Capítulo dedicado a mi nueva lectora: @SarahiEstrada294
Al día siguiente en la mañana, recibimos una video-llamada de Isabelle. Nos contó de lo increíble que era Hawaii y de lo fascinada que estaba con el hotel. Según Isabelle, el servicio era excelente y el desayuno estaba espectacular. Papá había ordenado que los mozos le llevaran el desayuno a la cama, acompañado de un gran ramo de rosas rojas, las favoritas de Isabelle, y una nota que decía:
Ayer, tú sueño se cumplió y te convertiste en mi esposa y junto a ésto me convertiste a mí en el hombre más feliz del universo. Me ha fascinado amanecer junto a la mujer que amo y saber que amaneceré junto a ti por el resto de mis días me hace sentir aún más afortunado.
-Tu amado esposo
Ya se imaginan las risas de emoción que fueron provocadas en nosotras al escuchar a nuestra tía leyéndonos la nota de papá. Definitivamente, papá era un romántico. No nos habíamos dado cuenta de esta cualidad porque él antes no estaba junto a su amada y ahora que era feliz, esa cualidad oculta se reflejaba incluso ante un ciego. Los ojos de Isabelle irradiaban luz, una luz tal y como la de los rayos del sol, era esa clase de luz que no se puede ocultar ni apagar. Papá se estaba bañando y una vez que terminó tomó el móvil de Isabelle para hablar con nosotras.
-Hola hermosas mías, ¿que tal están?
-Todo esta muy bien papá, pero no tan bien como la pasaste anoche con la tía Isa- bromeó Taylor.
-Tay comportate - intervino papá pero no pudo evitar soltar una sonrisa pícara.
-Te haz reído papá, no haz podido evitarlo-estalló en risas Taylor.
-A ver... lo acepto, hemos tenido una excelente noche, ya que este hotel está espectacular.
-Sabes que con excelente no te refieres a eso papá-indicó Tay. Le dí un codazo para que parara de una vez por todas sus bromas sarcásticas.
-Ya bueno, me callo-dijo Taylor.
-Es mejor-le dije.
-Y bueno, ¿que tal está la seguridad por allá?-preguntó papá.
-Estamos bien y lo seguiremos estando papá-contesté a su pregunta.
Isabelle volvió a tomar el móvil.
-Bueno, a vuestro padre se le ha olvidado que haremos deportes acuáticos extremos en 30 minutos, por lo que tenemos que ir preparándonos y buscando el equipaje.
-Tía, eres el sinónimo de ¨lo extremo y peligroso¨-intervino Taylor.
-Por supuesto, esa es mi definición completa-contesto Isa.
-Y yo soy todo lo contrario, pobre de mí-dijo papá riéndose.
-Bueno, los dejó, que la pasen bien-me despedí
-Adios-gritó Taylor y yo la seguí.
***
Ana, nuestra niñera y ama de casa por unos días, nos había preparado un excelente desayuno y almuerzo. En cuestión, Ana era una experta en la cocina. Cualquiera diría que nació en ésta. A nosotras, su comida nos había caído magníficamente por el exquisito gusto que ésta tenía, su sazón era increíble. Pero en cambio, Ana había decidido comer de su propia comida y llevaba una hora con acidez y un dolor de estómago intenso. ¿La razón? Ana padecía de una severa gastritis por lo que no podía comer alimentos muy condimentados. Y la lasaña, que nos había hecho, lamentablemente era uno de éstos. Estuvimos un buen rato insistiéndole que se fuera a su casa, se bebiera sus analgésicos, descansara y volviera mañana. Ya había vomitado dos veces y entendíamos su estado. Al final, accedió irse pero nos dejó hecha la cena y nos pidió que no le dijéramos a papá porque éste podía despedirla. Sí, lamentablemente, papá era severo con sus empleados y con las reglas que les daba. Y si, se enteraba de que Ana nos había dejado solas con dos guardaespaldas masculinos, seguramente no le pagaría sus horas de trabajo.
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El Secreto de las Gemelas
Teen FictionMi nombre es Hailey Evans Collins y tengo una hermana gemela, somos totalmente diferentes, no solo porque no soy la favorita de la casa, si no porque seré la primera en morir, para ser exactos a los 16 años; gracias a que tengo "gemeltitis"- es una...