Kaleido Star: El resplandor de una estrella

Capítulo 48: La llegada a Corea

Berlín, Alemania

—¡Directora Guillem, directora Guillem! ¡Ha visto lo que el escenario Kaleido le ha ofrecido al mundo este día! — Exclamó eufórica una de las alumnas de Mia.

—Por supuesto que lo estaba observando. Anastasia Korsakova y Alexia Passel están en un nivel descomunal. Sinceramente creo que en la copa coreana debemos pelear fuerte para ganar el tercer lugar a Estados Unidos porque el primero y segundo lugar se lo repartirán Rusia Elite y Rusia A.

—¡Pero maestra, yo no me refería a ellas, sino a las otras dos acróbatas que entraron después a escena!, me refiero a la 'Zarina' y a la señora Passel, quien nunca pensé que tuviera semejante calidad.

—¡Ah! Te refieres a Sora y Rosetta. Por supuesto que lo vi, pero créeme que personalmente no me sorprende porque sé mejor que nadie las dimensiones universales que ese par puede alcanzar aún hoy día. No seas tontita querida Kerstin, ustedes son muy jóvenes y no vivieron esa magia pura y genuina en vivo en primera fila. Si te cautivó verlo por televisión ya sabrás lo que es bueno cuando te toque vivirlo desde primera fila. Eso no tiene parangón y solo Sora o en su caso Rosetta, pueden generar algo así, pero por el momento tú y tus compañeras deben prepararse para enfrentar a Estados Unidos y ganar ese tercer lugar.

—¿Definitivamente no nos das ni una posibilidad de poder ganar más allá del tercer lugar?

Tras la diminuta Kerstin, chica no mayor al metro con treinta y cinco centímetros, delgada, cabello rizado y rubio, ojos azules y notable belleza quien tenía dieciséis años de edad, apareció Bernadette Zimmerman con una toalla en los hombros y su ropa de entrenamiento.

—Estás de broma, ¿verdad? —Cuestionó Mia—. Crees que podrías tú o el equipo en general, ganarle a lo que acabamos de ver.

—Yo no he visto nada, estaba entrenando, sólo escuchaba un gran alboroto en la sala de descanso de nuestro gimnasio, pero no alcance a ver la razón. Debió ser algo de verdad notable porque todo mundo aplaudía y gritaba sin parar.

—De verdad que te has enfocado por completo a tu disciplina y entrenamientos, pero hay cosas que no deben pasarse por alto. Hoy en día tenemos la ventaja de la Internet, así que te voy a mostrar el vídeo que ocasionó todo ese alboroto que escuchaste y fue un alboroto en todo el mundo.

Mia puso en su computadora a reproducir todo lo hecho por Lyosha y Nastia; el rostro de Bernie fue cambiando de semblante al ver semejantes movimientos, pero sobre todo la pelea que tenían y dijo:

—Esas dos chicas son invencibles. No puede ser lo que estoy viendo y lo que son capaces de hacer. Eso no es un acto, es una pelea real mezclada con acrobacias y arte puro. Literalmente se nota que ya se traían ganas de casi matarse a golpes.

Mia sonreía complacida al darse cuenta que su alumna más avanzada ya podía distinguir muchas cosas y darse cuenta de otras tantas. Mia no dijo nada y dejó que Bernie siguiera viendo el vídeo mientras le insinuaba con señas a Kerstin que no dijera nada. En ese momento fue cuando Sora y Rosetta entraron a escena y dieron su catedra mundial, principalmente Sora con su incomparable actuación y técnica.

—¡Mierda, mierda, mierda! ¡¿De dónde coños salieron esas dos extraterrestres?¡ ¡Lo que ha hecho la 'Zarina' no tiene nombre, no, no, no. Eso no se puede contabilizar ni evaluar ni nada. Maestra Guillem, vea. Gracias a los drones puedo ver de cerca cada ejecución de la señora Sora y aunque lo tengo de frente, cerca, incluso poniéndolo en cámara lenta, no logro descifrar que tipo de movimientos está haciendo. ¿Cómo carajos es que puede volar de ese modo? No hay cables de tensión que la sujeten, no hay efectos, es ella misma con su cuerpo la que está volando por los cielos venciendo a la gravedad. Es casi como circundar el universo. ¡Por Dios! Esto es anti natural, hermoso, perfecto e inigualable. Así que ella es tu gran amiga, aquella a la que vi hace no mucho frente a frente, quien estrechó mi mano y con su sola presencia hizo que mi mundo diera un giro brutal. Por algo tiene bien merecido el trono de la 'Zarina'.