Kaleido Star: El resplandor de una estrella

Capítulo 7: Dolor

Quiero dejar en claro que el tema tocado en este capítulo es muy complejo por muchas cosas acontecidas en el mundo respecto a sucesos similares, les pido de favor tomarlo con criterio y que sepan que lo hago con mucho respeto esperando no incomodar a nadie y me entiendan.

― ¿Qué significa todo esto? ―pregunto Ekaterina―. ¿Por qué razón estoy yo en esa foto antigua vestida con ropa de niño?

En la fotografía se mostraba a un niño bastante parecido a Katya, pero éste vestía ropa de varón, con un trajecito veraniego en color azul marino con un estampado de oso, gorrita de niño en color rojo. El niño parecía tener aproximadamente tres años de edad, cuasi cuatro. Sora suspiro profundamente al escuchar a su hija y simplemente dijo.

―Lee los últimos papeles y descubrirás de que se trata. Al hacerlo te relatare el por qué te mantuve alejada de mi mundo y también del porqué de mi cambio.

Ekaterina Maksimova continuo su lectura, a simple vista no era algo importante, pues eran cartas de su madre; las cuales Katya omitió por respeto a la privacidad de Sora. Sin embargo, dos últimos documentos la dejaron impactada, pues se trataba de su propia acta de nacimiento o certificado de nacimiento y el de otra persona más, cuyo nombre era Junichi Maksimovich Naegino. En ese momento ella comenzó a tratar de comprender, pero Sora la interrumpió para comenzar a hablar.

―Ese es nuestro gran secreto; un secreto que nosotros sabíamos, que mis propios amigos, tu nana y Oleg, conocían al ser mi gente de confianza. No fuiste hija única, tuviste un hermano gemelo al cual llamamos Junichi. Posiblemente para muchos pueda parecer un acto sin sentido esto que te voy a decir, pero lo tiene aunque no lo parezca. Sé que te preguntaras, ¿cómo es que no hay ni una foto suya?, eso es fácil, quite todo lo referente a él, sé que es una cobardía de mi parte, una locura y tontería, pero no supe cómo afrontar un golpe tan desgarrador como ese y por ello actué de la forma más obvia y torpe posible quitando todo como si nunca hubiera existido al igual que ordene hacerlo con muchos de mis videos. Pero todo eso lo tengo guardado, abandonado si tú quieres, en lo más recóndito de esta residencia, en donde sólo tu padre y yo podemos acceder. En efecto hija, tu hermano mayor murió, digo mayor porque nació primero que tú y era tu mellizo, como ya lo he dicho.

Ekaterina no daba crédito a lo que escuchaba, es cierto que un niño de esa edad difícilmente recordaría algo en sus etapas primarias, más aún cuando se ordena borrar todo indicio de que algo hubiese existido siquiera. Sin embargo, su impacto más allá de saber que tenía un hermano muerto; era el saber por qué murió y más aún, descubrir la razón profunda respecto al cambio de su madre.

―Ahora te contare lo que sucedió, y con esto descubrirás el terror que durante años tuve y por el cual trataba de alejarte en lo posible de mi mundo, de todo esto en lo que yo crecí.

Sora volvió a suspirar, Maksim tomo asiento en una silla cubierta en oro que Sora tenía en su habitación, la cual era verdaderamente amplia y lujosa, con cortinas traídas de los antiguos palacios zaristas, lo mismo que muchos de los muebles de aquella residencia los cuales ella había comprado a un alto precio. Katya igualmente tomo asiento a lado de su madre, quien estaba sentada en su enorme cama y por fin Sora comenzó a relatarle su historia.

―Varios años atrás, como bien has escuchado ya, yo era ya una acróbata retirada, y tras nueve meses de un estable y hermoso embarazo, tú y tu hermano nacieron, pero no me remontare a esa bella etapa, ya habrá más días para relatarte eso, ire al punto complicado, cuando ustedes tenían tres años y...