Bella Swan la nueva Isabella Salvatore

CAPITULO 18 Mi compañera (James S.)

—Ya pueden entrar—les anuncie en cuanto la pequeña Arabella se quedo dormida entre mis brazos.

James Salvatore

Nadie parecía escucharme, era acaso que yo era el único cuerdo de la familia, como se le pudo haber ocurrido a Pru semejante tontería, bien en el pasado siempre terminaba por sorprenderme pero esto cruzaba la línea era inconsciente poner a 3 bebes humanas en una casa llena de vampiros.

--Ya pueden entrar—dijo Isabella, ella me sorprendía, siemopre analizaba una situación y luego hacia lo que creeía correcto pero esto.

—Vamos Jamsie—me dijo Pru como odiaba que me llamaran así

Le gruñí y entre a la habitación cuando...

Mi mirada fue a dar a una pequeña niña rubia-pelirroja quien dormía enfrente de la puerta, con tan solo verla una parte de mi que creí muerta despertó y la parte psicópata en mi se volvió loca de furia al verla en ese estado con rasguños y vendas en su cuerpecito, Prudence había estado en lo correcto hallaría a mi compañera si me unía al clan Salvatore, pero jamás pensé que fuera de esta forma, en mi mente a la que encontraba era una mujer no tan vieja pero tampoco una niña. Por un momento no pude pensar en nada solo en que esta pequeña niña era todo para mí, y sí aún tenía un alma y un corazón estaba seguro que le pertenecían a ella.

La observe por un rato acercándome a la ventana y viéndola disimuladamente, sus cabellos eran pelirrojos con destellos dorados, su boca y nariz eran pequeñas, sus ojos eran ni tan grandes ni tan chicos, su carita tenía las facciones de una niña por ahora claro, la tortura de esperar hasta que ella estuviera lista y me aceptará sabía que la sentiría eterna y en mi interior un miedo surgió, el saber que tal vez ella no me viera como su compañero, y eligiera a otro, que me ahorcarán pero soy egoísta y la quería para mí aunque si no me llegará a escoger lo aceptaría y me encargaría de que la hicieran feliz, claro que no me rendiría y cuando tuviera edad yo lucharía por ella.

—Ella te elegirá—me dijo Pru en un susurró a mi lado, claro que los demás lo escucharon y se voltearon a vernos.

— ¿Quién te elegirá?—me pregunto Isabella

— Su compañera—respondió Prudence como si fuera una contestación banal y no la razón de mi existencia.

— ¿Qué?—pregunto esta vez Damon

— La pequeña Elizabeth más bien conocida por Beth en el futuro será su compañera—contesto Pru—es a ella a quien James tanto a esperado

— ¿Tu ya sabías que sería ella?—pregunto Damon

— No estaba segura de quien sería, solo sabía que llegaría pero no cuando, por eso le dije a James que nos acompañara, no sabía que la hallaría solo sabía que él tenía que acompañarnos—sonrió Pru

— Estoy segura que la harás feliz James pero aún es muy chica—me dijo Isabella

— Créeme eso lo se, voy a esperarla y luego cuando tenga edad cortejarla si me permites Isabella—a quien engañaba aunque me dijera que no yo lo haría, la cortejaría y si ella me aceptaba la haría feliz

— Creo que la familia cada vez crece más no creen—me dijo con una sonrisa—se que no harías nada para dañarla, e visto cuanto ansiabas que llegara y no seré yo a quien le debas rendir cuentas, se que no le harás daño hijito—me dijo abrazándome y echándole una mirada a Damon.—es hora de irnos a casa

Damon se encargo del papeleo y el traslado, las dieron de alta en ese mismo momento gracias a su habilidad, Pru había ido a hacer unas compras para las niñas mientras que esperábamos, Isabella en cambio había recostado a la pequeña castañita en su cama y ahora miraba a la pequeña rubita de la cuna con una mirada sumamente melancoliíta pero con un fuego que ardía en su interior.