-Los extrañaré...
Había pasado casi una semana desde que había terminado el ciclo escolar y terminado su generación. Sus amigos habían ido a su casa para una comida de despedida.
Se la pasó algo triste y no solo por qué tenía miedo de no volver a ver a sus amigos, no, ella sabía que nunca los dejaría de ver.
El día anterior habían ido otros amigos, ellos y los de la secundaria no se llevaban bien, su mamá invito a su mejor amiga a que conviviera el día siguiente, Angelica le dijo que si no quería asistir no habría problemas, no le dijo que prefería que no fuera.
Todos sus amigos son sociables, tienen temas varios pero cuando todos se encontraban, solo no congeniaban.
Su tristeza se debía a la presencia de Mariana. Nadie además de Tom sabía que Angelica se sentía horrible, sentía como si la hiciera menos. Todos le preguntaban que tenía.
Nada, como siempre.El tiempo no fue suficiente. Se había caído de la bicicleta con una amiga y se entretuvieron limpiando la rodilla de Tery, una chica simpática con rulos y lentes, le había tocado un gran madrazo.
Compraron "cervezas" y fueron a los juegos para decir un discurso de despedida.
Si tan solo les hubiera dicho que se habían caído, cada uno habría terminado con su discurso...-Nunca es un adiós si no lo dejas claro- le dijo Tom con una media sonrisa.
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Te cuento mi historia
Genç KurguEste es mi diario, el lugar de mis pensamientos y mis sentimientos. Cuidado con lo que lees, puedes saber de más.