Conviviendo con mi pesadilla

Decisiones

-¡¿Papá en que estas pensando?!-Grita desde abajo Elisa.

Solo se escuchan los gritos de Dylan y Elisa, ellos se niegan a irse y mudarse al otro lado del país. Yo solo estoy arrojada en la cama. No puedo creer que dentro de tres semanas ellos se van a ir.  Elisa, que es muy diferente a mi, ella es ahora mi mejor amiga y no quiero que se vaya. Dylan, un chico arrogante y egocéntrico, quien ahora se ha robado mi corazón y apenas me he dado cuenta.

¿Es por que no me dolió la ruptura con Michel?

¡Soy una horrible persona!

Todos se van, me dejan aquí tirada en el suelo. Primero Clara, quién me traicionó, después Michel, mi ex novio, luego Jennifer, quién me había caído bien pero me traicionó y ahora ellos.

¡Me estoy quedando sola!

Victoria pronto se irá a la Universidad como todos y me dejará.

Estoy sola, vacía, confundida...

Los gritos sesaron, pero un ruido de la puerta me saca de mis pensamientos.

Veo como Elisa entra llorando, ella se acerca y me abraza.

¿Me está abrazando?

Está llorando en mi hombro. Siento sus lágrimas mojando mi ropa.

-Yo no me quiero ir, Mia-Me susurra.

Yo sonrío y trato de animarla. Tengo que ser fuerte y dejar que todos se vayan, dejandome sola.

-Encontrarás nuevos amigos y te alejaras de las mierdas del Instituto-Le digo.

Ella me abraza aún más fuerte.

-Yo no quiero...-Sus lágrimas son como la lluvia.

Observo la puerta, allí está Dylan mirándonos, su mirada es de tristeza, él está recostado sobre el umbral. 

¿Y que va ser su mirada? ¿De felicidad?

Callate, yo narro la historia.

-Quédate acá-Digo con un hilo de voz.

Ella para de llorar, se separa y me observa. Está callada, sus labios no emiten ningún sonido. Observo a Dylan, él tiene los ojos como platos, están sorprendidos.

-Eso es imposible-Dice mirando a su hermano.

Yo vuelvo a pensar.

-Quédense, consigan un trabajo y cuando puedan mantenerse, pueden mudarse-Digo mirandolos-Mamá aceptará el trato.

Ellos vuelven a mirarse. Elisa me dedica una sonrisa y me vuelve a abrazar,pero esta vez es un abrazo de agradecimiento.

-¡Eres una genia!-Dice mientras sonríe.

No llores Elisa, eres hermosa y tienes una increíble sonrisa, las lágrimas no son tus amigos. Debes sonreír. Lo mismo es para Dylan. Lo observo, él está con una leve sonrisa.

¿Acaso a ambos le ha gustado la idea?

Los padres de Dylan y Elisa se acercan a la puerta. Ambos tienen una mirada seria y fría. Sus hijos los observan, se estan por enfrentar.

¡¿Que acabo de decirles a ambos?!

-Papá...-Comienza Dylan-Queremos hablar sin discutir, por favor.

Los padres se miran y asienten. Se sientan en el sillón blanco y dan permiso a sus hijos para hablar.

-Tenemos una mejor idea-Dice Elisa con una sonrisa-Queremos quedarnos aquí.