibí porque son fuertes juntos, pero débiles separados. Ellos ayudaron demasiado en mis planes, pero no era sencillo controlarlos.

Duobus lateribusDonde viven las historias. Descúbrelo ahora