Desde que te conocí (Castiel y tu)

Dime que me quieres

A pesar de lo que había dicho Rosalya, me coloque un poleron de color negro sobre la polera que me había escogido, supongo que cuando me vea me la hará sacar enseguida, pero al menos por ahora puedo pasar desapercibida en el trayecto.

Me quede en la entrada del instituto unos segundos, sentía un nudo en el estómago y también unas ganas tremendas de salir corriendo de allí, pero antes de poder hacerlo un brazo paso por sobre mi hombro.

-Hola Sucrette-Era Alexy-Piensas quedarte aquí todo el día, ¿o vas a entrar?-

-No lo sé, creo que esto no es una buena idea, ya me arrepentí-Dije un poco sonrojada-Vámonos de aquí-

-¿A qué te refieres?-

-Mudémonos, cambiemos nuestros nombres y vivamos alejados del resto-

-Eres graciosa-Dijo Alexy entre risas-Anda ya, entra te ves preciosa-

-No digo que no lo haga-Dije suspirando-

-¡Sucrette!-

-Wow el cambio de look hizo efecto antes de lo que esperábamos-

-Alexy no me dejes sola-

-¡Armin!, ¡claro ya voy gemelo!-

-Es un idiota-Dijo Armin quien venía detrás de nosotros-Buena suerte Sucrette-

-¿Tu también te iras?-

-Si no lo hago de seguro Rosalya me golpea-En ese momento tomo mi mano-Lo que me recuerda que me pidió que hiciera algo en caso de que ella no estuviera cerca-

Con un rápido movimiento me hizo girar, haciéndome quedar de frente a Castiel y sacándome el poleron.

-Hoy no hace frio, por lo que te lo devolveré después-

Sentí como la sangre subía a mis mejillas, Castiel se quedó en silencio unos minutos observándome de pies a cabeza.

-Ho... hola Castiel, ¿Qué quieres?-El chico seguía mirándome sin decir nada-¿Tan mal me veo?-

En ese momento Debrah apareció tomando el brazo de Castiel y mirándome de la misma forma que él, pero a excepción de él, ella si dijo algo, soltó una pequeña risa.

-¿De verdad crees que eso te queda bien?, vamos ese no es tu estilo niña-

Mordí mi labio un poco nervioso, la verdad es que pensaba igual que ella, de verdad esto había sido una mala idea.

-Sera mejor que te cambies de ropa eso no te queda-

-Tiene razón-Castiel hablo, sentí nuevamente la presión en mi pecho-Ese no es tu estilo-Dijo zafándose del agarre de Debrah y caminando hacia mí-

-Yo...-trague saliva-Solo quise cambiar un poco, a los chicos parecía agradarles-

-Supongo que Rosalya y Alexy te convencieron-

-¿Gatito?-

Di un paso hacia atrás, quería salir corriendo, pero Castiel no me lo permitió, tomo mi muñeca y esbozo una gran sonrisa.

-¿Ca... Castiel?, ¿Qué estás haciendo?-

-Si ¿Qué crees que estás haciendo?-Pregunto molesta Debrah-

-Algo que debía haber hecho hace mucho tiempo-

En ese momento jalo de mi muñeca, puso su otra mano detrás de mi cabeza y poso sus labios sobre los míos. Sentí como si el tiempo en ese momento se detuviera, podía escuchar los gritos de Debrah e incluso los murmullos de los demás, pero era como si cada vez se fueran alejando más. Cuando respondí al beso de Castiel soltó mi muñeca y rodeo mi cintura.

-Ya suéltala Castiel, Sucrette necesita respirar, además estas montando un espectáculo de aquellos-

-Como fastidias Nathaniel-Dijo Castiel soltando un gruñido y alejándose de mí-

A pesar de que había interrumpido nuestro momento tenía razón, necesitaba respirar. Pude notar como Rosalya aplaudía desde la entrada con una gran sonrisa en su rostro y como Debrah me fulminaba con la mirada y luego decidió alejarse.

-Toma-En ese momento Castiel me tiro su chaqueta-Cúbrete no me gusta cómo te está mirando este delegaducho-

Mire a Nathaniel quien se había sonrojado al notar que lo observaba y decidió seguir su camino. Me puse su chaqueta y los mire confundida.

-Pensé que ustedes dos...-

-No, desde que llego solo ha estado fastidiando, además le he dicho como mil veces que no quiero que me siga llamando así, no somos nada y si me hubieras escuchado ese día no habrías hecho esta tontería-

-¿De verdad tan mal me veo?-

-Claro que no, pero no me gusta cómo te quedan mirando, además me gusta tu estilo, no necesitas cambiarlo solo para impresionarme-

-¿Quién dice que lo hice por eso?-

-Seguro no, admítelo solo querías provocarme-

-Quizás quería provocar a Nathaniel-Dije cruzándome de brazos él frunció el ceño, entonces solté una pequeña risa-Vamos se nos hará tarde-