-Harán grupos de a seis-Avisó la profesora.
-¿No se puede de a siete?-Pregunta Jennifer mientras se mira las uñas.
-Dije de a seis-Dice la profesora.
Jennifer hace un rostro de desagrado.
-Bueno cómo decía-Hace una pausa la profesora-Iremos a un campamento, necesito que sus padres les autoricen la partida.Todos observamos un extenso papel blanco donde pide nuestros datos personales y el de nuestros tutores.
-Pueden retirarse-Dice sentándose en su asiento.
Todos nos levantamos y salimos corriendo lo más rápido posible.
Llegué a mi taquilla y la abrí. Mientras sacaba mis libros, detrás de mí aparece Victoria con Briana.
-¿Hacemos nosotras tres?-Pregunta Briana tímidamente.
-Me parece buena idea-Acepto la propuesta.
-¡Ustedes tres no se me escapan!-Grita Elisa en medio del pasillo.
Elisa estaba acompañada de las dos peores personas que puede existir en el mundo, Jack y Dylan.
Todos aquellos que estaban caminando en el pasillo la miran, incluyendome.
-¿Dijo de a seis?-Se pregunta Elisa a sí misma-Entonces seremos Jack, Dylan,Briana,Mia, Victoria y yo.
Todas abrimos los ojos como dos platos y nadie se anima a decir una sola palabra. Nadie quiere aceptar esa propuesta.
-Si no esta Dylan ni Jack yo acepto-Dijo Victoria burlona.
-¿Tienes miedo de no resistirte?-Dice Jack coqueto.
-No me resisto a nada-Dice Victoria con una leve sonrisa.
-Ya verás-Dice Jack con una gran sonrisa.
-Cómo nadie se negó-Empeiza a decir Elisa-Este será nuestro grupo.
-¡No, no!-Décimos Briana y yo al unísono.
-Demasiado tarde-Dice y se da la vuelta.
Observe a Jack quién traía su mirada perversa puesta en Victoria, pero esta solo saco su dedo medio. En cambio, Dylan se quedó pensativo por unos segundos, luego me dirigió la mirada por unos pequeños segundo y se dirigió a su casillero.
¿Por qué me miró?
Esos ojos chocaron con los míos por unos segundos, lo que deja varias preguntas en mi pequeña cabeza.
En el día del viaje.
Hoy es el gran día, todos estamos entusiasmado por el gran viaje de tres días.
Al principio el viaje fue un poco aburrido, estar sentado por cinco horas no es bueno para mi trasero, creo que quedo más plano de lo que ya estaba.
Después de unas cincos interminables horas, por fin habíamos llegado.
El lugar era de un retiro, había cabañas de maderas, árboles y un verdoso césped, en el medio de aquel lugar había un montón de maderas que era para hacer una fogota, entre tanta cabañas por fin habíamos llegado al baño de chicas, donde todas salimos corriendo para entrar, no para hacer nuestras necesidades sino para maquillarnos.
¿Un poco de maquillaje no hace mal?
Después de un buen rato, en donde nos bañamos, nos cambiamos y nos maquillamos, durante tanto tiempo que el sol comenzó a ocultarse en el horizonte dando sus últimos calidos rayos.
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Conviviendo con mi pesadilla
Novela JuvenilBORRADOR. 2015-2016. Abby es una chica tranquila con tendencia a ser ermitaña. Vive con su familia en Nueva York y, lamentablemente, es la vecina de los Stewart, una familia con dos hijos que para ella son los demonios en persona: Dylan y Elisa. El...