Desde que te conocí (Castiel y tu)

Son como niños

En la tiende de leigh los chicos me entregaban ropa tras ropa, ambos disfrutaban el hecho de poder escoger algo que me quedara bien y que me sintiera cómoda con ello, se nota que ambos se complementan a la perfección, estuve horas entrando y saliendo de los probadores.

-¿Chicos de verdad creen que es necesario todo esto?-

-Claro que si-Dijo Rosalya- Y es por eso que pedí refuerzos-

-¿Eh?-

-Hola chicos, llegue-

-Alexy-

-Ahora verán lo que es un verdadero cambio-

-Definitivamente me quedare a vivir en esta tienda-Dije soltando un suspiro-

Al final terminamos saliendo de la tienda de leigh cuando el sol ya se había escondido, los chicos me acompañaron a casa y luego siguieron su camino.

Deje las prendas que habían escogido y mejor me quedaban sobre la cama y me senté a contemplarlas, no sé si esto era o no una buena idea, nunca me ha llamado la atención vestirme para impresionar a nadie, pero eso supone que hacemos ¿no?, vestirnos para impresionar. Solté un suspiro y prendí el computador.

-Hola Hija-mis padres se encontraban conectados a skype-

-Hola-

-¿Qué sucede?, Te ves decaída-

-No ha sido una buena semana-

-¿Qué sucedió?, sabes que puedes contar con nosotros-

-Bien, pero no me reten-

-No lo haremos, al menos yo no-Dijo mama fulminando con la mirada a mi padre-

-Hare lo posible, aunque si empiezas la oración con esa condición, no ha de ser nada muy bueno-

-Bien lo que sucedió...-Les explique lo sucedido en el instituto y luego lo que habíamos hecho con Rosalya-En fin no sé qué hacer-

-Qué tal si nos muestras esos conjuntos-Dijo mi madre-Podría darte mi opinión-

-Está bien-

Después de modelar mi padre discutió con mi madre respecto a que no he gustaba el conjunto que ella había escogido porque mostraba mi vientre, fue divertido escucharlos discutir, era como si estuvieran en casa, dándome un pequeño sermón, al final mi madre le convenció como siempre.

-Tus amigos tienen un buen sentido de la moda-

-¿Tú crees?-Le dijo mi padre aun un poco molesto-

-Claro que sí, es una ropa un poco llamativa, pero no excesiva, además Sucrette no pierde su esencia-

-Mi hija está creciendo y no estoy allí para verlo-

-Vamos amor no es para tanto-

-Tenemos que volver lo antes posible-

-Mi vida aún nos quedan dos eventos, tranquilo cuando lleguemos Sucrette no será una anciana-

-Pero tendrá novio, prácticamente será una mujer-

-Bien, creo que ya debo irme, buenas noches los amo-

-No ¡Sucrette!-

Cerré la pantalla del computador y me recosté en la cama. Son como niños.

Al día siguiente me puse el conjunto que los chicos habían escogido para mí y me observe en el espejo, la verdad me sentía un poco disfrazada, pero si esto servía para que Castiel no volviera a caer en los brazos de esa chica, valía la pena intentarlo.