Broken Hearts {matthew espinosa} ; en Edición

21

—¿¡Qué!?— grita con exasperación, Matt. —¿Es cierto? No... Dylan, dime por favor que no fue real... Que él no te toco, Dy por favor— limpié las lágrimas que aún caían por mi mejilla.

Durante unos segundos me quede pensando en lo que dije. Es cierto, me tocaron, me golpearon... Pero no debí haberle dicho a Matt, aunque lo quiera, ame. Él no es de confianza, no aún.

Matt toma mi cara con ambas manos, la mueve hacia mis mejillas y las acaricia.

—Dylan, dime. Por favor, nena.— me sorprendo cuando veo la nueva faceta de Matt.

Sus ojos están rojos, están llorosos. Lágrimas se esparcen por sus mejillas, mientras otras ruedan por ellas y caen sobre su cuello.

—Dylan, por favor— insiste. Sorbe los mocos y hace una mueca de desagrado, sonrió.

—Matt... Yo... Si, un chico, él. Hizo todo eso, no sé el porqué. Yo... Fui una estúpida, me deje llevar por sus falsos sentimientos hacia mi. Jamás pensé que fuera así, pero como soy una idiota, le creí.

Las manos de Matt se ciñeron a mis caderas, las deslizo hasta mi espalda baja y me acerco más a él.

—Jamás te volverá a pasar algo así. ¿Escuchaste, Dylan?— asentí —No te perderé de vista. Te protegeré siempre, nena.

—Gracias, Matt— le agradezco, acerco mis labios y dejo un beso suavecito sobre los suyos, sonríe.

—No debes agradecerme.— dice con una sonrisa preciosa en el rostro.

Acomodo su cabeza en el hueco de mi cuello, causando así que mi piel se erizara. Sonríe contra mi piel, haciendo que sonría sin darme cuenta.

—Dy, eres lo más lindo de mi vida. Te quiero— besa mi cuello, dejando húmedo, como siempre.

(***)

Matt pasa la lengua por sus labios rosados y continúa: —¿Tienes todo?— pregunta. Asiento y ruedo los ojos.

—Ya me has preguntado más de cinco veces lo mismo, Matt.— le informó mientras cojo mi pesada maleta. Él ríe.

—Dejame ayudarte, Dy.— se ofrece, abro la boca para que no lo haga. Pero me deja con las palabras en ella cuando la lleva en su mano.

Estoy muy ansiosa. Matthew y sus amigos, incluyendo a Anna y la novia de Gilinsky. Me invitaron a ir a la playa con ellos. Algo extraño, pero acepté de todas maneras.

Matt está mucho más emocionado que yo. Le encanta la playa, según lo que dijo él.

Mamá interrumpe mis pensamientos con su voz, que nos llama desdé la cocina. Seguimos bajando hasta el primer piso.
Cuando estamos allí, le hago un gesto a Matt para que venga conmigo, primero niega con la cabeza, y luego asiente sonriendo.

—¿Que pasa mamá?— está lavando los platos y cubiertos sucios, gira y puedo ver que lleva puesta un delantal rosado muy horrendo. Pero omito comentarios al respecto.

—Nada, solo quiero despedirme.

Deja la esponja sobre el lavaplatos, y limpia sus manos húmedas sobre el delantal. Se lo quita con cuidado para no desordenar su cabello, hoy tiene una cita con alguien.

Se me acerca y me abraza, besa mi mejilla y dice deshaciendo el abrazo:

—Adiós, te veré en tres días— besa mi mejilla otra vez.

Ahora va hacia Matt, él es mucho más alto que yo, ya que mido 1,59. Y él más de un 1.80.

—Cuida a mi hija, chico. La quiero sana y salva— le dice mirándolo a los ojos. Me pongo roja de la vergüenza. Matt lo nota y sonríe.

—Claro, tía. No se preocupé. Yo la cuido— guiña un ojo.

—Está bien, Matt. Se pueden ir. Los acompaño a fuera.

Ambos asentimos. Matt cogió la maleta nuevamente y seguimos a mamá hasta fuera. Saludé con la mano haciendo un gesto hacia los chicos y Anna que están en el coche estacionado frente a la casa. Saludaron todos con una sonrisa, Johnson solo hizo un ademán. Sigue enjado conmigo por tal confusión. Aún me siento culpable, por más que Anna me haya perdonado.

—Bueno, adiós mamá. Te veo pronto.— le di un beso en la mejilla.

Matt me agarró la mano desprevenida, me sorprendo y fijo la vista en nuestras manos entrelazadas.

La suelta y me siento vacía. Rápidamente guarda mi maleta en la parte trasera.

Me ayuda a subir en la parte más trasera del coche, él se sentó junto a mi, me sonrió. Anna está adelante con Johnson y Gilisnky, y su novia. Shawn y Carter un puesto más adelante. Y Cameron junto a Nash como copiloto.

Arrancó el coche y nuestro viaje comenzo. Paramos unas cuantas veces porque teníamos hambre. Reímos cuando decían bromas o cosas así. Era muy divertido.

Poso mi cabeza sobre el hombro de Matt con total confianza. Y el descansa la suya sobre la mía.

Matt me cogió por las piernas y me sentó sobre su regazo, sonrió. Dejé mi cabeza descansando en el hueco de su cuello, olía tan bien que no pude evitar sonreír. Comenzo a acariciar mi cabello y juguetear con esté, beso mi mejilla.

—Dude— Matt llama la atención de Johnson —¿Como está tu hijo?

Anna suelta un bufido enojada, le da un golpe en el pecho a Matt. Le molesta que hablen de su sobrino. Porque, si. Johnson es padre, y la madre no es Anna, es su hermana. Y a ella aún le molesta el hecho que Johnson hiciera tal cosa.

—Está bien. Me toca la próxima semana cuidarlo— sonríe.

—Si, genial.

Johnson ríe: —Bebé, te amo— le da un beso en los labios.

Anna posa su mano en él pecho y lo aparta, él ríe. Anna lo sigue y le da otro beso.

—Chicos, no quiero cursilerías ni babosadas. Por favor— habló Nash que conducía. Reímos.

(***)

—Pero... Dylan, vinimos a la playa. Debes ir, toma cambiate— me lanza un bikini. 

—Pero...

—Nada de peros, cambiate. Ahora— inquiere.

Obedezco, me cambio en el baño con prisa. Salgo del baño cubriéndome con una toalla.

—Quitate eso— Anna lo hace por mi. Me pongo roja. —Te ves hermosa, Dy.

—No digas mentiras.

—¿De qué hablas?

—Si. Mi trasero es gigante, y mis pechos también... No se ve bien— ella niega con la cabeza.

Me lleva a la otra habitación.

—Chicos, ¿como se ve Dylan?— pregunta Anna. Todos giran para verme y quedan boquiabiertos, me sonrojo hasta no más poder.

—Joder, nena. Me quieres matar— Matt se lame los labios.

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Gracias por leer