Recuerdos: de mi primer amor

Capitulo 15

Ya había pasado una semana de aquella vez que estuve con mi chiquita, mi semana con ella se describía en felicidad, amor, besos, abrazos y mucho cariño y regaloneo, de verdad que esa chica sacaba lo mejor de mi. Cada día estaba más seguro que el amor a primera vista existía porque cada vez que veía a Tamara sentía que era más hermosa que el día anterior, mierda esa chica me encantaba. Tenía la mirada mas profunda y verdadera que jamás había visto, la felicidad me la traspasaba con tal solo una sonrisa, es una gran chica y no la dejare ir, me decía eso a menudo.

Ya era viernes, último día de mi gran semana, era temprano tenía que levantarme para ir al colegio, me ducho, lavo los dientes y pongo el uniforme, al ir bajando me encuentro conflictos, gritos y más peleas, verdaderamente mi casa cuando estaba mi padre era un asco, me cagaba el puto día en cuestión de segundos.

- ¡Eyyy!, tú, ¿donde crees que vas?.- ese hombre me tenía chato.

- Voy al colegio, ¿donde más voy ir?.- antes de que me dijera cualquier cosa salgo corriendo y busco mi moto para irme al colegio. Mierda y más mierda no tenía bencina. Iba a tener que perdirle a mi papá que me fue.... No ni muerto haría eso, odiaba tener que pedirle un favor, me iría en micro, al ir saliendo de mi casa miro hacía el lado y mi chica se iba yendo al colegio, bueno su padre la iba a dejar.
Me quedo mirando y me hizo señas con su manito, era una chica tan adorable.

- Joaquín, vamos, yo te llevo al colegio.- dice el papá de Tamara, sonriéndome amablemente. Ella solo me mira haciéndome gestos para que suba y me siente al lado de ella.

- Buenísimo, gracias. Me subo y me siento con Tamara, la saludo con un beso en la mejilla, y ella solo sonríe.

- ¿Tú te vas en moto al colegio?.- pregunta el papá de Tami mirándome por el retrovisor.

- Si, pero mi moto... Ehh hoy... No tenia bencina jajaja.- Estaba algo algo nervioso, me sentía muy intimidado.

- Tienes que tener cuidado.- Agrega Tamara tomándome lentamente la mano sin que su padre se de cuenta. Rió.

- Lo tengo.- moría por besar sus labios, ya no podía aguantar estar tan cerca y sin poder besarla. Aprieto su mano y la quedo mirando.

Tamara saca un cuaderno y comienza a escribir: "me estoy muriendo sin besarte... Bájate conmigo en mi colegio y escapémonos juntos". Sonrió y le hago un gesto dandole un si.

Al llegar al Saint Peter's School, me bajo con Tamara y cuando su padre se alejaba me besa apasionadamente, nuestras lenguas se juntaban y se complementaban perfectamente, separó por un momento sus labios de los míos porque realmente necesitaba airé, sonrió entremedio de aquel beso.

- ¿Sabias que te quiero muchísimo?.- miro sus ojos y tomo con ambas manos su cintura.

- Lo se, yo también te quiero, pero mi memoria falla y para que no lo olvide tendrás que repetírmelo muchas veces.- comienza a reír y vuelve a besarme, esta vez más calmada que la anterior.

- Te quiero, te quiero, te quiero, ¡TE QUIERO!.- el último lo grito fuertísimo muchas personas me quedan mirando y Tamara se ríe y me hace callar. esta chica me encanta.- mi amor, ¿donde quieres que nos escapemos juntos?.

- Donde tú me lleves yo soy feliz.

Tomo su mano y nos dirigimos a un lugar que queda en el cerro de Valparaíso, tenía una vista hermosa de la ciudad y lo mejor es que muy pocas personas se encontraban a esa hora, compramos cosas para comer, tomar y nuestra tarde paso volando en ese lugar.

Ya eran las 1 de la tarde y comienza a sonar mi celular. Era mi hermano mayor Vicente.

- Joaquín, necesito que vayas a la oficina del tata y le pidas una caja verde y la vengas a dejar a mi casa. Por favor hermanito es urgente.

- ¿Tiene que ser ahora?, es que estoy ocupa....

- ¡Ahora ya!, apurate.

Y me corta, le digo a Tamara que me acompañe y ella acepta inmediatamente, siempre hay alguien que tiene que joder tu tarde, estaba muy a gusto con mi chiquita y me llaman que vaya a dejar una caja, una simple caja.

Al llegar a la oficina de mi abuelo lo saludo con un beso y un abrazo.

- Tata, ¿Que tal?, vengo a buscar lo del vicho.- señalándole la caja. Me pasa la caja y queda mirando tiernamente a mi Tami.

- ¿Y ella quien es?, preséntamela.- Tamara se sonroja y me mira y yo comienzo a reír.

- Ella es Tamara, es mi novia.- le tomo la mano y la hago saludarse con mi abuelo.

- Tienes buen gusto, cuídala se ve buena chica.

- Lo es.

Tomo la caja y me despido y voy a la casa de mi hermano a dejarle su encargo.
Al llegar no había nadie, pero yo tenía llaves y entramos. Dejo la caja en el sofá y Tamara se sienta al lado mío y me dice:

- ¿Desde cuando somos novios?.- comienza a reír.

- No le podía decir que eras mi andante.- la siento en mis piernas y comienzo a besarla lentamente.

- ¿Porque tu hermano no vive contigo?.- mierda, odiaba hablar de eso, el solo recordarlo me hacía mierda. Quitó a Tamara de encima mío. - ¿Que pasa?. Agrega ella.

- ¡Nada!, solo que no me gusta hablar de eso con nadie.

- ¿Acaso no confías en mi?.

-Es una historia larga. Tomo su mano y me costaba retener mi ojos en los suyos, ese tema me dolía.

- Amor tengo tiempo.- agrega tiernamente y se sienta para escucharme.

- Esta bien, cuando yo tenía mas o menos 12 o 13 años de edad, mi hermano mayor Vicente tenía 17-18 años, el era... o bueno es mi ejemplo a seguir, un chico rebelde hacía lo que quería, miles de chicas morían por él, decía lo que pensaba realmente era un puto genio, pero un día llego ebrio y drogado a la casa, mi padre lo encontró, tuvieron una pelea gigante, golpeo a mi hermano hasta dejarlo en un estado pésimo casi inconsciente, mi madre por defenderlo también recibió golpes, yo era solo un niño pero no pude evitar ver a mi madre y a mi hermano así, intente defender pero también por meterme me golpea a mi...- las lagrimas comienzan a caer sobre mi rostro y Tamara me apretaba la mano e intentaba contenerme. - Mi hermano se va de la casa, pocas veces lo veía... mi madre logró perdonar a mi papá pero yo jamás le perdonaría el alejamiento que tuve con mi hermano por su culpa, ¡NUNCA SE LO PERDONARÉ!.- comienzo a llorar en los brazos de Tamara, a ella también se le escapan lágrimas.

- ¿Por eso eres así? Verdad.- no le respondo, solo la miro y la abrazo con más fuerzas creo que con eso le dije todo. - ¿Te volvió a golpear?.- me dice limpiando mis lagrimas.

- Si, muchas veces yo sufrí sus maltratos, gritos y que me tratará mal, hasta el puto día de hoy aguanto todo eso.- mis lagrimas comienzan a desaparecer y me entra un rabia inmensa solo quería salir de ese maldito lugar o golpear cosas, pero Tamara logró calmarme, no se como pero lo hizo.
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GRACIAS A TODOS LOS QUE ME HAN APOYADO EN ESTO, lamento a ver demorado tanto en subir este capítulo, espero que les haya gustado y lo hayan disfrutado del mismo modo que yo disfrute escribiéndolo, cualquier cosa que les haya gustado o no coméntenlo e intentaré arreglarlo, también voten para que me ayuden a ir subiendo. Ya casi son 1000 y de verdad estoy sumamente feliz, me hacen feliz, gracias infinitas gracias. LOS AMO <3