Nota del autor

80 8 10
                                    


Vayamos por partes...

Todo esto comenzó, más o menos, en Mayo de 2015. En aquellos momentos acababa de devorar las ocho temporadas de "Doctor Who" y mi cabeza bullía de ideas. Para ser exactos, mi cabeza siempre ha bullido de ideas, pero raramente he sido capaz de desarrollarlas; quizás por avatares del destino, quizás por la gran impresión que este producto había causado en mí, esta vez sí que fui capaz de hacerlo. Se me metió entre ceja y ceja escribir algo sobre "Doctor Who", pero no una historia cualquiera. Quería escribir una gran historia... ¿Y qué hay más grande que un evento multidoctor? "El Doctor Perdido" comenzaba su andadura.

Te confesaré unas cuantas cosas... Al contrario que en relatos posteriores, donde no he escrito una sola palabra hasta que no tengo una escaleta bien definida, aquí sólo tenía unas ideas básicas que se fueron desarrollando poco a poco. En un primerísimo esbozo, el Doctor a utilizar era el de Peter Capaldi acompañado de Clara Oswald (la auténtica), recuerdo que quería homenajear los momentos musicales que el Master de John Simm ofrecía en la serie con una persecución con música de Iron Maiden de fondo, el final era algo totalmente difuso, ...

Poco a poco, la cosa comenzó a evolucionar. Finalmente, la pareja protagonista pasó a ser la formada por el Doctor de David Tennant y Clara Oswald en su versión de la Chica Imposible, conseguí ubicar la historia de manera que resultara canónica, y definí un final (final que sufrió distintas reescrituras para acabar quedándome con la versión que había ideado en un principio). ¿Paso siguiente? El otro Doctor...

Lo admito: soy un egocéntrico de mucho cuidado.

Una de las pocas cosas que desde el primer momento tenía clara es que YO iba a salir en ese relato, y no en un papel cualquiera... Yo iba a ser ese otro Doctor, y así fue. Le di mi aspecto físico (aunque su cabello es más largo que el mío), mi vestuario (aunque yo tengo que conformarme con una americana de terciopelo en vez de la elegante levita que él viste), y creo que también parte de mi carácter (aunque a decir verdad, él era bastante más desagradable en los primeros esbozos). Por salir, salgo hasta en la portada (de los tres pares de ojos que aparecen tras el Doctor, los míos son los de arriba del todo).

Y pasó lo que no me esperaba. Funcionó...

No hablo del relato en sí (que también), sino del personaje. No caeré en el recurso fácil de decir que generó una legión de fans, pero gustó mucho, y yo también le acabé cogiendo mi cariño. Fue acabar "El Doctor Perdido" y tener claro que quería hacer más relatos sobre este personaje (ya por entonces, consideraba que le debía, como mínimo, una precuela que explicara lo que lo había llevado a ese punto), pero me lié la manta a la cabeza con "Puntos Fijos" y todos los planes que pudiera tener para él quedaron aplazados.

¿Qué sucedió mientras tanto? Pues que vi la novena temporada de "Doctor Who", en la que sucede algo que me sacaba "El Doctor Perdido" fuera del canon de la serie. En parte, esto que inicialmente era tan nefasto para mí, me sirvió de estilete para azuzarme a aparcar otros futuribles proyectos y centrar todo mi esfuerzo en este relato. Esto, más las ganas que tenía de volver a una escritura más pulp después de la (teórica) seriedad de "Puntos Fijos" fueron motivo más que suficiente... Aunque me temo que he vuelto a pecar de trascendente.

¿Es este relato, entonces, una mera excusa para volver mi primera historia al canon? En absoluto. En el fondo, la vuelta al canon en sí la hago al más puro estilo Mofatt... ¿Por qué perder el tiempo en grandes explicaciones cuando con dos o tres frases obtienes lo mismo? (véase, si no, la explicación a por qué el Doctor de Peter Capaldi tiene el rostro que tiene). Por otro lado, en su momento doté (inconscientemente) al personaje de una gran carga de ambigüedad sobre su pasado, algo que me fue de maravilla para ubicarlo en esta historia sin dar casi ninguna explicación. Seguimos sin saber qué Doctor es, seguimos sin saber nada de su pasado, pero ahora ya sabemos el por qué sucede esto...

¿Voy a volver a escribir sobre él? Quizás, aunque no sé qué historia, ni en qué momento de su línea temporal. Por un lado, sería divertido explicar su encontronazo con los Daleks en la luna Limot que le llevará a perder la memoria, porque me permitiría escribir un doctor radicalmente distinto... Por otra parte, quizás algún día decida escribir su historia final.

Como diría el Doctor de Tom Baker, quién sabe...

Pero al menos, creo que ya le he dado alguna capa más a este personaje al que le tengo mucho cariño, y me lo he pasado francamente bien escribiendo este relato (aunque escenas como el momento multidoctor me han llevado por el camino de la amargura).

En el fondo, no sólo soy un egocéntrico, sino también un gran pretencioso; así pues, ¿cuál será mi próximo "más difícil todavía"?

Permanezcan atentos a sus pantallas...


Josep Miquel Masip

Julio de 2016

La Estratagema Del Silifante (Doctor Who)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora