13.- Adiós (Final)

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Siempre tuve la creencia de que, tal vez, encontrara el amor de mi vida en la salida de un supermercado, un antro, o quizá en un baño publico... pero el asunto es, que nunca paso por mi mente que mi mejor amigo fuera el elegido.

Eso suele ser el peor error que uno pueda dejar pasar, aunque lo cierto es que no sabes con certeza las cosas que suceden hasta que pasan...

Los árboles pasaban rápidamente tras la ventana y de vez en cuando habían gotas que se estampaban en el vidrio.

K: ¿A dónde vamos? - pregunto sin despegar la vista de la ventana. Alcanzo a escuchar un suspiro y lo siguiente, siento su mano apretar mi muslo.

A: A terminar lo que empezamos.- por primera vez, lo miro, sus hombros están relajados y su perfil se encuentra neutro. Sin emociones, sin nada.

Estaciona el auto, justo después de la vereda. Ahora el cielo está de un tono azulado pero oscuro, a lo que hace que el ambiente se torne un poco tenebroso.

Observo todo el lugar, capturando detalles. Extrañamente ahora todo me es familiar.

K: ¿Qué es esto? - pregunto, con la curiosidad picandome las entrañas.

No me contesta, sólo me ignora y observa el lugar como si de pronto éste se vuelve más interesante.

Sale del auto y yo con él, me da la mano y juntos nos adentramos al bosque.
Las ramas crujen bajo nuestras pisadas y la humedad es palpable. Casi puedo decir que el agua se ha pegado en mi rostro.

K: ¿A dónde vamos? - me atrevo a decir.

Me mira y enmarca su ceja a lo que yo revoleo los ojos.

A: Espera - se detiene- cierra los ojos.

K: ¿Para qué? - me cruzo de brazos. Él suspira cansado y de un momento a otro lo tengo detrás de mío y pone sus cálidas manos en mis ojos. Pongo las mías encima para quitarlas pero ejerce más presión.

A: Quieta, Karen.

Lo obedezco a pesar de su tono demandante. Siento su otra mano en mi cintura y con delicadeza avanzamos con cuidado sobre el pasto.

Dos jóvenes en medio del bosque, de noche y solos... Es el escenario perfecto para que un asesino en serie realice su masacre.

¿Podrías callarte? Me pones nerviosa.

Duh, ese era el punto, estúpida.

A: Espera - siento un escalofrío recorrerme por completo al sentir su aliento chocas con mi cuello, y podría jurar, que sus labios rozan con el lóbulo de mi oreja.

Sus manos dejan de taparme para caer a los costados de mis caderas. Veo borroso al principio pero parpadeo para mejorar mi visión. Y quedo helada. Es... la cabaña, en donde por primera vez... Estamos aquí. Con delicadeza, su mentón se apoya en mi hombro izquierdo.

A: Lo recuerdas - asiento. Está casi igual que antes, solo cambia el hecho de que ahora su el tono de la madera es más claro y hay luces prendidas adentro.

K: Lo recuerdo bien. Nada ha cambiado.- siendo inconsciente empieza a trazar lineas en mi vientre.

A: Lo único malo es que ahora nuestra cabaña tienes dueños. - susurra.

¿Nuestra?

Con cuidado, me gira para verme directamente a los ojos.

A: Quiero comenzar de nuevo. - me dice.- quiero que los dos comencemos de nuevo.

Niego de inmediato.

A: Karen, lo necesitamos y ambos lo queremos.

Deslizo sus manos hasta quitarlas y alejarlas fuera de mi cuerpo. El nudo en mi garganta me impide hablar con claridad.

K: Y quién no me asegura que algún día nos amaremos para después odiarnos y alejarnos para no vernos más. - al no contestarme levanto las cejas.

A: Creo que deberías dejarme intentar.

K: No funcionaría. Yo los sé.- sus manos me toman de los hombros y me sacuden lentamente.

A: ¿Cómo? ¿Cómo lo sabes? - su manos me sueltan de golpe y da un paso atrás dolido.

K: ¡Solo lo sé! ¡Ya ha pasado antes y pude volver a pasar!

A: ¡¿Pero es que por qué siempre tratas de alejarte de mí?! - me grita con desespero.

K: No lo hago...

A: ¡Claro que sí! ¡Eres terca y me estoy hartando de eso!

Me quedo en silencio porque no tengo nada más que decir.

A: Podemos hacerlo, encontraremos la manera. Pero necesito que tú también estés dispuesta a hacerlo.

K: No. Puedo. Simplemente no puedo hacer que de un día para otro se me borre de la mente todo, nuestro bebé, Daniela, tu accidente... No puedo...

A: ¿Y por qué no lo intentamos? - susurra cerca de mi rostro.- ¿Por qué no dejas de lado todo y empezamos de nuevo?

Miro su pecho porque no soy capaz de verlo a ojos.

A: Vámonos. Hay que escaparnos.

Abro los ojos al tope. ¿Escaparnos?
¿Acaso se volvió loco? No podemos hacerlo y dejar todo como si nada.

A: Vamos, podremos seguir y volver cuando nos plasca.

K: No podemos hacerlo...

Me mira con una sonrisa ladeada.

A: Al diablo con la falsa modestia.

Sonrío. Y él también lo hace.

K: Está bien, vamos

Me toma de la mano y juntos nos vamos corriendo a su coche. Me abrocho el cinturón y espero ansiosa a que encienda el motor.

A: ¿Y a dónde quieres ir?

Hago una mueca y estiro los brazos.

K: Sorpréndeme.







***
Holi c: les doy permiso de que me linchen, lo merezco.

En resumen, gracias por leer :')

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⏰ Última actualización: Jul 06, 2019 ⏰

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Estúpido Amor (Los Polinesios) [#1]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora