Antes de perderme.

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Le dijimos a mi madre lo que ocurría entre nosotros. Se veía tan feliz, incluso despertó a papá para decirle. El tuyo se enteró antes de responder a sus opciones.

¿Sabes? Fuimos muy afortunados por tener padres que nos dejaran ser y nos apoyaran. No todos tienen la misma suerte.

En la escuela no hubo problemas, claro que hubo algunos comentarios idiotas en un par de ocasiones, pero nunca importaron. Te tenía a ti, a mis amigos, a la vida por delante.

Crecimos demasiado rápido. El único lugar que parecía igual, era la casa del árbol. Seguíamos haciendo todo ahí.

Llegó el momento donde ¿Qué vas a estudiar? se hizo demasiado real.
Tú querías química, y la única universidad que te daría lo que buscabas, se encontraba a más de 10 horas en avión. Tu padre ya te esperaba en Japón, cómo no extrañarte, yo sé de eso.

No tenía la menor idea de qué hacer con mi vida, los 18 fueron tan espeluznantes como un edificio apunto de desplomarse sobre mí. Me invitaste a ir contigo, pero irse no es tan fácil.

Aunque no es lo más difícil con lo que hemos tenido que lidiar, ojalá lo fuera.

Todos los demás me decían que estudiara Bellas Artes. ¿Por qué los escuché a ellos y no a ti? Si eras el único que me importaba.

Me quedé, te fuiste. Algo se agrietó.
Yo terminé de romperlo.

Si Hubiera Sabido. [FRERARD] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora